Amarok por primera vez en mucho tiempo sintió aquella extraña sensación que lo recorrió al ver la hermosa sonrisa de la cachorra.Sabía que no era dirigida especialmente para él, sin embargo, si fue él quien la causó por darle lo que quería.Era obvio que Devanie era mimada, por eso era feliz cuando se salía con la suya.Él no podía seguir permitiendo que ella no comiera casi nada.—Iremos a verlo, pero primero te acabarás la comida de ese plato.Devanie abrió la boca para protestar pero pronto supo que no ganaría nada con eso.Sintió la mirada del Alfa sobre ella poniéndola incómoda mientras ella devoraba la comida.*Podía sentir la cercanía del macho incluso aunque estaba a unos pasos de distancia de ella.El calor que irradiaba su cuerpo era curioso.Seguía llevando capuchas como si quiesiera ocultar su rostro religiosamente y no.entendía porqué.Ella estaba segura de que la mayoría de las personas ahí lo habían visto demasiadas veces como para que pudiera intimidarlos por su aspe
Alison se deslizó por los pasillos con cuidado.Se había adaptado muy bien porque junto a su padre era una Nómada.Pero lo que escuchó aquella mañana la desconcertó por completo.—¿Qué hace ese cachorro aquí?Puede que él fuera un híbrido pero ella sabía que no pertenecía a ese lugar y no era justo que lo obligaran a estar ahí.Estaba curiosa y averiguó en qué habitación tenían a Kieran. Entonces esperó al cambio de guardia y abrió la puerta.La habitación estaba sumida en la oscuridad absoluta, sin embargo, la loba siente cuando esta cerca de ella.Antes de que pueda huir o gritar, Kieran la aplasta contra la puerta ocasionando que Alison se estremezca.Su pecho está contra la fría pared mientras que siente el pecho cálido del cachorro contra su espalda.Estaba a punto de gritar pero su palma grande se cierra contra su boca provocando un sonido ahogado.Él se inclina sobre ella murmurando en su oído:—Bueno, ¿Viniste a visitarme?—Mm...Alison se movió queriendo liberarse de su agarr
El frío golpeaba la piel de cada uno de sus hombres.Habían logrado colarse en el Bosque oscuro a pesar de los peligros que rodeaban a este, sin embargo, no les importó. Tres días habían transcurrido pero aún no habían llegado al centro de la manada.A duras penas habían descansado un poco mientras hacían guardias y se adentraban más.Al parece el Alfa del Bosque oscuro confiaba plenamente en que nadie penetrara sus tierras porque había sido sospechosamente fácil llegar a donde estaban. A penas se había topado con uno que otro híbrido que había caído muerto enseguida por sus manos.—Duérmete, hembra —gruñó Kian al ver a la loba moverse entre las sábanas que había traído—. Te dije que no deberías venir aquí.Él estaba sentado a su lado vigilándolo todo y de reojo vio como ella se incorporaba otra vez.Siempre parecía tan enérgica que lo irritaba.—¿Y perderme de toda la acción? Eso sería muy aburrido.Kian frunció el ceño mirándola y ella le sonrió.—Eres extraña.—Eso me hace especia
Kathryn vio al macho acercarse colocándose detrás de ella.Desde que estaba ahí, todos los días pedía distintos tipos de té con la mentira de que necesitaba calmar su ansiedad y afortunadamente siempre le daban lo que quería sin saber que ella estaba mezclando los ingredientes exactamente para obtener lo que quería.Despertar a su loba interior incluso aunque aún le faltaran años para que pudiera transformarse.Quería ser fuerte para poder escapar de aquel lugar. Antes había escuchado a su padre decir que su hermana Asling había hecho lo mismo para activar su poder de loba y aunque entendía los riesgos, también sabía que si no lo hacía, probablemente nadie la sacaría de ese lugar.—Vamos Kat. Toda tu vida has estado encerrada, no va a volver a pasar. No puedes permitirlo.Ella respiró profundamente antes de dejar salir el aire de sus pulmones.Tomó el último té de golpe y dejó la taza a un lado sentándose frente al espejo para cepillar su cabello rubio.Tenía que actuar como si nada
