Solo tardaron dos días en encontrar al señor Valcoba alias el diablo, escondido en su mansión, inició un tiroteo el cual dejó a dos policías gravemente heridos haciendo que esto aumentara su condena.
La policía por fin logró acceder a la mansión luego de dispararle en el brazo y así quedará vulnerable.Ya con el padre de Amaranta apresado el abogado se dispuso a llamar a Damián y Amaranta para darle las noticias.Apenas se enteró Amaranta cayó al suelo arrodillada llorando aliviada de que todo hubiese salido bien y sin heridos aunque lamentaba la pérdida de esos oficiales. Damián la abrazó agachándose junto a ella para consolarla.Amaranta le respondio el abrazo. Por fin se sentían libres después de todo ese suplicio que habían pasado.Aunque el abogado le contó a Amaranta que su padre exigía verla una última vez.—No tienes que ir si no quieres, él no te puedo obligar a verlo.— admite Damián.—Lo sé...—guardóADVERTENCIA La siguiente historia que van a leer tiene contenido explícito, asesinatos y demás. Todo el contenido es ficticio y no promueve absolutamente nada. Espero que les guste, 𝒎𝒖𝒄𝒉𝒂𝒔 𝒈𝒓𝒂𝒄𝒊𝒂𝒔 𝒑𝒐𝒓 𝒍𝒆𝒆𝒓. Sipnosis: Hades Winter; empresario multimillonario, CEO heredero de la empresa de la familia, hombre reservado y misterioso, el hombre de los sueños más húmedos y perturbadores de Grace Coleman; mujer obsesionada con Hades desde el segundo grado, crecieron juntos, eran unos niños a penas cuando ella fijó su perversa obsesión en él. La obsesión de Grace por Hades la llevará a cometer actos de moral cuestionable, solo para mantenerse cerca de quien está perdida y oscura y locamente enamorada. ''La obsesión es mi forma natural de decirte te amo. '' Grace Coleman. Capítulo 1. Hades Winter, el guapísimo.<
No puedo solo llegar y pedir trabajo así como así, debería comenzar con algunos contactos y ¿Quién es el mejor con contactos? Mi padre, su lista es interminable, él es el indicado para ayudarme en esto.Obviamente él no vendrá hoy a casa y yo no puedo esperar mucho tiempo, decidí visitarlo directamente a su oficina y así hacer las cosas más fácil.Al llegar a su hospital, todas las asistentes me recibían con mucha amabilidad; ofreciéndome agua, servilletas, un aperitivo.Yo solo entre directamente hasta la oficina de mi padre, el cual puso una expresión de sorpresa al verme entrar.— ¿Hija?— ¿Esperabas a alguien más padre?—No, no, pasa. Toma asiento— me mira fijamente— ¿Qué ocurre?—Padre, necesito que muevas tus influencias para poder trabajar en la empresa Cronos.— ¿Qué? ¿Por qué?—Sé que no tienes tiempo y no llegaras a casa como de costumbre así que decidí venir.—Eso lo entiendo, pero ¿
Se abrieron las puertas del ascensor, dejando al descubierto el elegante y silencioso piso setenta. El suelo está cubierto por una alfombra color gris, las oficinas son transparentes pero con una cinta negra en el medio, como para no descubrir todo el interior.La única oficina totalmente privada es la oficina del CEO, el cual ahora es Hades Winter, su nombre está enmarcado en la placa que tiene la puerta.Todos están en una oficina en concreto, supongo que algo alterados por el cambio de jefe que menciono Dakota.Aproveche la soledad del piso para escabullirme casi de puntillas hasta la oficina de Hades, para mi suerte no estaba con seguro, cerré la puerta con sigilo y me acerque al asiento de Hades, casi gateando me deslizo por el suelo donde camina, siento con mis dedos el asiento de Hades; el respaldar, lo acaricio como si fuese su propia espalda.Me siento con cuidado en el escritorio y cierro mis ojos para imaginar que aparece ahí y me toma
Me encuentro sentada en mi cubículo, redactando y organizando mis pendientes, pero no puedo evitar pensar en lo que hice ayer.Dakota entro a mi cubículo para dejarme más trabajo, cuando estoy por recibirle los documentos ella observa en mi mano una cortada.—Oh por Dios, ¿Qué te paso? Grace.—No fue nada, me lastime cocinando— dije, en medio de risas nerviosas.—Ten más cuidado, aquí necesitaras ambas manos— dejo salir una carcajada y se marchó.No entiendo como pude actuar tan imprudente, ayer me parecía una idea excepcional, pero ahora solo siento culpa. No pude concentrarme bien, Hades no está en la empresa, siento que es un día perdido.Mi turno termino muy rápido, las horas pasan a la velocidad de la luz cuando Hades no está cerca, manejé nuevamente hasta mi casa, desanimada por no ver a Hades y cuestionando mis acciones.Abrí la puerta de mi pent-house y me deje caer en el suelo de la sala, encima de la
