De inmediato se tapó la boca con las manos, pero fue en vano, todos los presentes la habían escuchado. Entonces Marc miró a su hija y le preguntó: —Tanying, ¿se conocen ustedes dos? —No le parecía posible que fuera así. Por lo que tenía entendido, Maximiliano siempre estaba ocupado y su hija no era la clase de persona a quien le gustara tratar con tipos aburridos que solo ocupaban su tiempo en trabajar. “¿Qué si lo conozco?, claro que lo conozco este tipo es quien trato a tu preciada hija de gata callejera, después de haberse ofendido con un rose de labios inocente; pensó para sí misma con las manos todavía cubriéndole la boca, Tanying negó con la cabeza a la pregunta de su padre, y no quiso decir ni una sola palabra más. Sin embargo, Maximiliano rio sarcásticamente entre dientes y la contradijo: —Así que te llamas Tanying… La reacción de ambos jóvenes hizo que, para los demás presentes en la sala, fuera evidente que ese par ya se conocían; en ese momento el viejo Damon preguntó a
Solo así, durante la cena, la familia Domale Dapane y el mayor de la familia Cash decidieron que el contrato matrimonial se iba a cumplir. No le importaba que ella no quisiera o que ambos jóvenes se opusieran no había nada que se pudiera hacer. La decisión ya había sido tomada. En dos días, las dos familias celebraron una gran fiesta de compromiso en el hotel más prestigioso de la ciudad. Y La boda estaba programada para los primeros días de septiembre. Todo sucedió muy rápido. Para Tanying parecía todo sacado de una pesadilla. Recia ante toda la situación que se estaba dando, había sido maquillada y vestida por las manos de los mejores profesionales del país por lo que la chica lucía hermosa y radiante. Con una copa de vino en su mano mirando como sus amigos y familiares iban y venían de un lado a otro, alzó la copa llevándosela a sus labios tomándose de un solo trago el líquido. De repente Emily grito de la emoción. —¡Esto debe ser el destino! te vas a casar con él con Maximilia
—¡Que…!, fue la única palabra que a tuno en el cerebro de Tanying cuando vio que el rostro de Maximiliano se acercaba con la intención de besarla. Justo cuando estaba a punto de besarla en los labios, ella giro la cabeza de repente. El beso cayó sobre su cabello. Las luces en el escenario estaban atunadas, y esto dio la ilusión de que la pareja se había besado. Los invitados no tenían idea de que el beso cayó distorsionado. Solo el presentador a su lado vio esta escena claramente. Reprimió su propia vergüenza sin poder creer que había una mujer que se resistía a los encantos de Maximiliano Cash, pero fingió no ver nada. Una mujer quien miraba desde una esquina la escena con ojos lleno de ira, agitando un vaso de vino tinto en su mano. Sus celos estallaron en su interior como fuegos artificiales en noche de año nuevo. —Admítelo, no serás más que una simple amante de ahora en adelante— Se burló Emily quien se encontraba a una distancia prudente de Alison Su, su voz era alta más de lo n
A Tanying le pareció una especie de chiste, lo que su padre acababa de decir. Quería rechazarlo, pero luego de pensarlo unos momentos decidió abstenerse cuando imagino que sería una gran oportunidad para obligar al hombre admitir que realmente tenía un romance con Alison Su y con ello le sería suficiente para mostrarle a su padre las pruebas necesarias para que rompiera el acuerdo de matrimonio con éxito. Con un brillo de esperanza en sus ojos y una sonrisa en su rostro la joven chica se sentó junto a su madre. El desayuno que hacía momentos atrás le parecía simple y desagradable, ahora le parecía el desayuno más delicioso que hubiera probado en toda su vida. Su actitud sorprendió tanto a Alice como a Marc por lo que no evitaron mirarse entre sí. La pequeña Domale no protestando era la cosa más rara que podían presenciar en su vida. Cuando estaba a punto de terminar las frutas de su plato Tanying de repente miro a su padre y le sonrió con desdén. —Oye Papá, ¿Me haces un favor? — —
