Casi a media noche, Alan fue a ver a Lauren, ella estaba aún despierta, la preocupación no le había dejado dormir. Él entró sin hacer ruido, Lauren se sentó al verlo y se alegró.—¡Alan! —Él se acercó y se abrazaron, Alan besó su frente.—Creí que nunca vendrías.—No pude hacerlo antes, Jeremy llegó en el momento más inoportuno.—Tengo que regresar con Jeremy a Estados Unidos, si no lo hago me quitará a Julieta.—Lo sé, por eso he permanecido callado, pero lo que más deseo es gritarle a Jeremy en su cara lo que se merece. —Lauren le tocó el rostro.—No lo hagas, Jeremy no debe enterarse de nada.—Por ti es que me quedo callado, pero si te vas con él, cuando me golpeé tu ausencia, me voy a morir de tristeza. —Lauren lo abrazó mientras que sus ojos se llenaron de lágrimas.—No voy a renunciar a nuestro amor.—Jeremy pretende ganar de nuevo tu corazón.—No, no puedo amarlo, antes lo hice, pero ahora no puedo.***A Lauren le dieron el alta días antes que a la bebé, por lo que tuvo que re
Alan se había marchado al viñedo esa madrugada, decidió que lo mejor era alejarse de Lauren, se fue sin su padre, Héctor lo alcanzaría después. —Es extraño que Alan no me haya invitado al viñedo. —Comentó Jeremy durante el almuerzo y delante de Lauren. Ella aún ignoraba que Alan había decidido alejarse de ella. Héctor respondió:—Es que él sabe que estás muy emocionado con tu hija y seguro no querrá quitarte tiempo.Esa misma tarde Dayanna fue a la mansión a buscar a Chiara, entró a la sala y saludó a Vera, se quedó charlando con ella un poco, después Vera subió a buscar a Chiara, Dayanna se quedó en la sala con una leve sonrisa en los labios, sin nada que hacer se sentó en el sofá y cruzó una pierna sobre a otra. de pronto Jeremy bajó las escaleras, ella al verlo sonrió y se puso de pie.—No sabía que el nuevo patriarca de la familia Remington se encontraba en Italia. —Jeremy no simpatizaba con ella.—Buenas tardes Dayanna. —dijo con el rostro serio.—Supongo que viniste a conocer
Alan regresó al otro día, Jeremy aun no podía creer por completo en las palabras de Dayanna, pero tenía sus sospechas. Alan disimuló muy bien, se mantuvo lejos de Lauren y ni la miraba, todo como si ella fuera una completa extraña para él, pero Jeremy no estaba conforme y se dijo en sus adentros:“Quizás ella sí se delate con la mirada.”Cuando iban a desayunar, fue a buscarla a la habitación.—Vamos a la mesa.—Voy en cinco monitos.—Te espero.—Mejor ve con los demás.—Quiero ir contigo.Bajó con Lauren, cuando iban llegando al comedor, la agarró de la mano.No te atrevas a rechazarme delante de todos. —Apretó con fuerza su mano justo cuando entraron al comedor, Alan y Lauren se quedaron viendo a los ojos por un par de segundos, después cada uno desvió sus ojos a otra parte, pero para Jeremy eso fue suficiente, la forma como Alan miró a Lauren aumentó aún más sus sospechas, ahora estaba seguro de que las palabras de Dayanna eran ciertas. Se comportó como un esposo amoroso y sacó la
En Chicago los Remington recibieron el aviso de que Jeremy llegaría ese día casi al anochecer, pero nadie tenía idea de que él venía de Italia y menos aún se imaginaban que llegaría con Lauren Y con su hija. Megan y Bridget estaban emocionadas y echaron a andar su plan de bienvenida en la mansión. Organizaron una cena para sus amistades. Antes de las cuatro de la tarde Bridget se fue al Salón de belleza, tenía apartada cita con el mejor estilista de la ciudad de Chicago.—Quiero verme deslumbrante para mi novio.—Te prometo que esta noche serás la estrella más brillante. ***Uno a uno los invitados fueron llegando a la mansión de la familia Remington. Megan había contratado a una orquesta de música clásica y Bridget al mejor negocio de eventos y agasajos de la ciudad. Eran como las siete de la noche cuando el avión aterrizó en Chicago. Jeremy tenía una leve sonrisa en el rostro imaginándose la reacción de Megan y el resto de su familia cuando vieran a Lauren y a su hija. Él sabía
Hans fue por Lauren. —El señor me ordenó que la lleve a su habitación señora. —No quiero estar en la habitación de Jeremy, con la misma que tenía antes es suficiente. —Pero... —Por favor, Hans, envía mis cosas a la otra habitación. Por Jeremy no te preocupes, yo hablo con él al respecto. —Está bien señora. Hans le abrió a Lauren la puerta de la misma habitación donde meses atrás ella había dormido. Esta vez Jeremy quería hacer vida marital con ella, pero Lauren no estaba dispuesta a dormir con él. Bridget se acercó a Jeremy y le puso la mano sobre el pecho. —Te he estado esperando todo este tiempo, esperé a que me llamaras por teléfono o que al menos me enviaras un recado; pero no tuve noticias tuyas en ningún momento. Después Megan me dijo que llegabas, pero ahora resulta que trajiste a esa mujer contigo. No logro entender qué está sucediendo, por más que le doy vueltas a mi cabeza. —Jeremy la miró a los ojos y se apartó de ella. Después le dijo: —No me divorciaré de Lauren.