Urian sabía perfectamente que ella estaba planeando algo. No era un idiota pero se sentía seducido de la maneras profunda e intensa por esa hembra sobre él.Todo de ella le gustaba.Su aroma.Su belleza.Su atrevimiento. Podía verse como una dulce princesa pero tenía garras, no le daba miedo enfrentarlo y esa era una de las cosas que más le atraía de ella.—No sabes lo que estás pidiendo, hermosa.Kathryn luchó para no sorprenderse por su apodo cariñoso pero no lo logró, aquella palabra había calado en lo más profundo de ella.Le había gustado.—Se exactamente lo que quiero.La rubia sacó su lengua arrastrándola por su labio inferior ocasionando que el macho gimiera de placer y tomara su boca en un beso salvaje que la tomó por sorpresa pero al que ella también correspondió.La lujuria animal la tomó por sorpresa pero se dijo a sí misma que debía tratarse de aquel lugar primitivo que la estaba influyendo.Había descubierto que poseía un poder parecido al de su hermana.Con un toque pod
Zakia se despertó con una sonrisa en el rostro.Jamás se había sentido tan feliz, pero sabía a qué se debía.Desde que Alessandro la había llevado a su manada la había hecho suya, incluso aunque ambos no habían completado el vínculo, la marca de compañeros había aparecido en su piel.Entonces él solo se había dedicado a mimarla como jamás había esperado.El recuerdo de la noche pasada provocó un inminente sonrojo en su rostro."Los labios posesivos de Alessandro sobre su clítoris la volvieron completamente loca, necesitando mucho más de él.—Por favor, Alessandro. Te necesito.El macho gruñó masculinamente sin dejar de lamerla mientras alzaba su mirada hasta sus ojos. En ellos brillaba la posesividad bestial que lo consumía. Esa noche la había tomado como nunca antes, su cuerpo lo recibió acomplándose a un nivel fantástico. Era como si su vínculo estuviera completado pero ninguno de los dos había dicho las palabras, lo que era más absurdo.—Eres mía, Zakia.—Para siempre —susurró el
Kieran había luchado en distintas batallas pero no estaba acostumbrado a matar.Era joven, aunque ya no se consideraba un cachorro pero ahora tendría que matar para sobrevivir y eso fue exactamente lo que hizo.Escuchó los gritos eufóricos de la gente concentrados en un solo lugar, enseguida se deslizó con facilidad. Pero cuando aparecían otros machos terminaba matándolos para llegar a su objetivo. Podía sentir a su melliza cerca y enaeguida esperó a no ver a nadie antes de entrar a la habitación donde estaba Devanie.Su hermana estaba dormida en la cama pero pareció sentir su cercanía porque enseguida sus ojos se abrieron y al verlo en la puerta sus ojos se abrieron llenos de sorpresa.Kieran llevó un dedo a sus labios indicándole silencio y Deva se levantó de la cama de golpe.El cachorro se quedó en la puerta vigilando y solo cuando su hermana tomó su brazo.Él comenzó a guiarla con sígilo.—Tenemos que mantenernos silenciosos. Un error y estamos jodidos. ¿Estás bien? —la miró co
Cuando Amarok entró a su habitación esperaba ver a la cachorra en esta.Incluso aunque lo ignorara su presencia lo reconfortaba como nunca nada lo había hecho.Sin embargo, al notar la falta de su aroma embriagador se detuvo en seco.Su mandíbula se apretó y trató de no gruñir.Entró a la habitación recorriendo cada parte de esta con la mirada, sus ojos estaban adaptados a la oscuridad, inhaló profundo pero no había ni un atisbo de su olor en el lugar.—¡Maldita sea!Pateó la cama con su bota y esta se movió pero ella tampoco estaba debajo de la cama.Entró hecho una furia al baño y tampoco la encontró.—¿Amarok? Mi amor, ¿Qué...?El Alfa rugió ignorando a su madre mientras salía de la habitación.—Amarok...—¡Quiero que todos cierren las malditas puertas de la casa de la manada! ¡Nadie sale ni entra hasta que encuentren a mi compañera! Los ojos de todos se abrieron abruptamente horrorizados al ver la expresión bestial del Alfa del Bosque oscuro.Él era temible, pero nunca nadie lo ha