—¡Que…!, fue la única palabra que a tuno en el cerebro de Tanying cuando vio que el rostro de Maximiliano se acercaba con la intención de besarla. Justo cuando estaba a punto de besarla en los labios, ella giro la cabeza de repente. El beso cayó sobre su cabello. Las luces en el escenario estaban atunadas, y esto dio la ilusión de que la pareja se había besado. Los invitados no tenían idea de que el beso cayó distorsionado. Solo el presentador a su lado vio esta escena claramente. Reprimió su propia vergüenza sin poder creer que había una mujer que se resistía a los encantos de Maximiliano Cash, pero fingió no ver nada. Una mujer quien miraba desde una esquina la escena con ojos lleno de ira, agitando un vaso de vino tinto en su mano. Sus celos estallaron en su interior como fuegos artificiales en noche de año nuevo. —Admítelo, no serás más que una simple amante de ahora en adelante— Se burló Emily quien se encontraba a una distancia prudente de Alison Su, su voz era alta más de lo n
A Tanying le pareció una especie de chiste, lo que su padre acababa de decir. Quería rechazarlo, pero luego de pensarlo unos momentos decidió abstenerse cuando imagino que sería una gran oportunidad para obligar al hombre admitir que realmente tenía un romance con Alison Su y con ello le sería suficiente para mostrarle a su padre las pruebas necesarias para que rompiera el acuerdo de matrimonio con éxito. Con un brillo de esperanza en sus ojos y una sonrisa en su rostro la joven chica se sentó junto a su madre. El desayuno que hacía momentos atrás le parecía simple y desagradable, ahora le parecía el desayuno más delicioso que hubiera probado en toda su vida. Su actitud sorprendió tanto a Alice como a Marc por lo que no evitaron mirarse entre sí. La pequeña Domale no protestando era la cosa más rara que podían presenciar en su vida. Cuando estaba a punto de terminar las frutas de su plato Tanying de repente miro a su padre y le sonrió con desdén. —Oye Papá, ¿Me haces un favor? — —
Después de varios minutos de silencio Tanying, decidió hablar. —Tu romance no tan ocultó ah hecho de mí el hazmerreír de la ciudad— Puntualizo— ¿te sientes lo suficiente satisfecho ya? O tu segundo paso va hacer vestirla de novia el día de la boda. ¡Oh! vamos viejo no crees que está siendo demasiado ambicioso en tener a dos novias en un altar el mismo día— Maximiliano que había estado todo el tiempo escuchando a la chica mientras trabajaba en su laptop, apenas escucho ser llamado viejo, su rostro se oscureció tan solo eran mayor por siete años. De pronto se aflojó la corbata frunciendo las cejas terminado por acortar distancia entre ambos. Por instinto propio la joven se inclinó para atrás con la intención de alejarse; sin embargo, esto solo hizo que Maximiliano colocara su cuerpo encima de ella manteniendo su flecividad con una mano mientras que su otra mano era deslizada por la piel tersa del brazo de Tanying. Un espeso escalofrió recorrió su espina dorsal, haciendo que su respir
—¡Angh! — gimió Jeremy de dolor y se sobo el brazo. Tanying le dio un gran peñiscon en el brazo, cuando se detuvo junto a su amigo, quien estaba con pensamientos inapropiados sobre ella. La mirada de desaprobación en su rostro fue suficiente para hacer que dejara verse tonto por su propio bien. Mirándole con el ceño fruncido Tanying puso los ojos en blanco; —¿Jeremy vas a pensar que me eh acostado con ese idiota? Nada fue a lo que simple vista pareció, ese idiota se aprovechó de que estaba descuidada— aclaro la joven. —Tang, realmente no fue mi intención pensar aquello— se excuso Por otro lado, la joven se limitó a lanzarle una mirada de enojo como respuesta y se dirigió a su salón. Mientras Jeremy no dejaba de maldecirse a sí mismo por tener pensamientos incoherentes hacia su amiga. La noticia de que Tanying y Maximiliano teniendo un momento romántico se extendió como un fuego en el campus, sin intención Tanying ahora era más famosa. En el salón quince, muchos estudiantes estaban
