Pueblo Göreme, Turquía

Un hombre de edad media se dirigió al río a pescar junto con sus dos hijos, a medida que se acercaban a la orilla vieron una mujer tendida, enseguida fueron por su ayuda, era la princesa Bianca siendo rescatada por aquella familia cristiana en las orillas del rio Bósforo.

— ¡Que hermosa mujer!, — dijo el padre de los niños sorprendido al ver el rostro de Bianca.

—Hijos, ayúdame a ponerla boca a arriba para darle respiración boca a boca.

Aquel buen hombre realizó un procedimiento de salvamento que se realiza cuando la respiración o los latidos cardíacos de alguien han cesado. Haciendo respiración boca a boca, proveyó oxígeno a los pulmones de la princesa, cuatro veces hizo el mismo procedimiento hasta que ella votó agua de la boca tosiendo.

—   ¡Dios mío! ¡Dios mío! ¿Dónde estoy? ¿Dónde están los turcos?  —Exclamaba Bianca confundida por lo sucedido.

— ¡Tranquila señorita!, usted está a salvo, será mejor llevarla a nuestra casa y pueda descansar. —Le dijo el buen hombre con serena voz.

En verdad Bianca se encontraba muy cansada y lastimada, aquella familia cristiana la llevaron en brazos hasta que llegaron a su morada.

La casa de dos pisos asomada a la plaza del pueblo, redonda y rojiza bajo el sol de agosto.  Kadir (nombre de la persona que salvó la vida a Bianca) tenía doscientas cabezas de ganado paciendo por las laderas de Sagrado, y una hermana moza, bordeando los veinte, morena, robusta, riente y algo necia. Su mujer, flaca y dura como un chopo, no era de buena lengua y era sumisa.

Su esposa asustada a ver llegar a su marido y sus hijos con una mujer herida en brazos.

—Cansu, preparada agua caliente y paños para sanar las heridas de la doncella. —Dijo Kadir algo agitado.

Bianca fue llevada a la habitación de huéspedes para que fuera atendida, Kadir la recostó esperando que su esposa venga con los paños húmedos. La princesa antes de dormir tomó una bebida caliente mezclada con hierbas para aliviar los dolores de la espalda.

Al día siguiente Kadir y toda la familia fueron al cuarto donde Bianca reposaba, esperaban que despertara para averiguar todo lo que le había sucedido. Después de esperar por el lapso de dos horas, despertó y lo primero que hizo fue agradecer a las personas que le salvaron la vida.

Kadir le preguntó:

— ¿Quién es usted? ¿Parece alguien perteneciente a la realeza por su vestimenta y joyas? ¿Es muy hermosa? ¿Qué accidente le ocurrió?

—Antes de decirles quién soy les pido de favor no revelar mi identidad, ya que un personaje importante en el imperio Otomano me está persiguiendo. —Dijo Bianca angustiada.

Kadir su esposa y el resto de la familia, juraron guardar el secreto por el resto de la vida. Bianca dijo que era la princesa del castillo de Sant'Angelo situada en el reino Norte de Italia, que estaba comprometida con el rey Franco Baresi. También que se encontraban en medio de una gran guerra contra el imperio Otomano y el sultán.

Finalmente reveló que el mismísimo sultán Sai Baba I trató de secuestrarla para llevársela al harén del palacio en Constantinopla, afortunadamente el barco donde viajaba junto con los turcos fue azotado por una tormenta ocasionando un naufragio.

Kadir se quedó sin palabras al escuchar la trágica historia de la princesa y sobre todo su relación directa con el sultán. Su esposa lloraba sintiendo compasión por Bianca, no aguantó más y la abrazó.

Pasaron varios días y Bianca vivirá una vida tranquila pero sin dejar de pensar en el rey Franco, no perdiendo la esperanza que algún día se vuelvan a reencontrar.

Isla de Comino, Malta.

Por su parte, Franco fue desterrado por su pariente el rey Paolo Maldini a la Isla de Comino ubicado en la pequeña nación de Malta situada en medio del mar. Por unos años en este lugar solitario lloraría profundamente por la pérdida de su prometida, pero luego de este cautiverio uno de sus vampiros lo convertirá en el gran No-muerto que regresará luego de algún tiempo para vengar el secuestro y la pérdida de Bianca, su gran amor.

—Mi amada esposa se ha ido, ahora no tengo nadie a quien amar, toda esperanza se fue con ella. —Dijo lamentándose Franco— Parece que ha llegado mi final, sin ella no soy más que un muerto en vida. ¡Maldición!, una vez más me han vuelto a traicionar. Juro que de alguna manera recuperaré mi trono y me vengaré de mis enemigos.

Franco después de la aparente pérdida de la princesa Bianca, pasó encerrado en una profunda caverna  confinado como el criminal más peligroso de toda Europa. Pasaban los días y en su mente solo estaba los recuerdos de su amada princesa, muchas noches lloraba en silencio rememorando aquellos días donde sentía realmente lo que era el amor, Bianca muchas veces frenó al rey de ejecutar mayores atrocidades de las que había cometido.

