—Di dígame, Señor Montemayor, para que soy bueno, —dice tartamudeando y secándose las manos en su pantalón, su mirada no la levanta.
—Los informes que me dio esta mañana no concuerdan con los que paso la semana pasada —dice Zully retándolo con la mirada —díganos, señor Gómez, ¿hay algo que nosotros debamos saber?,-le pregunta y eso hace que se ponga más nervioso—No sé de qué habla, señorita Montemayor, yo le di los balances correctos, ahí están todos los gastos que la empresa ha tenido y los ingresos que ha habido —dice tembloroso, lo cual no le creo nada.—Señor Gómez, sabía que si no nos dice la verdad, ¿podremos demandarlo por fraude a la empresa y mandarlo a la cárcel? —le digo desde el lugar donde estoy, ya que no me sentía cómodo estar cerca de él, —solo queremos que nos diga quien le pidió hacer estos desvíos y le prometo que lo dejaremos fuera de esto, como si no hubiera pasado nada, —menciono y este hombre nos queda viendo a todos.—Señor, he trabajado muchTengo dinero ahorrado y puedo inyectarle capital a la empresa de papá, pero antes quiero saber que quiere la señora Fátima, como logro entrar a la empresa. Entre Tadeo y yo estamos entrando a la empresa de los Soler por medio de sus sistemas y no hay nada bueno, están en la quiebra, la empresa va a desaparecer muy pronto.Logramos recuperar el dinero que nos robaron, son tan tontos que no lograron sacarlo fuera hacia otras cuentas, estaban en las cuentas de Fátima y de su marido o amante, no sé lo que es y no me importa. Pero no sé escapan de una visita que iré con papá, quiero verla, conocerla y dejarle en claro que no nos moleste.—Casi no lo logramos, —me dice Tadeo estirando los brazos de lo cansado que está, se pasó toda la tarde ayudándome, —ahora ¿qué piensas hacer con esa información, la empresa de tu mamá está en quiebra, tal vez deberías pensar en comprarla? Me dice y me quedo en silencio mirando hacia la ciudad que empieza a iluminarse por las luces de l
Hay días como hoy que prefiero estar encerrado, sin contacto de ninguno de mis familiares, me ayuda a pensar, pero en ocasiones me sumergen en depresión y quisiera acabar con todo de una sola vez.Pero hoy no, hoy saldré con la mirada y la cabeza en alto como padre me lo ha enseñado que los problemas de la vida, los enfrentamos con firmeza, así que ya tomé la decisión y veré a la señora Fátima, por Tadeo es que sé que con engaños y artimañas entro en sociedad con papá o más bien por medio de un presta nombre y ya se quien es, el gran señor Senovio García, ese hombre que se opuso cuando papá me entrego la presidencia.—Buenos días —saludo al llegar a la mesa donde están mis papás y mi hermana desayunando.—Mano buenos días, ven siéntate a mi lado —me saluda Zully —voy para la universidad, si quieres te dejo en la oficina —me dice mientras me pasa un pan con mantequilla.—No princesa, no voy a la oficina —le digo y volteo a ver a papá —voy a empresas Soler ¿quisieras acompañarme padre?
Hay días como hoy que prefiero estar encerrado, sin contacto de ninguno de mis familiares, me ayuda a pensar, pero en ocasiones me sumergen en depresión y quisiera acabar con todo de una sola vez.Pero hoy no, hoy saldré con la mirada y la cabeza en alto como padre me lo ha enseñado que los problemas de la vida, los enfrentamos con firmeza, así que ya tomé la decisión y veré a la señora Fátima, por Tadeo es que sé que con engaños y artimañas entro en sociedad con papá o más bien por medio de un presta nombre y ya se quien es, el gran señor Senovio García, ese hombre que se opuso cuando papá me entrego la presidencia.—Buenos días —saludo al llegar a la mesa donde están mis papás y mi hermana desayunando.—Mano buenos días, ven siéntate a mi lado —me saluda Zully —voy para la universidad, si quieres te dejo en la oficina —me dice mientras me pasa un pan con mantequilla.—No princesa, no voy a la oficina —le digo y volteo a ver a papá —voy a empresa
