LUCA BRANDWOLFSemanas después.Finalmente, la batalla terminó. Los lobos lucharon hasta el último suspiro, pero nada pudieron hacer, se desmoronaron, se extinguieron... El triunfo que alguna vez fue suyo, hace siglos, se deshizo como polvo en el viento. Los ángeles lo lograron, erradicaron finalmente a toda mi raza, todos, excepto yo. ¿Qué será de mí? No lo sé. Supongo que, por ser aliado de ellos, me dejarán con vida... ¿O quizás me condenen también? La duda me corroe.Algunos ángeles y hechiceros están heridos, murieron pocos, y aunque me siento aliviado por ello, esa paz me quema por dentro. Agradezco en mi alma que no haya sido peor, pero no puedo dejar de sentirme culpable. Soy un traidor a mi propia especie, pero, ¿qué haría uno cuando lo que se tiene frente a los ojos son criaturas tan puras, tan inocentes? Los lobos, demonios… esas son las verdaderas bestias, los monstruos de esta tierra. Quizá, si el destino es bondadoso, tal vez en el futuro se reconstruyan, pero con un cor
LUCAS BRANDWOLFEl golpe de la noticia me dejó atrapado en un mar de pensamientos, todo era un caos en mi mente. ¿Seré papá? ¿Realmente seré papá? La pregunta retumbaba en mi cabeza, como si el universo hubiera lanzado una bomba que aún no terminaba de explotar. Ser padre… Siempre lo soñé. Desde que tengo memoria, he deseado tener un hijo, alguien que fuera la parte viva de mi amor, un reflejo de la persona con la que compartiría todo. He esperado tanto tiempo, luchando contra la infertilidad que nos ha marcado como especie. ¿Esto es un milagro?En mi corazón, sé que algo o alguien ha intervenido en este destino, tal vez Ángela, o algún alma misericordiosa que decidió escuchar mi interminable deseo. Desde la muerte de Nicole, mi primer amor, no quise atarme a nadie más. No quería enfrentar otro adiós, otro pedazo de mi alma arrancado. Nicole era más que una mujer para mí. Era mi mate, mi otra mitad. Pero, su manada nunca aceptó lo nuestro. A escondidas, nos veíamos, amándonos en silen
ALAN BRANDWOLF.Dos semanas Después.... Hoy se cumplen dos semanas desde que me dieron de alta, he cumplido mi receta médica al pie de la letra y es que así no quiera tengo una enfermera privada y reservada solo para mí, así es mi preciosa Mar. Ella cuida de mí como si de un bebé se tratase, es muy tierna y adorable. Con ayuda mis muletas puedo caminar de un lado para otro, pero por insistencia de Mar he accedido a usar una silla de ruedas es más cómoda y se aplega bien a mi pie, ya puedo sentirlo un poco mas, duele, pero le siento ¿eso es lo que importa no? Los originales han decidido quedarse aquí, el jardín esta en buenas manos por lo que escuche así que no tienen de que preocuparse, Nialla se ve cada vez más feliz y contenta al lado del Chistoso de Eithan, Niall esta incluso peor que Nialla con Alison creo que es su nombre, increíblemente abunda la alegría, el amor y la felicidad en esta mansión, a excepción del pobre de mi hijo, sé que esta muy mal, vernos a todos alegres le ha
CELESTY SCHIFMAN.Despierto y lo primero que observó es una pared azul, me miro y llevo una bata blanca, estoy en un hospital, deduzco, no recuerdo mucho lo sucedido, pequeños flashes abundan en mi cabeza, intento recordar y solo sé que fui herida por una daga, me duele horrible el pecho y siento dificultad para respirar. Es por lo que recuerdo una de las estrategias que me enseño Alan, se llama «autosanación» consiste en usar mi poder de sanación conmigo misma, me concentro y funciona, siento como el dolor en mi pecho se apacigua y mi cabeza ya no duele.—Buenos días reina—me saludo alguien en pijamas azules, a de ser el doctor—¿Como te sientes?—Bien gracias..—admito—Mucho mejor. —se acerca y me observa, ve mi herida en el pecho y se asombra—¿Que hiciste reina? ¿Magia?—Es autosanación—le digo—Funciono a la perfección, tu cicatriz esta desapareciendo y según indica el cardialograma «una de las muchas máquinas que me rodean» Tus signos vitales se rehabilitaron y tú arteria parece
