Irina caminaba atrás de aquella mujer sin detenerse, lo último que deseaba era regresar nuevamente a las manos de Andrei, su condena a muerte estaba más que clara.En silencio se escabulleron del personal de seguridad, Irina se encontraba confundida ya que era llevada hacia la parte inferior de aquella propiedad, lugar al cual se referían aquellos rumores sobre la maldad de Andrei con sus difuntas esposas.Al llegar al sótano la humedad, la oscuridad y el mal aspecto del lugar que se podía notar entre las sombras, causaba que Irina no pudiera continuar; una fuerte presión en el pecho y las náuseas le jugaron una mala pasada. —No puedo continuar vete y déjame aquí —habló Irina con la voz débil y entrecortada, luego cayó. —No te rindas tan fácil, si me encuentro en este lugar ha sido para salvarte, así que ni loca te dejaré —Irina sacó fuerzas de donde no las tenía y luego se levantó.Sus piernas temblaban, pero aún así ella se concentró en salir de aquel lugar, su mano se aferró con
Mientras que Irina se encontraba aterrorizada y sin una pizca de control, Alexandra mantenía el rostro firme, aquella mujer se mostraba segura de lo que estaba haciendo, tan solo llevaba la mirada a través del retrovisor asegurándose dónde se encontraba Andrei. —Debemos detenernos, no soporto más esta situación, no puedo con esto, no quiero que esto termine en tragedia—habló Irina con la voz entrecortada entrando en pánico. —¿Detenernos, acaso estás bromeando?, ¿qué clase de mujer eres? —cuestionó Alexandra mientras más empujaba el acelerador del auto.—Sí, he dicho detenernos, llevamos ventaja, podrás escapar sin que Andrei logre descubrirte; una vez que me tenga se detendrá, trataré de hacerle perder tiempo para que puedas ir lo más lejos posible. —¡No! —interrumpió Alexandra—. Has perdido la cabeza si piensas que te dejaré en medio de esta situación, y peor aún en manos de ese desgraciado, no eres tonta y sabes muy bien cual será tu destino si ese hombre llega a tenerte nuevamen
Irina negó moviendo su cabeza; ponerse al frente de aquellos hombres no estaba dentro de sus planes, y por supuesto que no pretendía hacerlo.—No lo pienso hacer, estas personas solo causan dolor, lo único que quiero es ser libre, era la esposa de Andrei, pero nunca fue por voluntad propia, como tú misma lo has dicho, fui obligada, utilizada como mercancía, así que si quieres puedes ponerte al frente, en cuanto a mí, me iré ahora mismo —aseguró Irina. Irina se dio vuelta y luego subió al auto donde había escapado, en su mente solo tenía un objetivo, ir en búsqueda de Dmitriy; los primeros rayos del sol golpearon contra el panorámico, sintiendo el calor de aquel amanecer como la celebración de su libertad. Irina condujo por unas cuantas horas, necesitaba verlo de frente, escuchar de su boca decir que ya nada quería tener nada con ella; luego de que sucediera aquello ni siquiera sabía como iba a actuar.Al llegar a la propiedad, Irina descendió del auto, los hombres a cargo de la segu
Luego de aquella intervención, los segundos se detuvieron, Irina estaba emocionada, nuevamente estaba frente a Dmitriy, sintió un leve cosquilleo en su estómago ante la emoción. —¿Qué está sucediendo? —cuestionó manteniendo su rostro firme.—Pero, ¿cómo te atreves a sostener la mano de tu madre? —reclamó aquella mujer molesta en contra de su hijo. —Solo he venido a hablar contigo, pero ella se interpuso —respondió Irina manteniendo la mirada fija en la de Dmitriy.—¿Qué haces aquí, a qué has venido? —Irina entrelazó los dedos y exhalo con fuerza. —Necesito hablar contigo... En privado de preferencia, no me sentiría cómoda hablando frente a ella —Dmitriy giró la mirada y la conectó con su madre. —Esta mujer tiene nombre, soy Olga, la madre de Dmitriy, un hijo que antes de que perdiera la memoria solía respetarme, ahora pone a cualquier aparecido por encima de mí, me siento indignada, lo mejor es que me marche de este lugar —Comentó la madre de Dmitriy mostrándose molesta y luego se
