Vi cómo cayó dormido del agotamiento. Él no se daba cuenta porque no podía mirarse pero parecía un cadáver: no le quedaría mucho tiempo de vida."Mar, no podemos dejar que muera". — me dijo Sahira."¡Es nuestra madre! No podemos matarla.""¿¡Y prefieres que nuestro cachorro crezca sin padre y sin abuelos!?""¡NO! Jake vivirá y mamá se salvará"."¿¡CÓMO!?""Isa encontrará una solución... sé que lo hará. A tiempo. Confía en ella"."¡MI PAREJA SE ESTÁ MURIENDO!""¡TAMBIÉN ES MI PAREJA!""¡PUES NO LO PARECE!" Sentí aquello como una puñalada al corazón y Sahira se dió cuenta."Mar... yo... lo siento mucho... no quería...""Sí, querías. Vete. No quiero saber nada de ti."Noté cómo Sahira se retiraba lentamente, cabizbaja y con la cola gacha.— Mi Reina... ¿se encuentra... bien? — me preguntó con preocupación un médico. Me sequé rápido las lágrimas.— Sí, estoy bien. Muchas gracias por preocuparte. — dije con una sonrisa amable y me sorprendí al notar mi voz totalmente firme.— Si necesita
Fui la primera en pasar a la habitación y esperé a que entrasen. Sabía que algo estaba sucediendo y quería saber que era. Confiaba en que el secretismo y el nerviosismo que mostraban no fuese porque quisieran matarnos a mi o a mi bebé."Antes mueren ellos que yo." — dijo Sahira en mi mente. La ignoré, seguía muy dolida con ella."Por favor Mar... lo siento mucho. Sé que tú también amas a Jake con toda tu alma... estamos juntas, puedo sentirlo. Yo... no soporto estar así contigo. Me recuerda a cuándo creías estar loca y... lo siento. Por favor, perdóname..." Seguí ignorando a mi loba aunque estar enfadada con ella me dolía mucho más de lo que quería admitir: me había acostumbrado a confiar en ella, a hablar con ella, se había convertido en esa amiga que sabes que nunca te traicionará. Por eso me había dolido tanto su comentario.Se cerró la puerta y observé a las cuatro personas que tenía frente a mi. Una de las chicas , de pelo liso, largo y castaño miraba a Jake con una expresión ex
Pasaron algunas semanas y busqué información acerca de los híbridos, además de escuchar a Isa y pedir al clan Blackleg que creasen la toxina: por lo que me habían dicho, los "métodos de persuasión" que ellas utilizaban eran una combinación de instrumentos de tortura con todo tipo de toxinas, ya que en palabras de la propia Elisa: "No existe ningún veneno en el mundo que no podamos fabricar". Lo malo era que esa toxina en particular era bastante compleja y su fabricación no era sencilla, así que se había asignado la tarea de fabricarla a varias arañas: de momento, conseguíamos tener una fabricación algo superior a la dosis que necesitábamos. Isa había hablado con los híbridos y había encontrado muy interesantes sus métodos y estaban viendo cómo podían combinar sus magias y poderes para salvarlos. Incluso Yo se pasaba varias veces de forma diaria para aportar algún matiz y ver si su magia negra o de sangre podía ayudar en algo. También hice público que teníamos híbridos en la manada y q
Me metieron en el paritorio y me dieron la epidural (o lo que fuera el equivalente de los lobos, aún había muchas cosas que desconocía). No sé el tiempo que pasé así, ya que el dolor era bastante fuerte pero no había dilatado lo suficiente. Todos en el hospital estaban de los nervios y no paraban de revisar cosas. De fondo, escuchaba a Jake exigir estar presente en el parto. Los médicos intentaban convencerlo de lo contrario... a gritos. Desde que había roto aguas, parecía que todos se habían olvidado de hablar y sólo sabían vociferar cosas. Por supuesto, con el ajetreo la manada se había enterado de que pasaba algo con mi bebé y habían acudido, en masa, corriendo al hospital. Después de aquello, enseguida fue vox populi que me había puesto de parto y la seguridad del hospital tuvo que intervenir y bloquearles el paso, ya que todos querían ver al futuro Alfa de la manada. Los únicos que pudieron pasar fueron mis guardaespaldas (los que no estaban en el hospital llegaron rapidísimo) y
