La prensa estaba gritando mientras impedía que lisa entrar a la empresa, ella estaba totalmente desesperada porque sentía que entre más se le acercaba la prensa, más María se sentía. Realmente estaba sintiendo que estaba comenzando entrar en pánico, y realmente tenía miedo de entrar en pánico por completo porque siempre que entró en pánico, instantáneamente dejaba de respirar. La ansiedad que tenía en esos momentos, combinada con el pánico, realmente no iba a resultar nada bien.—Por favor, permítanme entrar a la empresa. Déjenme pasar— pidió antes de escuchar miles de preguntas. Sin duda, pedirles de favor y pedirles de la mejor manera que le permitieran pasar, no iba a funcionar.—¡Estoy embarazada y lo que están haciendo en estos momentos no es más que poner en riesgo la salud de mi hijo y la mía!—gritó molesta. Asustándose al sentir una mano sobre su hombro.—Opino exactamente lo mismo—soltó Nick a su lado. Deslizando su mano hacia el rostro de Lisa para cubrirla de los intermina
Después de haber logrado entrar a la empresa, de conseguir que toda la prensa que cubría con totalidad la puerta de la empresa se fuera, Nick le había pedido a Lisa hablar en la oficina. Ya habían pasado unos cuantos minutos desde que ellos se habían prácticamente encerrado en la oficina y no se habían dicho ni una sola palabra. El únicamente se mantenía con la espalda totalmente pegada sobre su asiento, girando levemente con su silla giratoria. Ya ni siquiera se veía alguna pista de que en aquella oficina, el habría sufrido un desmayo. Lisa estaba sentada frente a su escritorio, jugueteando suavemente con su cabello mientras esperaba que su respiración se regulará. No quería admitirlo pero si él no hubiera llegado, hubiera sufrido un ataque de ansiedad.—Lo hice bien, ¿Cierto?—preguntó él. Atrayendo la atención de Lisa.—¿Qué? —Te acabo de decir que fingí bien, todos van a pensar que somos los esposos perfectos.—soltó con una gran sonrisa sarcástica en el rostro.—¿Crees que el mun
Lisa caminaba tranquilamente por el pasillo de la oficina, con el rostro serio al mismo tiempo que con ambas manos se mantenía sujetando la bolsa de regalo que Nick le había entregado hace unos cuantos minutos. Se había quedado durante más de media hora en la oficina de Nick sin hacer absolutamente nada, únicamente a hacer nada porque en realidad únicamente se había quedado ahí a disfrutar de la soledad que le entregaba aquel lugar. Se había dado cuenta que había estado bastante tranquila desde la noche en que había discutido con Nick, él también había estado bastante tranquilo y eso le ponía los nervios de punta. Incluso se había disculpado con ella, cosa que le había parecido totalmente absurdo porque para ella habían sido palabras totalmente vacías. Le había sorprendido totalmente el hecho que le regalara un teléfono celular totalmente costoso, eso no lo iba a negar, pero tampoco iba a negar que le había parecido totalmente extraña la manera en que se había comportado.Al entrar en
Nick Clark se encontraba únicamente observando a su abogado e inspector frente a él, ambos se veían como si acabaran de descubrir algo que él estúpidamente no pudiera ver. Inquietamente se llevó una mano hacia la barbilla, tratando de entender que era lo que sus hombres estaba viendo. O al menos que era lo que se encontraban diciéndose a través de las miradas. Por un momento su abogado volteó a verle, regalándole una pequeña sonrisa llena de incomodidad que trataba de ocultar con una expresión amable. Nick no era estúpido, sabía que algo estaba sucediendo, algo serio para que ellos estuvieran comportándose de esa manera.— ¿Qué fue lo que hizo Lisa?—preguntó. Siempre era Lisa la que terminaba por hacer algo. Por ello siempre terminaba por preguntar qué era lo que ella había hecho primero. Conocía a la mujer con la que se había casado pero al ver la expresión de sus empleados se percató que lo que ellos habían descubierto no tenía nada que ver con ella. — ¿Ella no hizo nada?—preguntó