JUNIO/ MIÉRCOLES 5 /2024.Sorprendentemente la alarma sonó. No estoy acostumbrada a que ese pitido irritable penetre mis oídos, la detuve de inmediato, respire profundo antes de levantarme de la cama, siento mi cuerpo pesado y cero ganas de salir de mi habitación.El día esta gris, las nubes recargadas de agua, al igual que mis ánimos.Lo único que me anima para levantarme en este día de porquería es que Hades estará en la empresa y por supuesto que quiero ir a verlo, él es mi rayo de luz, mi pedazo de esperanza, mi alegría.Llegue a la empresa de cronos, al entrar veo a todos mirando unos pequeños sobres negros, Dakota se acerca a mí con su contoneo de tacones.— ¿Qué está pasando? — le pregunto de inmediato, observando a todos.—Mejor léelo tú misma— me entrega una invitación.Al abrirla quedo perpleja. —El señor Hades nos invita formalmente a todos a una fiesta con temática de máscaras y trajes ne
JUNIO/ JUEVES 6 /2024.Quisiera golpearme a mí misma por ser tan idiota, tuve a Hades justo en frente de mí y lo arruiné.Lo positivo es que no tiene idea de que era yo, la máscara me protegió.Me levanto a desayunar antes de ir al trabajo. Mi dolor de cabeza por la resaca está hartándome, quizá desayunando un poco se alivie.Enciendo la tv y me siento en el sofá a desayunar, cuando una noticia llama por completo mi atención.—Las autoridades buscan incansablemente algún rastro de la señorita Amanda Betwell... Sus familiares aseguran no saber nada de ella desde el día martes 28 de mayo. —Mi hija no desaparece así como así, ella es una mujer hogareña, y— sollozos, se limpia la nariz con un pañuelo— si alguien la ha visto o si alguien la secuestro... les ruego que la liberen, pagaremos lo que sea, haremos lo que sea para que vuelva sana y salva a casa.Oh por Dios, mira que destrozada se ve su pobre madre. Que lastima que
Llegue a casa derrotada, cansada, pero con un sentimiento inexplicable de felicidad. Una zorra menos en el mundo, una zorra menos para Hades.Entre en mi habitación y saque una carpeta debajo de mi colchón, ahí tengo mi tesoro más preciado; fotos de Hades, de todos sus logros, de todo lo que ha hecho, tengo incluso su foto del anuario. Todo en un pizarrón de cartón donde puse cada detalle de su vida. Sus hobbies, sus horarios. Esta pizarra es mi mundo. Admire cada foto de mi guapo Hades y la volví a guardar, no puedo dejar que nadie más observe esto.Al guardarlo me corte con un clip de los que sostenía la foto, una gota de sangre cayó en una hoja que estaba en el suelo. Guarde la pizarra y tome la hoja. Esa mancha roja me dio una idea.Si pudiese describir o explicar lo que siento por hades seria de esta forma; tome un lápiz y comencé a escribir su nombre, Hades. Lo escribí tantas veces como cabía en el papel. El
JUNIO/LUNES 10/2024.El fin de semana como de costumbre pasó lento, tortuoso y aburrido. No hice más que lavar mi ropa, organizar mis cosas y dormir el resto del día. Mi padre un llego, asumo que tiene viajes por negocios nuevamente. Está rompiendo su propio record en pasar más días fuera de casa y está ganando todos los premios.No pude vigilar a Hades como siempre porque esta fuera del país, tengo limites gracias a que decidí trabajar honradamente y no gastar el dinero de mi padre para perseguir a Hades vaya a donde vaya. Cometí ese error una vez cuando Hades y su familia se fueron de viaje a España, pase la tarjeta de crédito de mi padre en varias ocasiones para estadía de hotel y comidas. Luego me sentó en la mesa durante horas para que le explique por qué me gaste tanto dinero en equis momento.No es algo que estoy dispuesta a pasar en mis veinticuatro.Me levante de mi cama como siempre, y al revisar la hora en mi teléfon