Por su parte el sultán Sai Baba II tuvo una celebración agridulce, debido a que por un lado había destronado a su archí-enemigo el rey Franco Baresi conquistando las tierras de todo el reino del Norte de Italia pero por otro lado, lamentó la aparente muerte de su anhelada Bianca, el deseo obsesivo del sultán fue desvaneciéndose no pudiendo tener nunca a la que iba a ser la concubina número uno de su inmenso harén.

El rey Paolo Maldini fue colocado como rey absoluto de los reinos del Norte y Sur de Italia bajo la jurisdicción del sultán, claro siempre dando tributos por un largo tiempo.

Luego de dos años de destierro, Franco Baresi estaría a punto de ser liberado por parte de sus dos más fieles servidores, sus aliados los vampiros. Ellos desde una cueva muy lejana a los pueblos de los alrededores de Roma, planificaron ir por el rey para ayudarlo a regresar al poder y derrocara a su primo el rey Paolo Maldini. Ambos vampiros utilizaron sus artes oscuras viajando a la isla de Comino en Malta convertidos en murciélagos.

Una vez que llegaron a la caverna donde estaba viviendo humillantemente el rey Franco, los exhortó del porqué lo habían dejado solo por tanto tiempo a lo que uno de ellos le respondió:

—Rey Franco, ¡disculpad por haberlo abandonado por tanto tiempo!, lo que pasa es que en nuestro mundo existen como lo sabes varios clanes que luchan por el poder.

—Nosotros tuvimos que huir con nuestro Sire y otros vampiros, lejos de estas tierras malditas y refugiarnos en los fríos nevados de un lugar llamado Siberia.

—Pero una vez que el peligro se alejó de nosotros y esos empedernidos vampiros llamados los “Antiguos”, volvieron por un corto letargo hasta un nuevo despertar que será pronto, hemos decidido buscarlo. Así que venimos a liberarlo y retome una vez más el control del reino Norte de Italia.

Los dos vampiros sacaron a Franco de la isla y se dirigieron a la cueva donde moraban aquellos no-muertos.

Al cabo de un tiempo, Franco se reunió en secreto con uno de sus primos lejanos el príncipe Esteban Báthory de Inglaterra y juntaron sus ejércitos con los del príncipe Esteban el Grande de Moldavia, para invadir los dos reinos de Italia derrocando al traidor de su primo el rey Paolo Maldini.

La batalla fue un éxito total y el rey Franco volvió al poder por un breve tiempo, sabiendo del resurgir de su gran enemigo, Sai Baba II armó un gran ejercito llamando a los temibles vikingos haciendo un pacto con ellos a cambio de una buena suma de monedas de oro.

Una vez más Franco iba a ser traicionado pero uno de sus siervos, que era un espía se infiltró en las hordas turcas se enteró de la pronta traición del príncipe Esteban Báthory. Franco al saber que su corto reinado estaba por sucumbir, pidió a uno de los vampiros que le convirtiese completamente en unos de ellos.

El vampiro accedió a la petición del rey sabiendo que le serviría de mucha ayuda, debido al pronto despertar de los “Antiguos”, Franco con el tremendo historial que tenía de ser un brutal y sanguinario guerrero, seguramente será un poderoso vampiro que podrá doblegar a los Antiguos y quedarse con el poder total dentro del mundo de los vampiros.

Antes del renacimiento en la no muerte del rey, una mujer se hizo manifiesto en su vida y era la duquesa Isabel la hermana menor del rey Paolo Maldini. Isabel siempre fue una mujer reservada y de nobles costumbres, no cabía duda que era muy atractiva, ella era alta y de piel blanca, sus ojos eran color verdes y sus cabellos castaños.

Ella siempre estuvo enamorada de Franco aun sabiendo de lo despiadado que era y de su fama de tirano. Varias veces le pretendió más él por amor a su amada Bianca no cedió a las indirectas de la hermana del rey.

Ahora ella una vez más volverá a su vida y aun sabiendo que su adorada esposa, aparentemente había fallecido en el naufragio en una embarcación turca. Esta era la oportunidad que Isabel buscaba desde hace algunos años atrás.

— ¡Franco mi amado rey, supe que has regresado a reinar Italia y que no tienes una princesa a tu lado para que te sea de compañía!

—Tu sabes lo mucho que te he amado y que siempre esperé por tener una oportunidad de estar junto a ti. Lamento la muerte de tu prometida la princesa Bianca pero ya ha pasado mucho tiempo y veo que sigues solo. —La duquesa Isabel trataba con estas palabras nacidas de su corazón convencer a Franco.

— ¡Déjame en paz mujer! —Le contestó Franco haciéndola aún lado.

—¡Hazme tuya ahora que estamos los solos! —Los ojos de la duquesa resplandecían un deseo intenso.

La duquesa que había ido con un vestido blanco y con un manto color café cubierta con un velo a que nadie se diera cuenta, poco a poco se sacó sus prendas de vestir y el rey asombrado por la actuación lasciva de la duquesa, no tuvo palabra alguna que decir.

Él contemplaba la hermosa figura de la duquesa en todo su esplendor, su piel blanca como la nieve y viendo sus enromes y delicados bustos, siguió observando como ella quedaba completamente desnuda.