Enzo llega en la madrugada a la mansión, lo reciben con cordialidad los trabajadores y este se limita a asentirle. El mafioso solo quiere estar con su familia, camina a paso rápido hacia su habitación e ingresa en silencio, sin embargo, le toma por sorpresa encontrarlos despierto. —Enzo, —la humana sale de la cama con su bebé en brazos, el mafioso los abraza y besa su frente. —Pequeña, ¿Qué hacen despiertos a esta hora? —interroga, Liam lo mira mientras balbucea con mucha alegría y estira sus brazos hacia su padre esperando que lo cargue. —Creo que este pequeño sabía que vendrías y me despertó, —responde. —Buen chico, —acaricia la mejilla de su pequeño. La pequeña familia comparte por un rato, Mia deja a sus hombres despierto y se duerme bajo la supervisión de ambos, Enzo se encarga de Liam logrando que se duerma para poder ducharse y entrar a la cama con ellos.(…) Cuando Adriano despertó, lo hizo envuelto en los brazos de Donato,
Enzo por un momento pensó que había ganado esta batalla con Kristin, pero ella solo es un peón de la familia Santoro que es una de las más poderosas de Sicilia, conformada por nueve vampiros. —Mi criatura, —saluda Victor en el momento que su hija Kristin ingresa a la oficina. —Padre, —lo saluda con dos besos. —¿Qué ha pasado con el príncipe heredero en la reunión? —interroga ansioso de saber que hará el joven Marchetti. —El contrato de matrimonio solo me ofrece lo que sea ha adquirido en el tiempo que tenemos de casado, es insólito y lo peor es que su bastardo fue concebido antes de casarnos, —Victor sabía esa información, pero esperaba que Kristin lo sedujera y lo trajera de su lado de nuevo. —Tu misión era clara hija mía, —expresa. —Lo sé, padre, pero si hubiera visto su mirada de desprecio hacia mí, ni siquiera pude hablarle, —anuncia—. Me dijiste que me ayudarías a que estuviera conmigo por la eternidad, —el vampiro líder
Enzo MarchettiEstoy bastante sorprendido con el documento que me ha entregado mi padre, Kristin firmo el divorcio, lo miro en busca de una explicación y este prepara dos vasos con whisky para luego invitarme a ir al balcón. —Su creador lo trajo, —dice, me extiende la caja con habanos y tomó uno, lo enciendo y estoy impaciente por saber más sobre lo que tiene que decir—. Estuve durante muchos años esperando este momento, supuse que algún día Victor Santoro daría la cara y me pediría ser parte del consejo ahora que nuestras familias se unieron, sin embargo, es un hombre astuto, —hace una pausa para fumar. »Este nunca espero que llegara una humana igual a Astrid y que dejarías a Kristin de lado por ella, por un momento imagine que le haría daño a la joven Lennox, pero es un hombre con miedo a lo que puedo hacerle si rompe el tratado de paz, —no tengo duda de que mi padre arrancaría su cabeza de ser necesario. »Sabía que la convirtió para ver si algún día llega
Mia LennoxMi respiración se entrecorta al ver aquel cuadro, mi única emoción en este momento es miedo al igual que ansiedad, no me siento nada bien. Unas ganas de vomitar llegan a mí, me mareo por la falta de oxígeno que ha dejado de llegar a mi cabeza. —Pequeña, ¿estás bien? —el mafioso intenta acercarse a mí, pero retrocedo en automático vislumbrado dolor en su rostro por mi rechazo. —Ella es idéntica a mí, —susurro como puedo, ni siquiera me reconozco en este momento, ¿Me quiere por eso? Pregunto en mi mente. —Eso no cambia lo que siento por ti —afirma, Enzo pasa una mano por su rostro y deja salir un gruñido—. Pequeña, —corta la distancia entre nosotros para abrazarme—, yo te quiero, no son iguales para mí, —susurra. —¿Cómo puedes decirme algo como eso? —interrogo—. Ver ese retrato es como mirarme en el espejo, —añado en voz baja, me hace dudar de lo que él siente por mí. —Por favor, debes creerme, te quiero a ti, —se separa un poco pa
Enzo MarchettiLa humana frente a mi deja salir una carcajada en el momento que le confirmo que estoy celoso de que otro hombre decida coquetearle al frente de mí. —Enzo, no tienes por qué estar celoso, —dice al terminar de reírse. Bufo, no puedo evitar sentirme de este modo y menos cuando se trata de Mia—. Enzo Marchetti, celoso. —¿Podemos continuar la cena o hablamos de mis celos? —cuestiono, niega y se decide por la Ratatouille, por otro lado, solicito lasaña rellena de pollo. Cenamos con una conversación dirigida en su totalidad a nuestro hijo, ya que resulta gracioso recordar momentos en lo que nuestro cachorro nos hace reír. Al terminar con lo ordenado, el postre llega y llevo mi silla hasta su lado para poder ser quien le dé la torta de chocolate. —¿No pediste postre para ti? —interroga, sonrió y me acerco a su oreja. —Tú eres mi postre esta noche, —beso su mejilla, el corazón de Mia se acelera y me agrada lo que provoco en ella.