CELESTY SCHIFMAN.Han pasado cuatro meses, llevo cinco de embarazo si es lo que se preguntan, cuando Luca recibió la noticia tenía dos semanas, luego pasaron dos mas cuando desperté y ya era un mes, Mi estomago esta algo estirado, Mar dice que no es normal que este creciendo tanto para llevar solo cuatro meses, pero no es algo que me preocupe. El médico encargado de la maternidad dice que todo marcha en orden quiero creerle. Sam termina de maquillarme, mi cabello esta perfectamente recogido en un peinado con bastante glamours hecho por la misma, miro a Nialla y esta preciosa, su vestido va perfecto con ella, por su lado Alison luce realmente bien, Sam la estilista y maquilladora hace un trabajo perfecto y limpio. —¿Están listas señoritas?—pregunta Mar.—Sí—respondemos al unísono.La boda se llevará a cabo en el enorme jardín de la mansión, tal cual fue la de Luca con la arpía rubia, siento un poquito de celos nada más. El jardín esta perfectamente decorado, las sillas estan v
Los pequeños rayos de sol que interceptan en el rostro de Celesty la hacen sobresaltarse, obligandola a levantarse y correr la cortina para cubrir los fuertes rayos, le da una mirada a su cama y estan descansando los 4 amenamente, se dispone a aprovechar estas horas de descanso y se ducha, cepilla sus dientes y se viste con algo cómodo para hacer las labores del hogar. Tocan la puerta con fuertes y suaves golpes, Celesty se acerca a la puerta, toma el picaporte y lo gira, unas manitas chiquitas abrazan sus piernas, sonríe al ver a sus dos traviesos primos.—¡Hola!—saluda la pequeñita Angie.—¡Hola cariño!—respondió dulcemente Celesty.—¿A mí no piensas saludarme?—pregunta el niño mayor Raffaelo—¡Pero como no, si eres mi gruñón favorito—le responde alegremente mientras pellizca sus mejillas.—¡Pasen! vayan al jardín, mientras voy por sus galletas.Los niños corren con euforia a la parte trasera del hogar Brandwolf, al enorme jardín. Mientras que la madre de ambos se sienta en el sof
ALAN BRANDWOLF.Eché una última mirada al espejo, mi smoking estaba perfectamente arreglado, no había rastro de ninguna arruga, mi cabello blanco está peinado delicadamente hacía la izquierda, perfumé cada rincón de mi arrugado cuerpo y estaba más que listo, ¿Ella ya estará lista? ¿Estará tan nerviosa como yo? Parezco un puberto cuándo es su primera vez.Me senté en el taburete de la habitación del hotel "Rolly Star" el lugar de ensueño para una boda. Los nervios recorren todo mi cuerpo, me siento tal cual como si fuera la primera vez, esto solo me recuerda a Ángela...Cuándo nos casamos, pero no la recuerdo como algo doloroso, al contrario, la recuerdo como uno de los mejores capítulos de mi historia, pero que ya pasó y quedó atrás, Ahora debo centrarme en ser feliz como sé que ella lo hubiese querido. Debo centrarme en Margie.Unos toques en la puerta me sacan de mi ensimismamiento, con algo de torpeza camino hasta ella, tomo el picaporte y lo giro.—¿Señor Brandwolf?—asiento—Ella es
SELENE BRANDWOLFFinalmente, mi hermana Celeste y yo habíamos llegado a los 18 años. ¡Al fin! El día había llegado, y estábamos tan ansiosas por la fiesta que no podíamos dejar de sonreír. Hoy sería un día para recordar. Todo el instituto estaría en el club, ¡y él también iría! ¿Cómo no iba a estar ansiosa? Además, siendo viernes, tocaba instituto, y al entrar en el enorme y verde edificio de "Bresteh High", nos encontramos con un gran cartel que decía: “Felices 18 Repetidas”. Nos encantó. Lo que sea que nos llamen —clones, gemelas, repetidas—, la verdad es que nos ha caído bien. Somos populares y, aunque a veces nos confunden, no me quejo. La popularidad es, sin duda, la mejor etapa de la adolescencia.—¿Celeste? —Escuché una voz detrás de mí.—¿Mm? —Respondí sin voltear, solo para ver a quién se refería.—¿Cómo sé que eres Celeste y no Selene? —Preguntó con tono curioso.—¿Qué quieres? Al punto, Brigginton. —Respondí con tono firme, imitando la actitud de mi hermana.—No tengo dudas