Una hora después, limpió su escritorio y apago su computadora. Cuando Tanying recupero el sentido el hombre ya estaba sobre ella. Cuando abrió los ojos lo primero que vio fue el extremado hermoso rostro de Maximiliano que estaba tan cerca que sus respiraciones chocaban, Tanying se perdió en los perfectos rajos del hombre. —¡Vamos! — dijo él.Tanying asistió tontamente con la cabeza. Incorporándose, Maximiliano la miro fríamente y salió primero de la oficina. Tanying lo siguió de inmediato. Subieron al mismo auto ambos sentados en el asiento trasero. El sonido del auto en marcha hizo que Tanying volviera a la realidad. Había estado tan perdida en lo guapo que le parecía que olvidó que tenía que patearle el trasero. Pero el conductor estaba allí con la división entre el asiento delantero y el trasero hacia abajo por lo que tuvo que contenerse y esperar ansiosamente otra oportunidad. La tienda de los vestidos de novias estaba cerca de las instalaciones Cash, solo tomo unos minutos incóm
Mientras tanto en los vestidores Tanying estaba ansiosa por huir de aquel lugar ni siquiera podía imaginar volver a compartir el mismo automóvil con aquel hombre. Nunca en su vida había tenido que huir de alguien o algo toda su vida su apellido había sido frente a cualquier cosa, pero ahora la situación y el momento lo ameritaban. Huiré así no tendré que volverle a ver la cara de idiota, se dijo a sí misma la chica una chispa de luz brillo en sus ojos, pero pronto se nubló cuando se dio cuenta del vestido de novia que tenía puesto y las modistas que estaban arreglando los detalles del vestido. No podría salir corriendo, no de esa manera como estaba vestida claramente la confundiría con una loca salida de escena y tampoco llegaría muy lejos con aquel atuendo podría tropezar y terminaría en ridículo. Pronto su rostro se tensó ante aquel pensamiento. No sabía en qué momento su vida se había hecho tan complicada. … pronto Tanying se sumergió en el país de los pensamientos que no se dio cue
Sus palabras fueron órdenes, pronto todos habían armado una larga fila para pasar a cuya mesa sin decir palabras que no fueran necesarias aparte de un código que era supervisado por Emily en una gran tableta que sostenía en sus manos que verificaba que no era ningún infiltrado al ser verificados Karen les entregaba a cada uno un fago de billetes que contenía una gran cantidad superada a los cinco mil dólares, cuando pasaban a la salida entregaban sus carpetas haciendo una reverencia a Jeremy, Jixon y Tanying. (………) —Señor...— Inquirió Paul entrando a la oficina de su jefe. Los ojos de Maximiliano se desviaron de la pantalla de su computador a la figura de su asistente que llevaba un par de anteojos anticuados el dio de hoy. —Me mando a llamar— Pregunto aun sabiendo que era estúpida su preguntara, pero no había podido aguantar la mirada inquietante de su jefe. —¿Por qué crees que estas aquí? — resoplo con burla Maximiliano — Y te aseguraste por completó de que Alison no se vea inv
—Ella, tiene sus ojos el color, pero es imposible— negó convenciéndose a si mismo de que tal vez ya estaba loco Maximiliano. Pero esto activo la curiosidad de Kelvin queriendo saber a quien se refería su amigo. —¿A quién te refieres?, tal vez te pueda ayudar— Tan pronto cuando esa pregunta surgió el ambiente se volvió pesado en aquella sala un silencio incómodo los invadió que solo se escuchaba las respiraciones de ambos hombres. Por un momento Kelvin pensó que no le respondería sin embargo fue simple. —Procura en mantener tu atención en el crecimiento de tu empresa, de mis problemas me encargo yo— Ese no fue tan claro y conciso que kelvin volvió a sonreír. — ¿Qué aras con Alison ahora que saco sus garras? — Preguntó casualmente cambiando de tema drásticamente. Desde que había llegado a la sala privada para charlar con su amigo había notado que Alison no se había aparecido en ningún momento y eso ya era sumamente raro, ya que la mujer siempre andaba más que pegada como chicle