SOLEDAD:
Lena sostiene mi mano con fuerzas mientras puedo ver el miedo reflejado en sus ojos. De pronto un extraño sonido nos alerta a todos y por inercia ambas miramos hacia la derecha de donde proviene. —¿Qué es eso? Qué sonido más extraño. Dice uno de los cazadores y todos asienten de acuerdo. —Vamos a ver qué es. Menciona el que parece ser el jefe y todos se retiran de manera inmediata. Cuándo ya no siento a nadie, ambas respiramos aliviadas y nos miramos. —Eso estuvo cerca. Murmuro colocando una de mis manos en mi pecho y trato de tomar aire varias veces. —Si, muy cerca… Ahora vámonos de aquí antes de que vuelvan. Dice y de un salto baja del árbol y yo hago lo mismo. —Conoces el bosque… ¿Dónde es más seguro? —Es mejor ir por el camino contrario, ellos fueron a la derecha… Vamos por la izquierda. Menciona y asiento de acuerdo. Las dos comenzamos a correr por el lado contrario para alejarnos de ese lugar, pero me detengo al ver que la hada corre más lento y su respiración es agitada. —¿Enserio ya estás cansada? Le pregunto y ella niega mientras trata de hablar con la respiración agitada. —Estoy bien… Es solo que llevo mucho tiempo que no caliento. Dice y niego para luego quitarme las pocas ropas rasgadas que llevo y me transforma en lobo. Me recuesto para que ella suba a mi lomo, y la miro dudar, pero luego toma mis ropas entre sus manos y se sube a mi lomo. —Debemos alejarnos lo más que podamos. Le digo a mi loba y esta asiente. —De acuerdo. Dice esta y nos alejamos a toda velocidad. Nos detenemos al pie de una hermosa montaña y observamos cómo comienza a rayar el alba trayendo consigo una hermosa mañana. Vuelvo a transformarme en humana, me coloco los trapos viejos y con un suspiro me dedico a observar cómo sale el sol. —Que hermosa mañana. Susurra Lena y la miro asintiendo. —Pero tengo hambre, debemos de cazar algo. Al terminar esas palabras una ave de color negro se posa en una pequeña rama y ella me mira con ojos brillantes y yo niego. —No creo que sea buena idea… Pero no termino de hablar cuándo la loca va detrás de la ave, y esta al verla se espanta alzando el vuelo. —Busca una piedra Soli, esta ave será nuestro desayuno. Grita y la ave la mira con ojos rojos al escuchar lo que ella dice y de pronto se lanza a ella tirándole picotazos. —¡Quítame está cosa! Rapidooo. Grita como loca y yo solo me río al ver cómo la ave la picotea en todo el cuerpo. Cuándo aquel pájaro termina de hacer su cometido se dirige a mí y yo saco mis colmillos para defenderme, pero este se detiene a unos metros de mí y observo sorprendida cómo se transforma en un humano con una capa negra. Aquel ser me mira para luego sonreír mostrando sus dientes blancos. —Por fin encontré la llave, mi amo estará muy feliz. Menciona con voz ronca y yo lo miro sin entender. —¿Qué eres? ¿Quién eres? ¿Qué llave? ¿Quién es tu amo? Hago todas las preguntas y esa ave-humano me mira para luego volver a sonreír. —Yo salvé a ambas de esos cazadores, al menos debo recibir un agradecimiento ¿No creen? Iba a responder, pero un fuerte golpe por parte de Lena hace que aquel hombre caiga al suelo con los ojos cerrados. —¿Será que lo maté? Pregunta esta aún con el palo en la mano. —Aún está respirando, hay que atarlo antes de que despierte. Menciono y ambas nos ponemos manos a la obra. OSSIAN VITALE: Nos dirigimos a mi manada en los lujosos autos y miro el bosque concentrado en cada pequeña cosa que pasa. —Alfa, los ancianos del consejo le han conseguido una prometida, ellos dicen que debe de casarse para que la manada crezca… Un fuerte gruñido de mi parte hace que mi beta se detenga y lo miro con el ceño fruncido. —¿Cuándo llega? Le pregunto y este me mira con algo de nervios. —Ya está en la manada