TylerEstuve todo el día en el hospital luego de los exámenes, Mia fue llevada a su habitación especial, una enfermera nos llevó a Megan y a mí hasta el lugar, luego de colocarnos la indumentaria requerida, entramos, se veía cómoda con pequeñas flores dibujadas en la pared. Un baño y una cama auxiliar para el acompañante. Mi hija estaba dormida, por lo que Owen nos dio una charla acerca de la importancia de los implementos de vestuario.No pude irme a casa esa noche, ni siquiera las dos siguientes; pero para el tercer día tuve que volver a la mansión de los Shields, tenía mucho trabajo por hacer con la inauguración del hotel tan cerca, además del contrato que cumplir.Corté el suministro de agua y tomé una toalla, deslizándola en mi cadera; Isabella estaba sentada en la cama, con Tikki en sus piernas, me había traído el gato porque Megan estaría todo el tiempo con Mia en el hospital y no quería que el animalito estuviese encerrado en el departamento.—Hola.—susurré al vela ella bajó a
TylerLas siguientes semanas fueron vertiginosas; Owen nos entregó los examenes de compatibilidad y para nuestra mala suerte Isabella no era compatible con Mia, Henrry apesar de ser su bisabuelo tampocolo lo era, el cerco de la esperanza se reducia cada vez más lo que me tenia completamente loco, sin saber que hacer como moverme, por otro lado Jameson estaba al asecho y sentia como si estuviese respirandome en la jodida nuca. lo unico bueno de todo esto era que el doctor Owenhabía logrado que el centro de trasplantes colocara el nombre de mi niña como prioridad en la lista de donaciones de órganos.Solo que el donante no aparecía, había escuchado casos que demoraban meses, incluso años antes de poder tener uno compatible.Entre la oficina, los detalles de la inminente inauguración del Blue Ivy y los viajes hasta Jersey todos los días, mi vida se había convertido en un caos.Una semana antes de la inauguración del hotel, todo estaba mal, el suelo del vestíbulo no estaba lo suficientem
Jameson Apreté los nudillos al volante del coche y Kate acarició mi pierna, en un intento de calmarme, hacía dos días que estaba en Nueva York. El maldito Thomas me había traicionado, confié parte de mi negocio a él mientras estuve en Italia. ¿Y qué hizo el muy maldito? Compró m****a de mala calidad solo para enriquecerse a mi costa, siempre dándome mercancía “de la buena” para probar, cuando él vendía coca rebajada con cal a nuestros clientes, los italianos se dieron cuenta rápidamente, y uno de sus hombres visitó mi oficina hacía una semana, no precisamente para conversar. Hice lo que tenía que hacer, lo entregué a Vito, el hombre que Luca Di Marco, envió. Thomas había cavado su propia tumba, yo simplemente eché el primer palazo de tierra. Esperaba que, para ese momento, los animales del desierto hubiesen hecho un festín con su cuerpo, lo mejor de todo, era que Brown era mi mejor coartada. Nadie podía involucrarme con la muerte de Tom, si siempre estuve en Nueva York. Pero, a
IsabellaMiré por la ventana de mi oficina, podía ver parte del este de Central Park, por eso la elegí cuando supe que las empresas se fusionarían, según el trato de mi padre y Domenico treinta años atrás, nunca entendí cómo inició la amistad de ambos, pero recuerdo lo mucho que mi padre y Domenico se frecuentaban. Mi padre adoptó el apellido de mi madre a pesar de sus raíces italianas, siempre decía que se volvió loco de amor, al verla, y yo sonreía ante su historia, el verdadero apellido de mi padre era Di Rossi, pero una vez me dijo que no debía contárselo a nadie.Nunca pregunté por qué.Pasaron dos semanas desde la inauguración del Blue Ivy, todo parecía haber caído en una cómoda monotonía, había trabajo, sí, pero no al vertiginoso ritmo de los meses anteriores, mi nueva función era encargarme de organización de los distintos eventos, que se darían tanto en los hoteles como los restaurantes, sin embargo, tenía tiempo y últimamente siempre me sentía cansada y somnolienta.Tyler pa
