Me alejo de Ónix y como si estuviese siendo parte de una hipnosis, me acerco al hombre que hace más de dos años lloré y que todavía lloro sin lograr acostumbrarme a su ausencia.
— Mi querida Nala, estaba esperando ansioso el momento en el que fin pudiera escuchar tu voz — Dice de inmediato Christos o mi padre, en este momento no logro entender nada de lo que sucede.
— Nala, él no puede ser tu padre, no eres inmortal — La voz de Alondra me distrae por un momento y un segundo después tengo frente a mí a mi padre, solo que su calor se ha evaporado y solo parece un ser frío, sin color.
— Lo ha hecho muy bien alfa Ónix, una nueva vida crece en las entrañas de mi querida Nala — ¡Oh por Dios! Es real que estoy embarazada.
— No se preocupe, alfa Ónix, si quisiera dañar a una hechicera, no sería a Nala — Christos se adentra en la cueva y yo le sigo los pasos. El lugar se vuelve cada vez más húmedo, tenebroso y estrecho. Caminamos durante al menos cinco minutos para luego entrar en un lugar increíble. Cálido, con una arquitectura hermosa y decorado con los sofás y muebles más hermosos que he visto en mi vida y al parecer más confortables. — Bienvenida a mi morada, la cueva del guardián Christos — Me dice y yo observo todo con la boca abierta. ¿Cómo ha podido construir todo esto en este lugar? — No creerás que pasaré la eternidad en la pobreza y sufriendo penurias; no soy tan católico, no voy a autoinfligirme penas innecesarias. — Susurra sentánd
Christos me entrega una copa y la miro con desconfianza, la huelo y concluyo que es vino tinto y me la tomo de un solo trago¡Oh por Dios! El mejor vino que he probado en mi vida.— No te inquietes, tienes al alfa y a su manada que son bastante leales y a Morgana —Me dice y me vuelvo a mirarlo.— No la conozco, no la he visto en mi vida — Respondo y siento la necesidad de tomar otra copa de vino.— Lo harás pronto — Me dice Christos.— Espere, mi madre ya era una hechicera, casi idéntica Amara, yo ni siquiera me parezco a ella y…— El que fueras hechicera era importante para poder heredarle los poderes al alfa supremo, pero es
— ¿A los dos? Tal vez has salido a tu padre — Me dice y toma un trago de su copa — Ese hombre quería asesinar a tu alfa, al padre de tu hijo — Pareciera sentirse complacido al provocarme, como si esperase que yo cambiara de opinión.— Lo sé, pero creo que nadie se merece ese tipo de tortura, lo que suceda con ese hombre después de que sea sacado de ese sarcófago no es mi problema — Respondo muy convencida de lo que digo — Aunque espero que sea juzgado por la manada.— Comprendo — Se lleva una mano a su cabello y hace un gesto que mi padre solía hacer y mi corazón se acelera.— ¿Qué es lo que desea? — Necesito salir de este lugar, o creo que voy a en
— Arcas era el hijo de Zeus y de Calisto, una humana que fue transformada en Osa por los celos de Hera, obligando a Zeus a llevar a Arcas a un lugar seguro donde debería crecer — Su voz es reflexiva como si estuviese recordando algo importante.No tengo conocimientos sobre lo que está diciendo, podría jurar que Belatrix sabría sobre esto, así que decido no hablar y esperar hasta que continúe, tal vez mi Arcas no tenga nada que ver con lo que me ha pedido.— Licaón, era el rey de Arcadia en Grecia, y hasta Zeus llegaron los rumores de que este rey, era un salvaje y asesinaba y entregaba como ofrenda a todos los visitantes que osaban ir a su ciudad; Zeus para comprobarlo, se disfrazó como un visitante y Licaón pensó en asesinarlo, pero se enteró a tiempo de que era el dios Zeus y en su lugar capturo a Arcas que era solo un niño, lo asesinó, lo picó y se lo sirvió en parrillada a Zeus, a quien invitó a cenar — Me llevo la mano a la boca ante la
En la entrada de la cueva prohibidaMientras un hombre grande y robusto camina en círculos en el lugar, poniendo de los nervios a las personas que lo acompañan, una hermosa mujer, de cabello oscuro y con porte de amazona, no para de reflexionar sobre lo que he sucedido desde hace algunas horas.Alondra observa a Ónix e intenta descubrir como se siente con el hecho de que este vaya a ser padre con su nueva pareja.Ella acaba de perder al bebé que esperaba sin saberlo, y enterarse de que su mejor amigo va a ser padre le ha generado demasiada angustia, sobre todo, porque no lo considera justo y tiene miedo de llenarse de resentimientos contra ellos.— ¿Podrías dejar de moverte tanto? Me vas a marear — Le dice Alondra a un Ónix demasiado inquieto como para escucharla.Ella levanta la mirada y se centra en el punto de la cueva que ha ignorado hasta el momento, donde su suegro, el p
Alondra pregunta sin poder controlarse, no quiere que Homero sea liberado. En realidad no está segura de lo que desea, pero si el hombre pudiese morir rápidamente se evitarían muchas complicaciones.“Sí, lo sabía y ni tú, ni nadie puede hacer nada. Déjame tranquila”Le responde Nala con una voz fría e indiferente y Alondra se inquieta por lo que pudo pasar al interior de la cueva.— Mi querida Nala ha hecho un trato conmigo y espero que lo cumpla al pie de la letra — Aclara el inmortal — Homero debe ser juzgado por la manada y espero que su pena sea consecuente con sus crímenes — Ónix lo escucha pensativo.No estaba en sus planes hacer un juicio contra Homero, solo quería acabar con él y por ese motivo no trajo con él a Luciano, porque no quería que su amigo sufriera.— Lo haremos como Nala lo ha prometido — Responde el alfa y Alondra cierra sus manos en puños.
Al llegar al pueblo, Homero es trasladado al lugar donde se encuentra el hombre de la cicatriz y es encerrado en una cueva con una puerta hermética, forjada desde hace centenares de años y adaptada por él y el alfa Orión para que ningún hombre lobo, ya fuese como humano o como licántropo pudiese escapar.Homero lo sabe y tiene claro que ha perdido las esperanzas y empieza a gritar de impotencia y desesperación, porque ha perdido y toda su lucha, sus alianzas y los desprecios del alfa Orión, que tuvo que soportar durante años, han sido en vano.Mientras, Ónix, su madre y Nala se dirigen donde la sanadora del pueblo, Alondra, vuelve a su casa, preocupada por tener que decirle a Luciano que Homero va a ser juzgado por la manada.
Él la conoce y no es fácil que Alondra se descontrole de esta manera, algo que la incomoda ha pasado.— ¿Qué ha sucedido? — Le pregunta con calma mientras levanta la mirada y observa como Arcas sonríe ante su extraño intercambio.— Nos vimos obligados a traer a tu padre, va a ser juzgado por la manada — Dice Alondra un poco más calmada, pero sin dejar de sostener a su amado contra la pared.Ella de inmediato siente la vergüenza, la tristeza, la ira y la humillación que se apoderan de Luciano y quiere abrazarlo y consolarlos, pero primero él debe aclararle lo que ha dicho el chicuelo.— Arcas es el hijo de Nala y Ónix, viene del futuro y…