Me desperté ante un ruido insistente y gemí en voz alta.- ¡Abre la maldita puerta, Cole! – dijo la voz de un hombre enojado.Entonces me sentí cargada y puesta en un mullido y hermoso colchón. Yo gemí de felicidad mientras los golpes continuaban insistentemente.Rodé por el espacio como un gato y me restregué en el hermoso aroma de las sábanas. Mierda, yo quería de este jabón.Entonces el peso de un cuerpo masculino cubrió el mío y una voz ronca y suave susurró en mi oído.- Despierta, princesa. Quizá puedas hacer enojar a mi hermano mucho antes de lo previsto. - Dijo divertido.Yo abrí los ojos y lo miré fijamente. Estaba despeinado y se notaba el crecimiento de su barba de un día. Yo quise probar las aguas y los límites.- Buenos días, guapo. - Dije con una sonrisa coqueta y mis manos se posaron en sus hombros. - ¿Por qué hay tanto ruido?- Supongo que alguien le dio las buenas noticias a mi querido hermano sobre el nuevo miembro de la familia - Dijo sin apartar la mirada de la mía
- ¡No me refiero a eso! - Dijo intentando soltarse con más fuerza y yo lo dejé ir magnánimamente. Se levantó de la cama y me miró con furia, aunque se guardó sus manos para sí mismo esta vez. Bien, es bonito que haya aprendido la lección. - ¡Dime que mierda de brujería me hiciste o llamaré a mis guardias y te mataré en este segundo!- Woa, ve despacio pequeño rey. - Dije divertida. - Para empezar, no sé de qué hablas. Te he visto un total de dos minutos en toda mi vida, ¿Cómo podría hacerte brujería? ¿Existe eso? - Pregunté divagando entonces me fijé en Cole; tenía el ceño fruncido y cuando arqueé una ceja en su dirección preguntando silenciosamente sobre el asunto de la brujería, él negó con la cabeza. - Como sea, con respecto al segundo asunto… ¿Es que acaso no puedes matarme tú? – pregunté curiosa. - ¿Necesitas que mami te diga si puedes estar conmigo y luego a tus guardias para matarme? ¿A quién llamas para que te limpie el trasero?Sabía que me estaba pasando tres pueblos al no c
- Espero que no se te olvide tu parte del trato, Cole. - Dije con las mejillas tan llenas como una ardilla en invierno.- No lo olvido. - Dijo con diversión al mirarme devorar mi comida. - Puedes iniciar en la Academia cuando quieras.- ¿El trato de ser tu pareja incluye la colegiatura y el uniforme? - Pregunté curiosa. - No le he dicho al tío Chad que me quedaré aquí por un tiempo y no sé si vaya a poder pagarme la Academia.- Puedes preguntarle tu misma, cachorra. - Dijo una voz a mi espalda.Me volteé con una sonrisa en los labios.- Hola tío Chad.- ¿Me puedes explicar por qué esas cortas dos horas de pronto fueron veinte? - Dijo sacando una silla de debajo de la mesa y sentándose a mi lado.- Buenos días, príncipe Cole.- Por favor, tío Chad, usted puede llamarme solo Cole. Somos familia. - Dijo en tono serio pero amable mi pareja.- ¿La historia corta? - Dije con un suspiro resignado. - Mi pareja me rechazó y luego Cole quiso jugar a “el primero que sea sometido, pierde”.- ¿La a
Mi tío aprovechó el elemento sorpresa que le proporcioné al dejar inconsciente al primer guardia con el que me topé y se encargó de incapacitar a otros dos antes de que se dieran cuenta de qué era lo que estaba pasando. Era divertido ver sus caras y las de mis guardias cuando se percataban de que sabía lo que estaba haciendo. Solamente así fue cuando me tomaron en serio y comenzaron a defenderse.Mis guardias después de unos segundos de indecisión comenzaron a intentar calmar las aguas.-¡Deténganse! ¡Es la… !- No dejaron terminar al pobre, recibió un puñetazo en su bonita mejilla y salió volando.Yo reí divertida y seguí luchando contra dos chicos. Después de medio minuto supongo que se cansaron y se transformaron en lobos.-Esa es mi especialidad, amigos. - Dije con una sonrisa salvaje y entonces me transformé en un parpadeo.Mi cuerpo se iluminó brevemente y mi blanco pelaje surgió rápidamente. Solté un pequeño y delicado aullido de desafío antes de volver a la lucha.-¿Conociendo
