El ambiente de la casa se encontraba en tensión, mi hermano estaba sentado en extremo de la sala y yo en el otro, de réferi se encontraba Adama, Rebeca y Anthony, los tres se encontraban en completo silencio esperando que alguno de los dos tirara la primera piedra, yo no pretendía iniciar nada, él fue el que hizo todo su drama y él es que me debe pedir perdón. Pero conociendo lo orgullo que es aquel muchacho y lo que le cuesta para aceptar que estaba equivocado hay que esperar un buen tiempo.
- Esto es una pérdida de tiempo- digo mirando a mí a los chicos- tu sabes cómo es él y lo que le cuesta aceptar que estaba equivocado- esta vez solo le hablo a Adam.
- Es una cualidad de la cual carezco.
- ¡No me digas! &n
Estábamos sentados viendo como mis padres nos veían con enojos y con justa razón ya que nos habían capturado con las manos en la masa y no teníamos con que defendernos, Anthony, Rebeca, María y Alisa se habían ido a sus casas cuando vieron a mis padres, Adam se quedó con nosotros porque mis padres se lo pidieron, pero él también iba a huir de la furia de los Weys.- Me han decepcionado los tres- comienza mi madre a hablar, cuando Grace Weys habla es para extenderse durante varios minutos. – miren a su alrededor, la casa está hecha un nido de rata, hay latas de cerveza tiradas, los muebles tienen marcas de zapatos y no quiero imaginar cómo estará el segundo piso de esta casa.- Clausuramos ese lug...
Podía ver el rostro consternado de Tony, él no tenía ni la menor idea de que su tía había abandonado a su primo de esta manera, Rebeca no tenía palabras para decir porque era un tema bastante delicado y nosotros no éramos quien, para juzgar, pero en cambio Tony no dejaba de pensar en eso, el intento levantarse e ir con Adam, pero se lo prohibí porque le prometí a Adam que no le diría nada a nadie, también les conté cuando me beso y se quedaron sorprendidos al escuchar aquello porque todos sabían que Adam tenía gustos bastantes diferentes, nuestro plan aún seguía en marcha para saber cuáles eran sus intenciones conmigo.- Hola chicos- nos quedamos en silencio cuando Jackson se sentó en nuestra mesa. - ¿interrumpí algo?
AmberNo podía descifrar el rostro de mi hermano, solo estaba ahí mirando al piso como si le proporcionara todas las respuestas de las preguntas que se está formulando y es que Jackson es una persona muy sensible por lo cual cuando recibe alguna noticia impactante suele reaccionar de inmediato, pero ahora no, solo estaba ahí sin decir nada.Anthony al escuchar la noticia solo se levantó y salió de la casa, mientras se le podía per consternado, era momento de que me pusiera en acción.Aclaro mi garganta para llamar la atención de mi hermano, pero este sigue sin reaccionar- Jackson- digo en un tono alto.El simplemente alza su mirada.
Salimos de casa como alma que lleva el diablo, ninguno de los dos se cambió de ropa y partimos en pijama, hacia un frio de muerte, pero era necesario llegar lo antes posible y evitar una tragedia, Jackson estaciona su auto como sea y corremos a la puerta, tocamos infinidades de veces, pero nadie nos atiende, sin medir daños, mi hermano patea con fuerza la puerta de la residencia, esta se abre de par ante nosotros. Corremos escaleras arriba hasta la habitación de Adam, no había señales de en este, me dirijo al baño y tampoco no hay rastro de él.- Deberíamos dividirnos, la casa es bastante grande y puede estar en cualquier lugar- dice mi hermano, lucia desesperado, a decir verdad. - ¡Demonios! - patea un objeto que estaba en el piso.- No nos ofusquemos, debemos encontrarlo an
Se encontraban impotentes viendo al pobre chico conectado en una máquina que lleva el seguimiento de sus signos vitales, y una bolsa de suero para mantenerlo hidratado. Por su cabeza solo pasaban situaciones parecidas solo que, con sus hijos, cada uno recapacitaba por las veces que dejaron a sus hijos solos durante varias semanas incluso hasta un mes completo. En cambio, los padres de este chico no tenían corazón al haberlo dejado solo a su suerte, y puede que viva en una mansión y tener un gran auto, pero dejar a su hijo solo es dejarlo a su suerte.Grace Weys toma su teléfono y marca un número, con tan solo dos tonos toman el teléfono.- Hola Grace, ¿cómo estás? - se escuchaba muy animada, en el fondo se podía escuchar las risas de dos pequeñas. Grace
Narra Adam.Viendo toda esta situación me he dado cuenta que le hice daño a la persona incorrecta, ella ha hecho todo esto por verme bien, y el remordimiento no para de comerme la cabeza, le deberé la vida y la otra a Amber, y claro que también a sus padres por ofrecerme su casa para vivir. Ahora me encuentro en la habitación de invitados, donde siempre dormía, solo que ahora la mayoría de mis cosas se encuentran en el cuarto, en el hospital solo dura un día y durante toda la noche la pase en observación. También me citaron al psicólogo ya que según el doctor estaba presentando indicios de depresión, debía ir lo antes posible antes de que se agravará más mi situación.Los chicos no se encuentran en casa
Amber.Han pasado varias semanas desde la última vez que vimos a los padres de Adam, el chico ha estada la expectativa de cualquier movimiento que hagan. Mis padres también han tenido unas semanas ajetreadas, mueven papeles de aquí allá junto con abogados visitando la casa a toda hora del día, mientras nosotros nos carcomemos la cabeza por saber qué es lo que está sucediendo; pero su excusa fue que no podíamos saberlo hasta que todo estuviera listo.En cuanto a Adam y su salud, se encuentra bastante mejor, ha asistido al psicólogo tres veces a la semana, ha estado más animando que nunca, volvió a la escuela y a jugar en el equipo como lo solía hacer, desde el primer día que volvió a reintegrarse en la escuela las especulaci
Adam y yo nos vemos al ver nuestros nombres juntos y a los innombrable juntos, estoy segura de que la vida nos quiere ver todo el tiempo peleando con aquella nueva pareja de novios.- ¿con quién les toco chicos? - pregunta Rebeca, al ver que ninguno de los dos decía absolutamente nada.- Con Mandy y Luke- respondo con fastidio. Se suponía que el fin de semana iba a ser genial e inolvidable, lejos de la ruidosa ciudad y de las tortuosas clases. Incluso tuve hasta la esperanza que no iba a ver a Mandy y as sus secuaces durante los dos días, entre más de trecientos alumnos que están en último año.- Un problema termina y uno nuevo comienza- bufa mi hermano al escuchar aquellos nombres- deberían hablar con el profesor, q