Mia LennoxRecibimos el amanecer abrazado y envueltos en las sábanas blancas, mi cabeza la tengo recostada en su pecho mientras que mi pierna derecha descansa sobre las suyas, Enzo deja caricias de manera distraída en mi cintura con su mirada puesta en el horizonte. Nunca debo poner las palabras de Enzo en duda, me hizo el amor hasta que aquellos rayos de luz comenzaron a alumbrar el horizonte, no esperaba que tuviera más preservativos y trajo dos cajas completa. Cuando se terminaron los que traía en su cartera, corrió hacia el Ferrari a buscar lo que dejo en el auto. —Es hermoso, ¿no crees? —interrogo. —Verlo contigo a mi lado lo hace hermoso, —es tan tierno, lo abrazo fuerte y puedo sentirlo sonreír, Enzo sabe que tiene todos los puntos ganados y que no existe nada que pueda alejarme de su lado. —¿A qué hora regresamos? —cuestiono. —Después de desayunar, —se sienta en la cama y hago lo mismo mientras cubro mis pechos con la sábana, Enzo t
Adriano D´angeloNunca he sido bueno para adaptarme y ahora mi vida ha dado un giro bastante grande. Soy un león rojizo, pequeño y ahora tengo un novio que es de mi misma especie, pero con un rango superior, Donato Marchetti, es enorme en ambas formas, él me muestra su hermosa forma animal, blanco, fuerte, ojos rojos y un aura de dominante. Suspiro mientras dejo caricia en su cabeza llena de pelo blanco que descansa en mi regazo, no he querido volver a transformarme, ya que la primera experiencia fue horrible y no quiero pasar por eso de nuevo, Donato me aconsejo que debo hacerlo aunque sea cuatro veces en un mes para que no duela. Ni siquiera sé cómo hacer eso, me siento inútil, sin embargo, el alfa es un buen maestro y me tiene mucha paciencia, Donato levanta su cabeza y mira hacia una dirección específica. Un hombre de piel morena sale de la maleza, es muy hermoso, el león se pone de pie e igual lo hago, mi acompañante regresa a su forma humana quedando desnudo fr
Mia LennoxObservo a Enzo cortar el mismo su barbar y no tengo duda de que es la imagen más atractiva de todas. Una toalla cubriendo la parte inferior de su cuerpo, crema de afeitar en su mandíbula y su ceño fruncido porque está bastante concentrado en hacerlo bien. —Tu mirada de acosadora me distrae, —anuncia mirándome de reojo. —Es culpa de que mi prometido sea tan sexi, —se ríe y me mira. —Muy halagadora, —dice—. Y ahora que recuerdo, ¿Por qué te has depilado? —interroga, me sonrojo, no entiendo cómo puede saltar de un tema a otro de ese modo. —¿No te gusto? —pregunto. —De todos modos me encantas, nena, —lleva su mirada al espejo—. No debes depilarte para mí, —añade. —Lo tendré en cuenta, —no soy una amante de la cera y todo eso. —Ashley te anda buscando, —anuncia, supongo la escucho con sus sentidos desarrollados. —Iremos de compra, nos vemos luego, —me acerco y se inclina para que pueda besar sus labios en f