Isabella—¿Qué es tan gracioso? —preguntó Tyler cuando nos estábamos acomodando la ropa después de nuestra fantasía del sexo en la oficina.—Que no vine aquí para esto. —Volví a reír.—Ah, ¿no? —Arqueó una de sus cejas, negué con mi cabeza alcanzando mi cartera del suelo, supongo que se cayó cuando limpió el escritorio. —De hecho, te traía un regalo. —Saqué la caja, seguíamos con las camisas abiertas, mi falda aún estaba arremolinada en mis caderas y él solo había acomodado su miembro dentro del bóxer—. Para ti. —Fue su turno de arquear una ceja, pero tomó la caja—. ¡Ábrela! —animé y lo hizo.Su rostro se congeló por unos segundos, antes de levantar su mirada hacia mí.—Pruebas de embarazo… —se veia muy confundido—¿Pruebas de embarazo? ¡Isa! ¡Mierda! ¿Estás? ¿Estamos? —Asentí—. Dios, ¡demonios! —Me reí—. ¿Estás bien? —Besó mi frente—. Tú y yo, ¡joder! No te lastimé, ¿verdad? —Negué y él sacó las pruebas—. Funcionó. —Asentí con la cabeza, nuevamente, parecía que había perdido la capac
Tyler—Hermano. —La voz de mi hermana me sacó de mi letargo, abrí los ojos bostezando, al mismo tiempo que intentaba estirarme en la silla, mi mirada se fue automáticamente a la cama, Mia seguía dormida, le había subido la temperatura un poco y pasé la mayor parte de la noche revisando que no superara los 38,5. Sus plaquetas estaban bajas, por lo que la fiebre era algo constante en estos días.Suspiré.»—¿Eres Feliz Tyler? —Arqueé una ceja —Sé que no puedes ser completamente feliz —miró a Mia—pero a pesar de todo esto ¿Eres feliz?—¿Por qué lo preguntas?— inquirí confundido.—Porque te veo, te veo cuando estas con ella, con Isabella, se que amaste a Lily, pero nunca te vi esa mirada ni esa sonrisa con ella y …«Isabella.»Ya había amanecido y no sabia nada de ella, prometio escribir tan pronto llegara a casa, dejé a Megan sin escuchar lo que fuera que estuviera diciendo y Caminé hacia donde estaba mi celular, lo desconecté de la corriente eléctrica, revisando mis mensajes en la aplic
TylerY una vez estuvimos solos, me confirmó lo que Darcy ya me había dicho, Isabella estuvo ahí la noche anterior y se fue a casa alrededor de las nueve, a la hora que me envió el último mensaje de texto.Me fui del colegio no sin antes prometerle a la hermana Alegria darle cualquier información que recibiera, mientras iba camino a casa pensé en desviarme hacia la mansión de Anthony, pero sabía que ella no estaría ahí, Anthony había estado tranquilo luego que le prometí adquirir el 50% de sus acciones del grupo Stewart.Era una promesa que no podría cumplir, pero para cuando él se diera cuenta, Isabella y sobretodo Darcy estarían fuera de su control y estaba seguro que el verdadero Jameson lo mandaría a la mierda.¿Y si él lo descubrió?¿Si por algún motivo se enteró que yo n
—¡Basta! Quiero que la policía desaloje mi casa… te llamaré de nuevo.—¡Jameson dime si ella está bien! —grité, demandando información, sin importarme la presencia de Domenico—. Solo dime que está bien.—Lo sabrás en la próxima llamada, Brown, espero que no haya policías para ese entonces.—Jameson… ¡Señor Shields! —vociferé una vez más, pero todo lo que me acompañó fue el sonido de la llamada siendo cortada.Levanté la mirada para encontrarme con el ceño fruncido de Domenico Shields.—Tienes cinco minutos antes de que llame al detective Morgan, quien quiera que seas tú.Capítulo 82Tyler¡Joder!La habia cagado y a lo grande, estaba tan preocupado por Isabella que había dicho el nombre real de Jameson, me habia olvidado completamente que yo tenia su vida y que su padre estaba en la habitación, podia sentir la mirada del hombre en mi, esto era todo. hasta aqui habia llegado la farza.—Sigo esperando —demandó con voz rotunda cuando solo nos observamos—. Asumo que el señor Shields del t