Ella ni siquiera se había tomado el tiempo de preguntarle qué era lo que estaba ocurriendo, simplemente durante toda su jornada de trabajo se había mantenido en su área, tratando de recibir a todas las personas que llegaban a la empresa. No le había comentado en lo absoluto sobre lo que había ocurrido con aquella mujer, únicamente había preferido ignorar el tema. Con el simple hecho de recordar lo que aquella mujer le había dicho, le era totalmente imposible no ponerse a reír y es que únicamente se decía totalmente divertida la manera en la que aquella mujer simplemente creía que él realmente le iba a corresponder en serio en algún momento. Simplemente se le hacía divertido qué a pesar de cómo era Nick, ella siguiera creyendo en él. No había manera en la que Nick Clark, terminará enamorándose de una mujer, enamorándose de verdad de una mujer, tampoco era creíble creí que él le pudiera ser fiel a una mujer porque claramente era imposible. Por sus venas, únicamente corría el deseo de es
La puerta del departamento se abrió por completo cuando la madre de Nick Clark entró junto a sus guardaespaldas. Gritando y haciendo un gran alboroto sobre dónde se encontraba Lisa.La madre de Nick llevaba una expresión totalmente molesta, con sólo verle se podía notar la molesta y furiosa que estaba. Lisa se encontraba en la cocina, cocinando un poco de pasta, pero al escuchar el gran alboroto que había hecho aquella mujer, se había visto obligado a pagar la estufa y dirigirse hacia la puerta principal del departamento.La verdad no le sorprendía para nada que la madre de Nick estuviera nuevamente ahí. Al parecer aquella mujer tenía una completa fascinación con ella, una fascinación que la obligaba a estarle jodiendo una y otra vez. Cuando Alicia llegó hacia la puerta principal y observó que la madre del Nick ya se encontraba sentada sobre uno de los sofás de la sala, le sonrío hipócritamente. —Veo que usted realmente se siente la dueña de esta casa, no puede estar entrando y salie
El restaurante se encontraba en su máxima capacidad, los comensales parloteaban sin cesar mientras que lisa se encontraba al fondo del restaurante, en una de las últimas mesas, bebiendo una clase de jugo de frutas tropicales que Sol le había pedido al mesero que parecía conocer desde hace mucho tiempo. Sutilmente se encontraba acariciándose su vientre, vientre que ya podía notarse rápidamente. Ya habían pasado exactamente tres meses desde que Nick se había percatado que su familia estaba tratando de joderle. Durante esos tres meses, su relación con él se había visto afectada al mismo tiempo que se había visto beneficiada. Simplemente ella se había percatado de qué su relación con Nick no iba a llegar a ningún lado porque simplemente ni ella ni él estaba buscando que su relación llegara a algún lado.Mientras veía como los meseros caminaban de un lado a otro, entregando la comida en las demás mesas, comenzaba a sentir que todo le molestaba y es que simplemente detestaba la manera en la
La puerta del departamento se abrió por completo cuando la madre de Nick Clark entró junto a sus guardaespaldas. Gritando y haciendo un gran alboroto sobre dónde se encontraba Lisa.La madre de Nick llevaba una expresión totalmente molesta, con sólo verle se podía notar la molesta y furiosa que estaba. Lisa se encontraba en la cocina, cocinando un poco de pasta, pero al escuchar el gran alboroto que había hecho aquella mujer, se había visto obligado a pagar la estufa y dirigirse hacia la puerta principal del departamento.La verdad no le sorprendía para nada que la madre de Nick estuviera nuevamente ahí. Al parecer aquella mujer tenía una completa fascinación con ella, una fascinación que la obligaba a estarle jodiendo una y otra vez. Cuando Alicia llegó hacia la puerta principal y observó que la madre del Nick ya se encontraba sentada sobre uno de los sofás de la sala, le sonrío hipócritamente. —Veo que usted realmente se siente la dueña de esta casa, no puede estar entrando y salie