Después de alistarnos para ir al tratamiento, salgo de la habitación donde tengo que ver la mirada sugestiva de mi suegra y como bailan sus cejas para hacer más profundas sus expresiones.—Madre, detente. Incomodas a Adhara. — Dice mi esposo.—No entiendo porque tendría que incomodarse, no he dicho algo y si pude soportar el olor de su vinculación, creo que ella puede soportar la mirada que les estoy dando. — Dice mi suegra y yo me ruborizo.—Bien, pero, si algo le pasa a mi hijo, por estresar a su madre…— —Pero, ¿Cómo te sientes, Adhara querida? ¿Te gustaría que te hicieran unos masajes en el cuello o la espalda? — pregunta mi suegra con una mirada dulce.La mujer que se burlaba con solo mirarnos, por encontrarnos con poca ropa, ahora es una mujer completamente distinta, que me sonríe y trata como si nada hubiese pasado.—Sería bueno un poco de masaje. Muchas veces necesito un masaje después de… ya sabes, es muy bueno. — dice mi suegra y Jareth la aleja de mí.—Nos vamos ahora mismo
No soy débil. Una frase con tres palabras que solas pueden ser comunes, pero, para mí, son mucho. Durante toda mi vida, calle muchas cosas y dejé que hicieran conmigo lo que quisieran solo porque ‘soy una omega’.Pero, ser omega no me impidió luchar por lo que tengo ahora, lo que defenderé hasta el final de cualquier persona que pretenda amenazar a mi familia. Algo que me hace sentir bien, porque ya no pienso en alguien que me rescate, si no, que soy lo suficientemente fuerte, para rescatarme.Aunque debo reconocer que no estoy sola y que el respaldo de mi esposo es muy grande, al punto de moverme con seguridad, me alegra saber que no soy débil por ser la esposa del alfa, si no, porque he vencido mis miedos y he dado un paso hacia adelante, cuando alguien intenta hacerme retroceder.—Entonces, ¿así se siente? — pregunto sonriente.—¿Qué sientes? — pregunta Jareth.—¿Así es como se siente ser fuerte? — pregunto aturdida.—Si eso te hace sentir bien, sí. — Dice Jareth y yo sonrío.—Sí,
Después de una discusión por mí, durante más de una hora, mi suegra se marcha porque tiene una cena que preparar y es solo así, que podemos marcharnos por nuestra propia cuenta.—Mi madre es abrumadora. — Dice Jareth y yo sonrío.—Sé que es así. Siempre lo ha sido. — Digo sonriendo, al recordar cómo nos conocimos.Jareth me sonríe y los dos corremos en nuestras versiones de lobos hasta una parte alejada donde descansamos mirando un paisaje increíble que no conocía o por lo menos, no había visto detalladamente.Sin lujos, nos quedamos debajo de un árbol grande, donde Jareth se acuesta en su versión humana y palmea su pecho para que me quede sobre su pecho. Por lo que, de inmediato, me transformo en humana y sonriente, me coloco sobre su pecho.Jareth comienza a acariciar mi espalda y besar mi cabeza, con el amor que tanto me tard&ea
Despierto aturdida, la última vez que estuve despierta estaba bajo el árbol donde fui complacida por más de dos horas, pero, ahora estaba en mi cama. En mi suave y cómoda casa. Por lo que, era extraño estar en mi hogar, cuando estaba desnuda y agotada bajo un árbol.El sonido de un tango suave, me hace envolverme en mis sábanas y salir de mi habitación, sintiendo la exquisita aroma corporal de mi esposo. Camino sonriendo y yo encuentro en la sala a mi esposo, haciendo ejercicio, con dicha música de fondo.—Pensé que no tendrías energía para esto, después de lo que hicimos. — Susurro.—A mi esposa le gustan los músculos, es lo que más me tocas cuando estamos juntos. Así que, por mi bien, debo ejercitarme. Los músculos son la fuente de tu felicidad, bueno… si dejamos de lado mis movimientos pélvicos y lo que hago con mi&h
Suspiro profundo y Jareth me ayuda a salir del auto, para aferrarse a mí, algo que es fácil, porque su madre se encarga de ordenar a los fotógrafos para que nos tomen todas las fotos posibles. Algo que me deja ciega por breves segundos.—No te preocupes, al menor descuido huiremos. — Dice Jareth cerca de mi oído y yo asiento.Los dos entramos a la casa, sintiéndonos de la farándula, pero, cuando estamos por caminar por el vestíbulo del lugar, mi suegra nos coloca una especie de pulsera que se ilumina y hace un clic.—Siento que han pasado años desde que entré aquí por primera vez. — Susurro maravillándome por el lugar.—En ese momento mi hijo te buscaba, pero, yo bloqueé todos los caminos, debía confirmar si eras buena para él y cuando lo supe, me inventé lo de ser una anciana. — Dice mi suegra.—Un disfraz acorde
Jaret me abraza y todos aplauden al saber toda la lucha que experimenté para poder tener dichos documentos en mis manos. De inmediato, miro al cielo sintiendo mucha felicidad y agradecimiento, porque con esta herencia, puedo darle a mi hijo algo que es mío y que además de eso, es un regalo de mi madre, de su abuela.—Por fin las cosas están volviendo a su curso. — Susurro sonriente.—Sé que era algo importante para ti de lograr, por lo que, solo coordine todo con las chicas y aquí están los resultados de dicho trabajo. — Dice Jareth y yo lo abrazo feliz por ello.Todos comienzan a felicitarme y yo agradezco como sus palabras no muestran envidia y adicional a lo afectivos que son, puedo ver el orgullo que sienten porque no nos dimos por vencidos.Aunque cometimos errores en el camino, ahora tenemos buenos resultados que nos harán inmensamente felices. Porque, ya no tengo problema
Las burlas continúan, hasta que terminamos de comer. Los chicos están por irse y Allison también. Después de una revelación tan impactante, los Evans se muestran incomodos y un poco molestos. Pero, no hacen una escena y eso es bueno.—Lo único que queremos saber es cuando volverán a trabajar. Aunque tengo estilo de CEO, el trabajo como uno es muy aburrido para seguir con ello. — Dice Jackson y Jareth suspira profundo.—He renunciado a mi otro trabajo y pienso reducir las horas de trabajo en nuestra empresa, para estar más tiempo con mi esposa. — Dice Jareth como respuesta.—Adhara, ¿Cómo hiciste para acabar con el amor de la vida de Jareth? — pregunta Charles curioso.—¿Cómo dicen? — pregunto aturdida.—Era un adicto al trabajo. Era el único lobo que teniendo la administración de toda una empresa, se puso a c
Meses despuésCorro de un lado al otro con tanto trabajo y eso es algo que no le agrada a mi esposo, quien mira con enojo a Jackson y Charlie. Unos chicos que sufren en silencio por la mirada de mi esposo.—Adhara, por favor, deja de caminar tanto o nos mataran hoy. — dice Jackson.—Ya estoy terminando, no se preocupen. — Digo y eso no calma a nadie de los presentes.—¿Por qué todos tenemos secretarias menos mi esposa? ——Jareth— le digo con molestia.—La señora Every. — Dice Jareth.—Empleada Every. — Le recuerdo.Jareth suspira profundo. Habíamos quedado en que no se metería en mi trabajo y mucho menos, que mostraría favoritismo, pero, siempre se le olvida.—Adhara…——Señor Every, ¿necesita algo de mí? — pregunto curiosa.—Siéntate, por favor,