Después de varios minutos de silencio Tanying, decidió hablar. —Tu romance no tan ocultó ah hecho de mí el hazmerreír de la ciudad— Puntualizo— ¿te sientes lo suficiente satisfecho ya? O tu segundo paso va hacer vestirla de novia el día de la boda. ¡Oh! vamos viejo no crees que está siendo demasiado ambicioso en tener a dos novias en un altar el mismo día— Maximiliano que había estado todo el tiempo escuchando a la chica mientras trabajaba en su laptop, apenas escucho ser llamado viejo, su rostro se oscureció tan solo eran mayor por siete años. De pronto se aflojó la corbata frunciendo las cejas terminado por acortar distancia entre ambos. Por instinto propio la joven se inclinó para atrás con la intención de alejarse; sin embargo, esto solo hizo que Maximiliano colocara su cuerpo encima de ella manteniendo su flecividad con una mano mientras que su otra mano era deslizada por la piel tersa del brazo de Tanying. Un espeso escalofrió recorrió su espina dorsal, haciendo que su respir
—¡Angh! — gimió Jeremy de dolor y se sobo el brazo. Tanying le dio un gran peñiscon en el brazo, cuando se detuvo junto a su amigo, quien estaba con pensamientos inapropiados sobre ella. La mirada de desaprobación en su rostro fue suficiente para hacer que dejara verse tonto por su propio bien. Mirándole con el ceño fruncido Tanying puso los ojos en blanco; —¿Jeremy vas a pensar que me eh acostado con ese idiota? Nada fue a lo que simple vista pareció, ese idiota se aprovechó de que estaba descuidada— aclaro la joven. —Tang, realmente no fue mi intención pensar aquello— se excuso Por otro lado, la joven se limitó a lanzarle una mirada de enojo como respuesta y se dirigió a su salón. Mientras Jeremy no dejaba de maldecirse a sí mismo por tener pensamientos incoherentes hacia su amiga. La noticia de que Tanying y Maximiliano teniendo un momento romántico se extendió como un fuego en el campus, sin intención Tanying ahora era más famosa. En el salón quince, muchos estudiantes estaban
Una hora después, limpió su escritorio y apago su computadora. Cuando Tanying recupero el sentido el hombre ya estaba sobre ella. Cuando abrió los ojos lo primero que vio fue el extremado hermoso rostro de Maximiliano que estaba tan cerca que sus respiraciones chocaban, Tanying se perdió en los perfectos rajos del hombre. —¡Vamos! — dijo él.Tanying asistió tontamente con la cabeza. Incorporándose, Maximiliano la miro fríamente y salió primero de la oficina. Tanying lo siguió de inmediato. Subieron al mismo auto ambos sentados en el asiento trasero. El sonido del auto en marcha hizo que Tanying volviera a la realidad. Había estado tan perdida en lo guapo que le parecía que olvidó que tenía que patearle el trasero. Pero el conductor estaba allí con la división entre el asiento delantero y el trasero hacia abajo por lo que tuvo que contenerse y esperar ansiosamente otra oportunidad. La tienda de los vestidos de novias estaba cerca de las instalaciones Cash, solo tomo unos minutos incóm
Mientras tanto en los vestidores Tanying estaba ansiosa por huir de aquel lugar ni siquiera podía imaginar volver a compartir el mismo automóvil con aquel hombre. Nunca en su vida había tenido que huir de alguien o algo toda su vida su apellido había sido frente a cualquier cosa, pero ahora la situación y el momento lo ameritaban. Huiré así no tendré que volverle a ver la cara de idiota, se dijo a sí misma la chica una chispa de luz brillo en sus ojos, pero pronto se nubló cuando se dio cuenta del vestido de novia que tenía puesto y las modistas que estaban arreglando los detalles del vestido. No podría salir corriendo, no de esa manera como estaba vestida claramente la confundiría con una loca salida de escena y tampoco llegaría muy lejos con aquel atuendo podría tropezar y terminaría en ridículo. Pronto su rostro se tensó ante aquel pensamiento. No sabía en qué momento su vida se había hecho tan complicada. … pronto Tanying se sumergió en el país de los pensamientos que no se dio cue