alfa. Otro fuerte gruñido hace que el auto resuene y trato de controlarme. —Malditos ancianos, los voy a matar a todos. Vuelvo a gruñir y escucho la voz de Williams en mi cabeza. —Amo, encontré la llave. Sonrío de medio lado. —¿De verdad? ¿No me estás jugando una broma? —Amo, sabe que jamás haría algo como eso. —Tienes razón, protegerla hasta que llegue a tí ¿Entendido? —Sí amo. Dice y cierro el link mientras sonrío con arrogancia. -Estoy un paso más adelante que ustedes malditos ancianos. Pienso mientras observo a mi beta de reojo.OSSIAN VITALE:Cuándo llego a mi manada aspiro el suave aroma de la naturaleza y me siento en casa.Mi lujoso auto aparca frente a mí mansión y me bajo con elegancia mientras soy recibido por mi madre.—Mi bebé, mi niño, cuánto me alegra que hayas vuelto.Dice con evidente emoción y yo la miro con una sonrisa.—Ya no soy un niño ma.—Para mi siempre lo serás.Dice con ojos de amor y yo la envuelvo en mis cálidos brazos.—¿Dónde está papá?Le pregunto y ella rueda los ojos resoplando.—Está con los ancianos decrépitos.Dice con evidente molestia y yo sonrío besando su frente.—Bien, entonces iré allá.Me separo de mi madre y camino con dirección hacía mi padre.Observo como mi beta permanece de pies mientras miro todo el intercambio de palabras sin decir media palabra.—Puedes ir y descansar Diego.Le digo y este hace una leve reverencia.—Como ordene alfa.Dice y observo cómo se marcha sin mirar atrás.Continúo con mi camino por los pasillos de la mansión, pero un fuerte olor hace qu
SOLEDAD:—¿Quién rayos eres?Le pregunto de manera cortante y este ríe de medio lado sin dejar de mirarme.—¿Quién crees que soy? Pregunta dando pasos hacia mí y yo me alejo con todos mis sentidos alerta, mientras mi loba trata de no someterse a él.—Es un alfa, es un lobo alfa.Dice mi loba alarmada y yo abro los .ojos esperando lo peor.Miro a Lena y esta solo mira al lobo con una sonrisa boba y yo ruedo los ojos.—Veo que se conocen.Le señalo al hombre-ave, mientras doy varios pasos y me acerco a Lena.—Así es.Menciona en un tono de voz grave que hace que mi piel se erice.—Entonces negociamos, usted se lleva a su amigo y nosotros nos vamos, un gusto conocerlo, adiós.Tomo la mano de la hada y camino con velocidad para alejarme, pero su voz de alfa hace que me paralice.—Detente ahí.Muerdo mis labios con fuerza al luchar contra mi fuerza de voluntad, pero al ser omega, me hace ser susceptible a su voz de alfa.—¿Por qué nos vamos a ir? Podemos hacer un dos para dos.—¡Lena por
LENA:El precioso hombre-ave, me toma de sus grandes manos y me lleva a rastras por el bosque.Solo me da tiempo a mirar como Soledad es llevada en los brazos del hermoso hombre que la mira como si quisiera comérsela.Al cabo de unos minutos mi respiración es casi nula y siento como me falta el aire.—Espe… Espera…Hablo con la voz entrecortada y el chico se detiene.—¿Cómo es que estás cansada? ¿No haces ejercicios? ¿Cómo un hada puede tener tan poca resistencia?—No tienes derecho a criticarme.Le señalo con el dedo acusatorio y este niega varias veces y se inclina delante de mí.—Subete.—¿Qué?—Que te subas, no podemos perder más tiempo.Habla con poca paciencia y yo me ofendo.—O sea… ¿Estás perdiendo el tiempo por mi culpa?—Si.Dice claro y yo abro la boca incrédula.—Descuida, yo puedo correr por mis propios pies.Digo comenzando a caminar mientras le paso por el lado con cara enojada.—Que terca eres, nada más eres una cara bonita.Dice y me detengo para mirarlo más enojada d