Pasaron casi dos meses, Lauren le había pedido a Jeremy que contratara a Antonia para que ella fuera su mucama personal, pero Jeremy no lo aceptó, él estaba seguro que Lauren quería a la mujer cerca seguramente para que le hablara de Alan."No permitiré que mi mujer tenga una cómplice en mi propia casa."Jeremy necesitaba desahogar un poco las cosas que sabía, y le contó a Michael todo acerca de Lauren y Alan.—¡No creo que Alan se haya fijado en tu esposa!—Deseé con todas mis fuerzas que no fuera verdad, pero no puedo tapar el sol con un dedo.—¿Los confrontaste?—No, en cuanto confirmé lo que Dayanna me dijo me traje a Lauren a Estados Unidos, en esa situación no puedo alborotar el panal, eso les dará razones para quedarse juntos, prefiero callar y luchar por recuperar el amor de Lauren, sé que con cariño y paciencia la voy a recuperar.Michael le dijo:—Conozco una manera en que puedes convencer a Lauren de salvar el matrimonio.—¿Cómo?—Tengo entendido que es católica devota.—Si
Lauren estaba inquieta, no dejaba de pensar en el compromiso que Alan había adquirido con Paola. Sentía que odiaba a esa mujer, incluso la odió como nunca lo hizo con Bridget. Al otro día despertó con un firme propósito en mente: robarle el teléfono a Pollet y llamar a Alan. Esperó que todos fueran a la mesa a desayunar, incluyendo a Jeremith.Antonia estaba muy asustada. —¿Señora, si la descubren? —Eso no va a pasar. Quédate cuidando a la niña. Lauren abrió la puerta y se fijó que no hubiera nadie por los pasillos. Luego salió y se dirigió a la habitación de Pollet, entró en esta y cerró con cuidado la puerta, miró a todas partes. No podía creerlo, su plan parecía que se había desvanecido. Entonces improvisó y decidió robarle el celular a Megan, se dirigió a su habitación, pero la puerta estaba trancada con llave. —¡No puede ser! Susurró tras dar un suspiro de frustración, no tenía de otra que volver, pero entonces observó la puerta de la habitación de Jeremy. —Tendré que usar
Después que todo pasó entre ellos, se pusieron de nuevo la ropa. Jeremy estaba muy callado, Cuando ya estaba vestida y arreglada parecía que nada hubiera pasado en esa oficina. Ella se acercó a él y sonrió. —¿por qué estás tan serio? —Por nada, sabes que soy así. —No cuando acabamos de hacerlo de forma tan apasionada. —Él no le respondió nada—. No me imagino haciéndolo con otro. —Se recostó en su pecho, Jeremy le dijo: —Esto que acaba de suceder entre nosotros no significa que voy a dejar a mi esposa. —Ella sintió rabia. —¿Ahora llamas esposa a esa mujerzuela que n o te ama? —No deseo caer en contienda contigo. —Por supuesto que no, sabes que yo siempre estaré para ti. En cambio Lauren no desea corresponderte, Megan te escucho celándola con otro, ella tiene un amante.—Lauren no tiene ningún amante.—Megan te escuchó reprochándole.—Creo que tendré que irme de la mansión para que Megan deje de meterse en mi vida.—Ella solo desea ayudarnos.—No quería llegar a esto contigo, ten