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Híbridos
Llego hasta los calabozos casi había olvidado lo mal que me hace estar aquí, pero tengo que ser fuerte si me asusto o dudo que clase de Alfa sería, pues una no muy buena. Al menos no tengo que descender niveles para llegar hasta el lugar donde tienen al vampiro, En la primera planta puede entrar luz natural, igual por eso lo tienen aquí. Escucho gritos de dolor, me dirijo hasta el lugar de donde provienen. Me quedo parada observando como uno de los hombres de Adam corre y descorre una cortina. Cada vez que lo hace la piel del vampiro comienza a arder. Así que si antes el hedor de este sitio ya era malo ahora le sumamos el olor a carne quemada. Adam se voltea y me guiña un ojo, yo por mi parte le devuelvo una sonrisa. Si tan solo supiera que no disfruto con esto ni una sola pizca... Después de unos minutos más de sufrimiento el vampiro comienza a colaborar. Primero dice que alguien les pagó una suma muy importante para que se llevarán a los niños. Nos cuenta que les dieron
Entre el placer y el dolor
No sé si llamar normalidad a esto porque aquí cada día es algo nuevo y por desgracia pocas veces es bueno. Me levanto temprano y miro hacia el lugar que ocupa Adam en la cama, no ha debido de dormir aquí porque las sábanas no están arrugadas por lo que doy por hecho que ha estado toda la noche liado con lo de la búsqueda de esa mal nacida. No sé perdonará nunca todo el daño que esa loca nos ha hecho. Bajo hasta la cocina y comienzo a preparar café, las chicas acaban de llegar y me piden por favor que las dejé a ellas. Pero por qué prepare yo el café hoy no va a pasar nada. Una vez lo tengo listo cojo una taza bien cargada y se la subo al despacho. Abro la puerta y veo que está dormido sobre una pila de papeles, no puedo evitar fijarme en lo atractivo que está con esa barba incipiente. --- Puedo oler tu excitación, si no dejas de mirarme así atente a las consecuencias--- De momento a otro el rubor cubre mi rostro, saco esos pensamientos de mi mente y me hago la dura. --- Te
Nos vamos de caza
Llevaba tiempo pensando en hacer eso, pero no sabía si Emily estaba preparada para tener sexo anal. Para mí suerte ella estaba tan excitada y predispuesta que hoy no podía dejarlo pasar. Me sentía pleno, y sabía que ella lo había disfrutado tanto como yo. Sus jadeos todavía resonaban en mi mente. Pero ahora mismo tenía que centrarme en mi objetivo y que nada ni nadie me pudiese distraer. Tenía que dar caza a esa loba y hacerle pagar con sangre todo el mal que había causado. No tenía muchas pistas Pero si las suficientes para creer a ciencia cierta dónde se escondía esa mal nacida. Maldecia el día en el que me había dejado embaucar y meter en su cama. No podía negar que en su momento lo pasamos bien, pero ella se había atribuido privilegios que no le correspondían. Fui claro con ella, y aunque accedí a hacer un pacto. Yo había encontrado a mi compañera y de no haberlo hecho tampoco habría terminado con ella. Ella había cambiado demasiado, poco o nada quedaba de aquella n
Castigo
Cogí todas sus maletas y nos dirigimos a dónde mis hombres nos estaban esperando. Ella preguntó curiosa porque había traído a lod guardias conmigo. Y le respondí lo primero que se me ocurrió, ellos habían venido para protegerla en caso de ataque. De nuevo la muy ilusa creyó todas y cada una de mis palabras. Austin me miraba confundido. A través de mi enlace le dije que me siguiera la corriente que había pensado en algo. Total de que servía acabar con su vida si estaba totalmente desquiciada, prefería que pasase el resto de su vida confundida y llena de dolor. De un dolor que ella misma había causado y del que se sentía orgullosa. Al menos ya no tendría que lidiar con unos padres afligidos ya que sus padres murieron cuando ella era aún muy joven. Poco nada quedaba de aquella chica a la que habíamos rescatado de aquellos chicos malos, dónde quedó su dulzura y su inocencia. Se había vuelto cruel, orgullosa y prepotente y para qué? Para nada, no había conseguido el poder qu