—Yo Dylan Scott, te rechazo a ti Soledad Miller como mi mate y futura luna de esta manada.Dice con media sonrisa mientras frunce el ceño por el dolor, pero se mantiene como lo que es él… Una maldita escoria.En este preciso momento muerdo mis mejillas con fuerza al sentir como mi pecho se contrae por el intenso dolor que estoy sintiendo, mi loba aulla con el corazón roto, pero me mantengo de pies, está vez no voy a humillarme como las otras veces solo por ser una omega.Miro a mi alrededor y todos están observando, incluyendo mis padres y mi hermana mayor por un año que la consideran una de las lobas más fuertes de la manada.Esta me mira con media sonrisa burlona y mis padres me miran como siempre, la débil omega que no vale nada.Levanto mi mirada al alfa y abro la boca para defenderme por primera vez.—Yo Soledad Miller… Acepto el rechazo…Y con la voz temblorosa continuó mis últimas palabras sin mirar a nadie más, mas que el alfa.—También desde hoy mi loba y yo abandonamos la ma
El alfa Dylan Scoot se cuela por los pasillos donde están las celdas, y con una sonrisa piensa en las mil cosas que le hará a la débil omega... Claro, es suya y tiene que cumplir su deber como su mate, aunque la muy estúpida lo haya rechazado.Camina como si fuera el rey del mundo, pero frunce el ceño al sentir el aroma de Rachelle Miller… ¿Qué hace ella aquí?Piensa extrañado y abre la puerta de la celda para ver a la loba con una herida en su estómago mientras mira a la puerta con furia, pero su mirada se vuelve sumisa cuándo mira al alfa entrar con cara de pocos amigos.—¿Dónde está?Pregunta con un mal presentimiento.—Alfa yo…Habla apretando los dientes por el dolor que le ha causado la herida que no quiere cerrar, debido a que la daga es de plata pura.—¡Te pregunté dónde está mi luna!Exclama sintiendo como la furia comienza a correr por sus venas.—Escapó, escapó cuándo abrí la puerta para venir a ver cómo estaba.Miente la loba descaradamente y el alfa golpea la pared con fu
El alfa Dylan enfurece al saber que sus ineptos hombres no han podido dar con su mujer.—La omega es muy rápida, hemos perdido su rastro en medio del bosque.Dice uno de sus hombres y el alfa lo mira con ojos rojos enfurecido.—¡Malditos ineptos! ¡Encuentrenla maldita sea!Les grita y sus hombres bajan la cabeza para retirarse de manera inmediata antes de que el alfa los mate a todos.SOLEDAD:Al día siguiente camino con cautela en medio del bosque para no encontrarme con ninguna criatura que pueda poner mi vida en riesgo, y así continuamos por varias horas en medio del extenso bosque que solo me hace respirar paz y tranquilidad.Observo los verdes árboles, las hierbas frescas y las hermosas mariposas que vuelan en algunas flores muy hermosas... Esto es simplemente hermoso.Solo nos detenemos para cazar algo y comer, para luego continuar con nuestro camino sin descanso.Mientras mi loba y yo vamos inmersa en nuestros pensamientos escucho un ruido que me hace detenerme de golpe.—¿Escu
SOLEDAD:La noche llegó y ambas tomamos un descanso para luego continuar con el camino a la mañana siguiente.—¿Tienes hermanos?Me pregunta Lena sin poder dejar de hablar por solo un momento.—Si.Respondo y ella suspira.—Yo tengo cuatros hermanos aparte de mí, dos varones y dos hembras.—Que bien, yo solo tengo una hermana.Hablo en un tono bajo mientras observo las hermosas estrellas del cielo.—¿Cómo es ella contigo?Su pregunta me hace dudar de mi respuesta, pero respondo.—Es un demonio en persona.Murmuro y Lena permanece en silencio por unos segundos.—Mis hermanos tampoco me quieren, ellos me detestan por no ser alguien que valga la pena… La verdad es que te seguí porque tu olor me recuerda a mí.Giro mi cabeza y miro al hada.—¿De qué hablas?—Llevo muchos años viviendo en el bosque, es mi hogar… Cuándo te sentí, me llegó tu aroma a lluvia y hojas caídas… Era como si llevarás consigo la melancolía de un bosque otoñal.¿Te puedo llamar Soli?La chica cambia por completo el t