Un año más tarde. Dmitriy aún continúa sin recuperar la memoria, permanece ocupado en sus asuntos; su madre ha decidido regresar nuevamente al país donde permanece lejos de los asuntos de su hijo.De manera astuta y aislada ha sabido manejar la guerra con Fedor, se ha convertido en un hombre más frío y tétrico de lo que un día fue; ahora permanece distante del personal a su servicio, tan solo cruza palabra con Mía.—Hoy será la reunión que ha preparado Stephan, supongo cual será tu respuesta, pero recuerda que traerá grandes beneficios si llegas a asistir, van a negociar nuevas rutas y territorios; lo mejor es que asistas y no te quedes por fuera —informó Mía.—Stephan ha logrado despertar en mi gran desconfianza, no sé que rayos estaba pensando cuando me convertí en su socio, no pienso perder la oportunidad para terminar cualquier vínculo con él —musitó Dmitriy mientras trabajaba en la computadora.—Pero, mientras eso suceda lo mejor es que estés al tanto de lo que se pretenda hacer
En medio de aquel salón el caos hizo presencia; Dmitriy luego de tanto tiempo se encontraba frente al asesino de su esposa, todo aquello que había discutido con aquel hombre había quedado en medio de aquel lapso de pérdida de memoria, así que estar allí para él era su primer encuentro luego del dolor que le había causado. —Fue un error haber venido, lo mejor es que nos regresemos, cálmate y trata de mantenerte en tu lugar; no es el mejor momento para querer cobrar venganza —Mía sostenía con fuerza a Dmitriy del brazo impidiendo que sucediera una tragedia. A su vez, Fedor se encontraba sentado cómodamente mostrando en su rostro una leve sonrisa, a su lado se encontraba Nikolay, quien permaneció con el rostro firme, de manera sigilosa llevó la mano hasta la cintura, empuñó la pistola y se preparó para corresponder a las acciones de Dmitriy.—Sucede algo contigo —Stephan intervino.—No sucede nada que te interese, solo vete y déjanos tranquilos, Dmitriy se encuentra indispuesto para at
Dmitriy se encontraba furioso, pero luego de aquel accidente su rostro cambió, estaba nuevamente frente de aquella mujer que lo había buscado en el pasado.—¿A dónde vas con tanta prisa? —preguntó Irina con un tono de voz neutro. —¡Tu otra vez!, no me digas que aún sigues interesada en demostrarme tu amor —hablo Dmitriy mostrándose odioso—. Supuse que ibas a desaparecer para siempre de mi vida, pero mira nomás, tendré que seguir soportando tu presencia, ¿qué haces en este lugar? »Mejor no te molestes en responder; ya estoy enterado que en la parte de afuera se encuentra tu padre y tu hermano, seguramente están buscando a alguna esposa para arrebatarle la vida —Irina rodó los ojos, luego colocó las manos en su pecho para alejarse de él.—No todo gira en torno a ti, las cosas han cambiado, Fedor si es mi padre, pero nunca he aceptado su forma de ser, aunque eso no debo explicarlo a ti. En cuanto a ti, admito que al principio no fue nada fácil, pero finalmente terminé aceptando que mi
Luego de aquella mala situación que Irina tuvo que pasar, terminó escuchando las palabras de Alexandra, su mente y su corazón se encontraban destrozados, así que terminó ocupando el puesto de su difunto esposo, aquella decisión la tomó para mantener sus pensamientos y sentimientos ocultos. —Señora Irina, se trata de su padre, se encuentra en la entrada principal y pide ser atendido —informó uno de los hombres a cargo de su seguridad. —Iré a atenderlo, no hay necesidad que lo hagan seguir —Irina se levantó de la silla mostrando firmeza en su rostro y decidida en sus acciones. Al llegar a la entrada, se detuvo, luego se cruzó de brazos; Fedor una vez que con la mirada la rastreo fue directo a ella, dibujo una leve sonrisa en su rostro como si todo estuviera bien. —Te ves muy bien hija, me alegra no haberme equivocado en mis decisiones, espero que nunca olvides que gracias a mí estás en esta posición; recuerda que nunca te quise hacer daño solo intentaba buscar que tuvieras el mejor