La traición en la Manada
La Traición en la Manada, así había titulado el nombre de su dosier. Un dossier que contenía toda la información que había ido recabando. Adam, el Alfa de la Manada de lobos más grande de Norte América, aquél que había sido nombrado como el más sanguinario y cruel, ese mismo caminaba con determinación por el bosque en forma de lobo. Su pelaje negro brillaba bajo la luz de la luna llena, y sus ojos destellaban con una mezcla de furia y decepción. "Había llegado a sus oídos que Violet, una loba de la manada, su antigua amante y amiga, estaba involucrada en oscuros planes que amenazaban la paz del territorio. Sin embargo, lo que más le preocupaba era descubrir quiénes eran sus cómplices." Ese recuerdo lo atormentaba en particular, hacía ya dos noches que Violet se encontraba en los calabozos, aunque ella negaba una y otra vez las acusaciones él ya sabía que mentía. Gracias a Emily se había podido dar cuenta de sus manipulaciones. Agradeció el momento en el que Emily le abrió los
Por siempre jamás
Unos meses después...El Consejo de Bestias no es como había imaginado. Es totalmente diferente, no solo hay hombres lobo, también hay vampiros, elfos, duendes y un sinfín de criaturas extrañas por llamarlas de algún modo. El que lo lidera se llama Uzziel pero todos le llaman el Alfa de los ojos tristes. La abuela me ha dicho que debe de tener cerca de mil años, eso me parece asombroso. Sé que nosotros vivimos más que la media de un ser humano pero tantos años como él me parece casi imposible. Me siento curiosa y debo o quiero investigar un poco más sobre este hombre de mirada triste. Llega el momento de mi exposición. La verdad es que yo no debo de hacer mucho, con los papeles que han presentado y con mi mera presencia es suficiente. Pero eso no significa que no esté nerviosa.La abuela y Adam dan todas las explicaciones pertinentes y yo soy colocada en el centro de la sala donde todos me observan. Me resulta extraño que todos me miren y que nadie me haga una sola pregunta, aunqu
Epílogo
Cinco años después... Siento que voy a explotar, como no lo ví venir, está vez debí de estar preparada. Embaraza otra vez y con este embarazo ya son cinco, uno por cada periodo de celo. Pero esto se acaba hoy y aquí. Llamo a Adam, necesito hablar con el antes de que vengan todos los invitados a la fiesta de cumpleaños de Mía. --- Adam siéntate, y no me interrumpas --- El sonríe y se sienta como le he pedido. --- No voy a tener más hijos, este va a ser el último...--- Escucho como se ríe y le pongo mala cara, de inmediato deja de reir. --- Nathan me ha dicho que hay una operación en la que te cortan un cablecito por llamarlo de alguna manera y con eso ya no hay más bebés.. --- --- De verdad quieres pasar por una operación? Tampoco es tan malo tener la casa llena de niños --- --- No, si yo no soy la que se va a operar, eres tú! --- --- Qué! Ni lo sueñes a mi nadie me va a tocar ahí abajo y menos van a cortar nada --- responde visiblemente alterado. --- Está bien, pues Nathan
Especial I : Limbo
No sé el tiempo que llevo aquí, primero la oscuridad, después la luz y más tarde la unión de mi loba blanca a mi propio ser. Pero si ya lo he hecho todo bien porque sigo aquí, porque no soy capaz de avanzar, porque no obtengo una señal. Los minutos, las horas y quizás los días pasan aquí... Cierro los ojos y al abrirlos de nuevo me encuentro en un lugar diferente. Estoy en un prado, a mi espalda se puede ver un gran bosque. Un gran lago de aguas transparentes se representa ante mis ojos. Me acerco de manera cautelosa, me agacho e introduzco un poco mi mano. El agua es cálida al igual que la temperatura aquí. Una sensación de paz me embarga, me siento junto a la orilla y miro mis pies descalzos, pienso en si debo introducirlos en el agua o quedarme tal cual estoy. No tengo tiempo para decidirme ya que una voz muy dulce habla a mi espalda. Me volteo y veo a la pareja de mis imágenes, creo que son mis padres. Me levanto del suelo y me quedo parada observándolos, en sile