— Saluda mi amor, él es un amigo y nuestro jefe — Manifestó Emily mirando a su pequeño, esa reacción definitivamente no era para Sergio, si no para William.
— Tal vez sabe que es alguien no digno de admirar — Pronunció Sergio, cacheteándose internamente porque ella no sabía de su rivalidad, donde tuvo una mirada conectada con Leo parecía que estaba tranquilo por él.
— No te preocupes, es porque recién me está viendo — Contestó William con delicadeza arrodillándose sobre su pantalón odiando ese acto porque se iba a ensuciar, pero hacía parte de su plan — Leo te llamas, ¿verdad? mucho gusto, mi nombre es William — Dijo mostrando su mano como signo de paz.
— No te acerques — Afirmó Leo con recelos escondiéndose detrás de Emily, quien
— ¿Que alcanzaste a escuchar? — Interrogó directamente Lore hacia Emily mirándola directamente a los ojos, mientras Sergio sudaba internamente por la situación donde Leo se dio cuenta, aunque era un niño que no se expresaba fácilmente, el sentía y entendía mucho mejor que los adultos.— Nada importante, debo irme — Contestó con seriedad Emily, estaba cansada realmente como para ponerse a pensar en lo que acababa de escuchar, tal vez eran suposiciones suyas — Nos vamos, Leo — Ordenó dando media vuelta para dirigirse hacia la puerta principal, donde Leo soltó a Sergio de las piernas para irse detrás de ella agarrándola de la mano, cogiendo un taxi directo hacia su casa.Cuando llegaron, sintió que no podía dar más, pero para su mala suerte su madre se encontraba enferma, hab
— Me estás tomando del pelo ¿verdad? tiene que ser un chiste… — Manifestó Emily en medio de su impresión, no podía creer como no se había dado cuenta antes <<porque me dormiste, así que no te aviso>> manifestó su loba interior, causando mayor impotencia en ella.— No, sé que me odiaras por decirte la verdad; especialmente porque se tu historia — Susurro Nicolas de forma calmada, estaba esperando el momento en que Emily iba a explotar.— ¿Odiarte? eso es lo de menos, ¡me acabas de traicionar! Pensé que eras mi amigo — Confesó Emily colocándose de pie, llamando la atención de todos a su alrededor.— Por favor, hablemos afuera — Susurro Nicolas por ver que todo el mundo estaba atento al chisme odiando a la multitud.— &iexc
Al siguiente día, Sergio se dirigió hacia su empresa mientras Emily iba a su casa a realizar la terapia con la pequeña Lily, esta vez no quiso estar presente porque tenía miedo, había sido muy reciente el que se enterara de la identidad secreta de Nicolas así que no podría arriesgarse a ser descubierto también. Preguntó a su secretaria por las entrevistas que tenía acumuladas para los diferentes oficios, donde la invitó a llamarlos para ser recibidos uno a uno siendo un arduo trabajo para él, pero al menos así se tranquilizaba un poco o si se estresa iba a ser por un tema diferente a su mate, a su terapeuta, a su Emily.Había pasado aproximadamente dos horas entre entrevista a entrevista donde solo había contratado a dos personas; una para servicios generales y otra para ser auxiliar de contaduría de su empresa. Faltaban solo tres entrevistas, para fin
Emily se sentía mal por lo sucedido con William en su primera cita; sentía que su cara estaba roja de la vergüenza y tal vez él no volvería a fijarse en ella; tendría razón porque a la final seguía presente el recuerdo tormentoso de su ex pareja, especialmente desde que sabe que los seres sobrenaturales siguen rodando en su vida. Llegó a su casa dirigiéndose a la habitación de su pequeño Leo quien se encontraba ya durmiendo plácidamente mientras abrazaba a su oso; Emily decidió acostarse al lado de él con mucho cuidado de despertarlo; ya que eso ocasionaba un Leo muy mal genio y caprichoso lo cual intentaba evitar. Se recostó, abrazándolo con cuidado y sintiendo su calor interno; sacando una sonrisa en ella mientras salían lágrimas involuntarias porque sabía que él era su mayor bendición de la vida dada por la diosa luna; aunque la d
Emily se había alistado con su ropa deportiva que consistía en el top y el leggins negro acompañado de tenis blancos; cogiendo su cabello como una cola de cabello y asegurándose que su pequeño hijo se encontrara durmiendo todavía. Emily sabía que la hora de siempre era temprano; porque era el momento adecuado para los dos antes de iniciar con las obligaciones del día a día. Cogió un taxi para dirigirse al gimnasio famoso, destacado donde había sido inscrita gracias a Nicolas y no había vuelto a ir; sintiendo pena porque sabía que cada día perdido era un mes de salario.Llegó al gimnasio, registrándose, dejando sus objetos personales en el casillero e iniciando con la caminadora; donde observaba lado a lado esperando algún rastro de Nicolas, pero no aparece; tal vez él no quería arreglar las cosas pensó para sí misma.
Emily se sentía tranquila al haber tomado una decisión referente a Nicolas; aunque le costaba la idea de volver a introducirse al mundo sobrenatural iba a intentarlo solo por él a la final eso no significaba que debía despertar a su loba o que su pequeño Leo se introdujera en este mundo del caos. Al siguiente día, decidió dirigirse hacia la típica terapia con Lily donde veía de lejos a Sergio porque se encontraba ocupado con sus laborales personales; al finalizar decidió reunirse con William quien la había invitado a salir nuevamente donde fue sorprendida porque pensó que después del desastre de primera cita que habían tenido, no quería volver a saber de ella.Se despidió de la pequeña Lily con quien había visto varios avances, llegando al punto de tener que volver a evaluarla para saber su evolución. Decidió cambiarse el un
Emily se sentía como una niña chiquita mientras sentía cómo movían en uno solo sus labios formando un perfecto beso; mientras que William iniciaba a sentir sentimientos prohibidos dentro de él; ya que no podía caer en el mismo juego que estaba planeando donde reaccionó alejándose de ella; donde Emily lo miró confundido pensando que había besado mal, tal vez el haber estado sin un hombre por tanto tiempo podría haber afectado pero es que el miedo que tenía al entregar nuevamente su corazón devolviéndose en mil pedazos le aterraba.— ¿Hice algo mal? — Preguntó con inocencia Emily mientras quitaba su mano del pantalón de William donde había quedado la servilleta.— No, perdóname solo me acorde de mi esposa — Dijo en medio de una mentira, buscando una solución a lo que hab&iacu
Después de un largo camino llegaron a la cima, donde se encontraba un hermoso mirador acompañado de un pequeño restaurante casero. Emily vio con mucha emoción el lugar porque hace años no estaba en uno parecido; bajaron de la moto con mucho cuidado quitándose el casco sin llegar a caerse y pasárselo a William para que lo asegurara. Ella amaba sentir la brisa de ese momento mientras cerraba sus ojos, recordando la tranquilidad cuando era una niña apenas; cuando su padre estaba a su lado y cuando fue por primera vez al mirador.*Flash Back*— Puedes abrir los ojos — Comentó papá en los oídos de Emily quien tenía seis años en ese momento; quien se encontraba en los brazos de él.— ¿No me dará miedo? — Susurró Emily sosteniendo con fuerza sus pequeñas