Estaba tranquila en el bosque, observando la naturaleza. Había días que echaba de menos el ajetreo de un pueblo o una ciudad pero en cambio había veces que... bueno, sólo quería dejar pasar el tiempo mientras admiraba toda la creación. De vez en cuando, acudía para encontrar la paz interior o reflexionar: hoy era uno de esos días.Cuando era pequeña, en mi aquelarre me decían que era especial, que había sido bendecida por nuestra madre gracias a mi gran potencial mágico. ¿De dónde había salido? Nadie lo sabía, tan sólo aparecí una noche, recién nacida, en la puerta de la Bruja Principal, sin que nadie hubiera visto algo. Allí me acogieron y me cuidaron aunque pronto se vió mi gran potencial. Me prepararon para ser la próxima Bruja Principal y liderar el Aquelarre pero yo no quería eso: quería conocer mundo, descubrir mis orígenes. Por desgracia no encontré ningún rastro de mis padres aunque aquello se contrarrestó con el fascinante mundo que me rodeaba, y tampoco estaba exenta de la e
Salí con mi hija en brazos y acompañada de cuatro de mis guardaespaldas. Los otros dos se quedaron con Jake para evitar cualquier problema. Joselyn llevaba un cochecito de bebé por si necesitaba dejar a mi hija en cualquier momento. Habíamos comprado de todo durante el embarazo, por lo que pudiera pasar. Estrella llegó corriendo.— ¡Mi Reina! Disculpa la tardanza, no sabía que habías salido del hospital. He venido en cuánto me he enterado.Sonreí a Estrella mientras cogía el cochecito a Joselyn.— No te preocupes, es por las visitas a la manada. — Entiendo. Yo cuidaré de la princesa siempre que sea necesario. — Yo puedo cuidar de mi hija perfectamente, Estrella. — dije con un tono más arisco del que esperaba.— Por supuesto, mi Reina. Me refería a cuándo estés demasiado ocupada con el trabajo para cuidar de la princesa. Será un honor encargarme de ella."Parece que ya tenemos niñera." — dijo Sahira."Estoy segura de que saldrán cuidadores por todos lados.""Sí, pero sabes que no se
Estrella se acercó corriendo.— Mi Reina, dame a la princesa, yo la cuidaré.Negué con la cabeza.— Muchas gracias Estrella, pero no será necesario. Miré a la humana que me abrazaba con miedo.— Hola Laida, cuánto tiempo. Somos... bueno, no es fácil de contar. El resumen es que todas las leyendas de la mitología son reales y ahora mismo estás viendo una reunión.— ¿Mi... mitología? ¿Con dioses, vampiros y todo eso? — Sí. — ¿Y cómo son los vampiros?Me reí.— No lo sé, aún no me he encontrado con ninguno.— ¿Y la voz de tu cabeza? ¿Sigue ahí o ha desaparecido?— Resulta que era mi loba. Es algo largo de explicar.— ¿Y por qué... por qué estáis aquí? — Unas brujas mataron a todas las personas y después hemos comprado el pueblo.— ¿Ha... a... han muerto? — dijo Laida echándose a llorar — ¿y... y... y aaaahora... qué haaago yo? ¿Dddóoondee vvooyy aa vviiviir? La miré con lástima.— No te preocupes... no te preocupes. Algo haremos antes de que tengas que regresar al campamento.— ¿Yyy
— ¿Cccero tresss? ¿Qué essstasss haccciendo aquí? — preguntó Yo con desconfianza.— Vengo a unirme a la manada, cccero ssseisss.—Me llamo Yo.— Veo que sssiguesss con esssa tontería.— No esss ninguna tontería. ¿Cómo hasss huido, cccero tresss?— Aprovechando una misssión. No volvissste y no sssabían sssi habíasss muerto o desssertado porque nadie podía essspiar a la manada. Cuando inffformaron de una sssombra en el ataque de Brisssa Plateada, me enviaron.— No me fffío de ti.— Esss normal. Yo tampoco lo haría en tu lugar."¿Qué sucede, Yo?""Esss una de lasss sssombrasss masss lealesss a lasss brujasss. No confffío en ella.""Pero si hace el juramento no podrá hacernos nada, ¿no?""No lo sssé. Lasss brujasss sssaben demasssiado de magia y el juramento esss magia. Quizzzásss sssepan contrarressstarlo de alguna manera.""Entiendo. Pero si no la acepto, nada nos asegura que no cumpla su misión.""Lo ssse. Podría ssser sssu sssombra. Ssser la sssombra de una sssombra." — y comenzó a re