Cole nos guió hacia el pueblo Norte más cercano y me bajó de sus brazos en cuanto estuvimos cerca; no dijo nada en cuanto brinqué y me aferré como mono a su pecho al salir del castillo, solo se limitó a acomodarme y siguió caminando. -¿Tanto te gusta ser llevada a todos lados a cuestas?- Preguntó mi tío divertido en cuanto me acurruqué. -Ya probé lo que es ir del punto A al punto B sin tener que hacer esfuerzo y me gustó. - Dije en tono serio. - No te molesta, ¿Verdad cariño?- Dije haciéndole ojitos a Cole. -No. Me ahorra tiempo y no tengo que disminuir el paso. - Dijo en tono serio mientras les hacía señas a sus guardias para que lo siguieran en vez de rodearlo. -No soy tan lenta, ¡Qué exagerado!- Dije en falso tono de irritación. Ambos me miraron arqueando una ceja y yo les saqué la lengua. -Estúpidos machos con piernas largas. - Me quejé con un murmullo que ambos ignoraron. Yo estuve callada durante el viaje después de eso; me limitaba a olisquear disimuladamente a Cole. Mald
-Buenos días príncipe Cole. - Dijo con una reverencia. Luego me miró a mi y lo vi inseguro de hacerme una reverencia, ya que no sabía quién era yo. -Es mi pareja. Puedes inclinarte. - Dijo Cole inexpresivo. Braxton me hizo una reverencia rápida y yo adopté la actitud de Cole dando la impresión de que me importaba una m****a estar aquí. Aunque tal vez no era del todo fingido. -Gracias por venir tan rápido, Príncipe. - Dijo Braxton. - Los salvajes se han vuelto incontrolables en los últimos días y me temo que se han organizado y formado un grupo considerable. Los salvajes era el término cariñoso que les dábamos a los hombres y mujeres que por una u otra razón perdían el equilibrio entre su forma humana y animal. No eran conocidos por ser razonables, ya que se guiaban por el instinto y no eran seres sociables así que saber que se estaban agrupando y organizando era un hecho inaudito. -¿Daños?- Preguntó Cole con calma. -En los últimos días, solo pequeños hurtos a comerciantes que ent
Kyrian y yo nos complementábamos muy bien al haber pasado algunos años entrenando juntos. Él conocía mis debilidades y modificaba su estilo de pelea ligeramente para que los lobos más grandes lo atacaran a él. Podría contra cuatro o cinco lobos enormes, pero no tengo la fuerza bruta suficiente como para terminarlos rápidamente y él lo sabía. Yo conocía las suyas y me encargaba de vigilar su espalda cada que se lanzaba hacia un enemigo y dejaba brevemente una apertura para que alguien pudiera atacar su cuello.Maté a mi cuarto lobo cuando apareció la caballería en forma de un muy hermoso lobo negro como la noche y ojos de tormenta... solo que el maldito se sentó sobre sus flancos traseros y nos observó eliminar a los salvajes sin mover una pata. Idiota.Yo resoplé en su dirección brevemente y me volví a enfocar en la pelea. Kyrian me lanzó a un lobo pequeño mientras él se concentraba en el lobo más grande del grupo y rápidamente lo eliminé con una mordida en el cuello y un movimiento b
Comenzamos a batirnos en duelo rodando por el piso mientras él reía a carcajadas y esquivaba algunos de mis golpes. Tío Chad me animaba desde arriba. -¡Ve por su costado! Tiene una abertura cada que bloquea con su brazo derecho. - Dijo con voz de maestro. - Siempre fíjate en los movimientos repetitivos de tu oponente. Yo seguí sus instrucciones y pronto tenía sometido a Kyrian quien seguía riéndose. -Debiste ver tu cara. - Dijo sin parar su ataque de risa a pesar de que su propia cara estaba metida entre la hierba. -Dejen de jugar, tenemos que regresar. - Dijo Cole con tono serio. - Kyrian, recoge la evidencia y deja de molestar a mi pareja. Yo salí de encima y le di una patada juguetona antes de alejarme con el tío Chad. - Necesitamos trabajar en que forjes músculos. - Dijo tío Chad pensativo. - Eres rápida y ágil pero le falta fuerza a tus golpes. No lo había notado hasta que peleaste con Kyrian. - Dijo asombrado. -No es eso, realmente no estaba peleando en serio con él. - Di