Llegamos a la hacienda del abuelo, el papá de mamá me encanta estar ahí, me hace sentir paz, bajé del auto en completo silencio y caminé hacia el árbol de abeto que está a la orilla del río que corre en medio del terreno de la hacienda.Me senté bajo el árbol y lloré, lloré de impotencia de ser como soy, de no poder defenderme o más bien no saber cómo defenderme de todos los que me tratan como si fuera un mounstro, me quedé dormido el ruido del agua correr me arrulló, una caricia en mi cabello me hizo despertar, era el abuelo.—Mi nieto, mi muchacho ¡aquí estás! —me dice mi abuelo con esa calma con la que me habla, —ven vamos a comer, ya dormiste mucho, no se que pasó, pero no debes de hacer caso a lo que los demás digan, tu eres tu y nadie va a cambiar tu forma de ser —me dice dándome la mano para levantarme.—Gracias abuelo, el agua del río me durmió —le digo y es lo que siempre le digo cuando aquí me quedo dormido y es cada vez que vengo a este lugar, —
¿Cómo o que hacer cuando ves que las personas que crees que son lo de deben amarte y protegerte, te desprecian? Aunque crecí en una familia feliz, me dieron amor, me apoyaron hay algo dentro de mí que siente ese vacío.No puedo dormir, me levanto y voy a la cocina por un vaso de leche, me siento en la barra, mis manos sudan, siento que ya no tengo control en mi cuerpo, todo me está afectando.Mmm—¿Que haces despierto campeón? —me pregunta mi padre entrando a la cocina y sentándose a lado mío —ya llevas rato despierto, dime ¿qué quieres que papá haga por Luciano? —vuelve a preguntar haciendo que lo mire a los ojos.—¡Padre!, ¿que le hice a mi madre que me desprecia tanto? —le digo, a lo que mi padre abre los ojos y toma mis manos secando el sudor con un pañuelo.—Tu madre te quiere, siempre te lo ha demostrado aunque no seas su hijo de sangre —me dice y yo niego con la cabeza.—No padre Mamá Molly me ama, yo digo de ella —le digo
ClaraMinerva mi hermana me dejó en la cafetería, como cada vez que quería venir a estar en un lugar tranquilo, mi espacio así lo llamo ese rinconcito que don Lupe acondicionó para mí sin que nadie pueda acercarse.El otro día que ese joven se acercó y no sé con que intención me hizo sentir incómoda, no me hablo solo me veía y eso no me gustaba, lo bueno es que llegó el joven Luciano y me ayudó a salir de ahí.Hablando del joven Luciano, ya no lo he vuelto a ver desde ese día, este fin de semana es la gala por el aniversario de la empresa de su papá y mi familia está invitada, siempre a esas fiestas va mi papá con Mine, a mí no me gusta ir, no me siento cómoda entre tanta gente, solo con mi familia o algunos conocidos puedo estar un rato.La mayor parte de mi carrera la hice en línea, a la escuela solo iba a presentar los exámenes o por algo en especial, solo tengo una amiga desde la infancia Trinidad Campos, ahora casi no nos vemos desde que se fue a estudiar a otro estado, viene sol
Llegamos al restaurante, papá pide un privado, la mesera se me quedó viendo, no me gusta que me vean, toque el brazo de papá y volteando a ver a otro lado.—Señorita, ella no tiene nada raro en su cara o que se le perdió —dice Mine molesta y de reojo vi como la mesera bajo la cabeza, —no somos raros, limítese a traer la orden o pido que alguien más nos atienda —le dice y ella sale casi corriendo.—No debes ser grosera con las personas —dice papá y Mine pone los ojos en blanco, —debemos entender que no todas las personas se acostumbran a tratar con personas especiales —habla y es interrumpido por Mine, yo estoy en silencio viendo unos correos que me acaban de llegar.—Si papá, pero la ven como si fuera de otro planeta, —dice y sé que está molesta, lo veo en sus ojos, siempre me ha defendido, —está bien no lo vuelvo a hacer, para la próxima tendré más paciencia que no es lo mío —dice acomodándose en su silla.Comimos en total calma, papá platicó de un viaje que hará en unas semanas, y M
—No me gusta —le digo levantándome y tomando el libro que estaba leyendo, la dejo con sus gritos y entro a la casa.Llegó papá de la oficina, nos sentamos a la mesa a cenar, Mine me quedaba viendo y sonreía, yo agachada le dije —me voy a enojar —y seguí comiendo.—Mañana a medio día el joven Luciano llevará los planos corregidos a la empresa ¿te gustaría estar presente mi bella hija? —me pregunta papá, no le digo nada solo le sonrío, —son los últimos detalles para viajar la próxima semana a ver los terrenos por lo que viajaremos tú yo mientras mi hermosa flor se queda al mando en la empresa —dice dirigiéndose a mi hermana.—Está bien papá, —responde Mine —pero, ¿si vamos a ir a la fiesta del aniversario de la empresa del papá de mi amigo verdad? —le pregunta a papá.—Si hija y quiero que acompañes a tu hermana por su vestido, ella también irá está vez —dice y lo mire sorprendida, es la primera vez que voy a esos eventos.—Bien papá, mañan