Arley había sido dado de alta finalmente. Estaba seguro de que el trabajo se le había acumulado es estos dos días que estuvo en el hospital.
—Hermano, iremos directo a casa...—Claro que no, debo ir a mí oficina, debo organizarme con todo el trabajo que tengo acumulado.—El doctor dijo que descansaras.—Olvídalo— le dijo mientras tomaba sus cosas.—¿Qué dijiste?— preguntó furiosa— Arley sonrió.—Iré a casa a descansar.—Más te vale.— La castaña sacó su teléfono para revisar algunos mensajes y al leerlos hizo una mueca.—¿Algún problema?—Debo regresar a New York. Hay problemas con alguna pistas de mi nuevo álbum. Me temo que te dejaré sólo hermano.—Descuida. Es trabajo, ve.—Me adelantaré pero no*Se abre el telón.*Taylor: Muy buenos días, tardes o noches a todo el público de La chica que veía fantasmas. El día de hoy tenemos a seis invitados especiales para responder algunas preguntas de los fans. ¡Adelante!*Aplausos del público mientras los chicos entran*Taylor: Es un gran honor tenerlos aquí muchachos. (Todos sonríen.)Arley: Para nosotros también es un honor. Aunque es extraño que tú seas el entrevistador Taylor.Jaden le aprieta la mano a Arley.Jaden: déjaloEl público ríe.Taylor: Bien, el día de hoy tengo algunas preguntas para cada uno de ustedes. Entonces, aquí vamos. Está pregunta fue realizada por y dice así, Jaden ¿Cuál es el fantasma más aterrador que has visto?Jaden lo piensa un poco.Jaden: Umm en definitiva el primer fantasma que ví. No ten&i
—¿Qué estás haciendo aquí?— preguntó el joven mientras Jaden respiraba agitadamente. La joven observó la enorme calle y el gigantesco edificio detrás de Arley pronto supo que estaba frente al hotel The Davis.¿Por qué rayos el anciano la había atraído hasta acá?—Pues yo...—¡Jaden!— una tercera voz se escuchó detrás de ambos interrumpiendolos. Jaden abrió los ojos de par en par al ver a Luke transpirando y jadeando.—¿Luke? ¿Qué haces aquí?—Te seguí. Lo siento pero estaba preocupado— habló entrecortado. Arley veía la escena con una ceja levantada un poco irritado. y Luke lo veía de la misma forma. Después de todo ninguno de ellos se agradaba.—Creí que te sentías mal ¿Qué haces aquí?— Jaden se
Jaden estaba sentada en la cama pensando en alguna respuesta para lo que acababa de descubrir y el anciano aún no le daba ninguna explicación.—¿Sigue sin decirte nada?—Los fantasmas normalmente sólo dicen lo que quieren que se escuche.— Arley suspiró y se sentó a su lado.—No entiendo. ¿Por qué está aquí pintado el edificio dónde mi hermano murió? ¿Acaso Carlos conocía ese edificio de alguna manera?—Posiblemente.— La cabeza de Jaden daba vueltas y más vueltas. Volvió a acercarse a los cuadros para revisarlos detenidamente, además se dio cuenta que la pestilencia de hace un rato había desaparecido. Posiblemente Carlos había producido ese olor para que ellos captarán la pista.La joven se acomodó en el suelo y tomó una de las pinturas. Era la pintura dónde e
Jaden trajo latas de gaseosa, una pizza y alas de pollo a la cama dejando anonadado a Arley.Ella lo había convencido de pedir la comida con la excusa de que estaba cansada del paladar sofisticado del joven. Arley sintió la necesidad de protestar ante tal excusa pero lo dejó pasar sólo por esta vez.Jaden se sentó en la cama y abrió una lata de soda y se la ofreció, él la tomó un poco desconfiado.—Es sólo agua carbonatada. No le pasará nada.—Bien, aquí voy— Arley le dió un sorbo y sintió un cosquilleo en la lengua una vez que el sabor artificial de limón llegó a su boca .—¿Y qué opina?—Está deliciosa— Arley tomó un trozo de pizza y abrió los ojos maravillado mientras Jaden reía.—No puedo creer que nunca haya comido esto.— Se&nt
Jaden se encontraba sentada en la acera observando a la policía ir y venir desde la casa de Brighton hasta la calle.Ella y Arley estaban confundidos por todo lo que habían visto y leído.Jaden logró tomar fotos de todo incluso de la carta antes de llamar a la policía, era obvio que no podían llevarse la evidencia. Además, dejó la carta sobre el escritorio ya que habían cometido el error de tocarla sin guantes o algo dejando sus huellas en ella. Por lo que si los interrogaban podían decir que vieron la carta en el escritorio y la leyeron, así de simple.Los minutos pasaron y Arley finalmente se sentó a su lado en la acera.—¿Qué dijo la policía?—Preguntaron cómo habíamos entrado a la casa. Les dije que necesitábamos una pintura ya que mi madrina recomendó al artista y qué al llegar la puerta estaba abierta.
Arley observó detenidamente el salón de bodas. Estaba impecable tal y como lo necesitaba.Las mesas se encontraban en su sitio con los manteles indicados y la decoración lista.—Señor, las flores que la novia sugirió fueron ordenadas.—Perfecto— sonrió Arley.—Señor, también recibí una llamada de su madre— la sonrisa de Arley se borró de su rostro —ella ya está en Londres— el castaño asintió y le ofreció una pequeña sonrisa a su secretario.El hombre sabía lo que la presencia de su madre causaba en el joven, ella había huido hace diez años dejándolo sólo aunque no la culpaba, la muerte de su esposo y su hijo era algo difícil de llevar.—Supongo que de eso se encargará Christine— habló regresando su atención al salón.&mdash
Arley Davis por primera vez se sentía nervioso. No estaba preparado para ver a su madre y mucho menos hablarle. Pero a pesar de eso sus pies se movían hacia ella.Su pecho se sentía cada vez más hondo por las respiraciones tan fuertes que daba y en un abrir y cerrar de ojos estaba frente a ella.—Mamá— susurró mientras apretaba sus manos. Su hermana sonrió ampliamente y aquella bella mujer que llevaba años sin ver se giró a verlo. Las lágrimas se arrastraron por sus mejillas y ambos rieron para darse un fuerte abrazo.El aroma de rosas que siempre emanaba su madre, en ese momento lo hizo recordar su infancia y la tragedia de su familia, una especie de sentimiento nostálgico los cubrió a ambos.—Me alegra verte cariño— Arley limpio el rostro de su madre y le dió un beso en su suave mejilla.—A mí igual mamá—
Jaden sentía que su cabeza retumbaba. Por alguna razón le costaba abrir los ojos, sus párpados se sentiany pesados y un dolor punzante por todo el cuerpo la hacía quejarse del dolor.Se movió lentamente y tuvo la sensación más horrible del mundo al hacerlo. Su cuerpo quemaba y eso sólo podía significar un cosa. Había sido poseída por un espíritu vengativo.Respiró hondo y pronto comenzó a escuchar un pitido constante.Al fin abrió los ojos pero tuvo que cerrarlos de nuevo al ver que la luz le molestaba y con ayuda de su mano, la levantó por encima de sus ojos para tapar un poco sus ojos mientras se acostumbraban a la luz.Con dificultad giró su cabeza y se sorprendió al ver a Arley sentado de brazos cruzados con los ojos cerrados.Comenzó a moverse para poder sentarse y poco a poco se dió en cuenta de d&oacut