Había pasado casi una semana desde el accidente de Cameron y todo parecía comenzar a fluir bastante bien. Gracias a los medicamentos es que él logró salir del hospital fácilmente pero su cuerpo seguía bastante dañado y tenía que usar una silla de ruedas para poder moverse ya que caminar no era una opción . El doctor había mencionado que era probable que sus piernas tardaran uno o dos meses a curarse por completo, todo dependería de cómo sus heridas fueran desarrollándose. Lamentablemente Cameron había perdido la oportunidad de asistir a la segunda entrevista y ni siquiera tenía la manera de poderse comunicar con los directivos del equipo ya que habían regresado a su ciudad. Todos podían notar como Cameron día con día parecía estar un poco mejor aunque a veces volvía caer en crisis emocionales que terminaban cayendo sobre Kiara aunque a ella no le importaba en lo absoluto tener que soportar las crisis nerviosas que Cameron ocultaba con furia. Ella lo entendía completamente ya q
Camarón se había percatado que ella se encontraba bastante rara desde que la noche anterior habían tenido esa extraña pelea sobre lo que él realmente deseaba hacer. Estaba un poco confundido pero no tenía intención alguna de preguntarle qué era lo que sucedía. Aún seguían teniendo una extraña relación en la cual él seguía alejándose de ella. No podía evitarlo, cada vez que pensaba en entregarle un poco de confianza se terminaba acordando de lo que había sucedido hace meses y terminaba alejándose de nuevo. Estaba un poco cansado de la situación pero simplemente no sabía qué hacer con sus sentimientos cobardes. Esta mañana se sentía un completo idiota, especialmente porque había aceptado ir a desayunar con sus padres, incluso después de haberse separado por completo de ellos. En esos momentos lo único que los unía era el apellido y la sangre que corría por sus venas porque en lo sentimental y en lo social se habían separado completamente. Kiara se había percatado que Camerún se había
Kiara se encontraba completamente cansada. Podía sentir de qué manera la espalda le palpitaba por culpa de los incómodos asientos del autobús completamente barato que había tomado para poder llegar a la ciudad en la cual se encontraba el edificio del equipo de fútbol. Entre más pasa el tiempo más se percataba de lo nerviosa que comenzaba ponerse, quería hacerlo completamente bien para poder conseguir que los directivos no te estuvieran para nada la hora de entregarle unos una segunda oportunidad a Cameron.Desde que había salido de casa se había preguntado si realmente iba poder conseguir cumplir los sueños de Cameron, estaba completamente decidida a hacerlo, a conseguirlo. Incluso si eso significaba que ella tendría queque hacer hasta lo imposible para conseguirlo.Necesitaba ver que el sonriera. Totalmente odiaba tener que ver como el mantenía todo el día el ceño completamente fruncido, con el rostro completamente inexpresivo mientras que su mirada permanec
Desde que Cameron había comenzado a tener un poco de mejorar en su cuerpo, el doctor se había decidido en hacerle una prueba a Cameron cada tres días para comprobar que él estaba mejorando de manera adecuada y que no había ningún problema en su proceso de sanación.En estos momentos el doctor se encontraba frente a ellos, analizando las radiografías que le acababan de hacer a Cameron. Kiara se encontraba sentada al lado de Cameron, mientras que James y Nick se encontraban a sus espaldas. Recargados en la pared mientras analizaban todo lo que estaba sucediendo en aquella habitación. El doctor hizo una pequeña mueca mientras observaba la radiografía de Cameron, soltó un pequeño suspiro antes de sentarse sobre su asiento y asentir con suavidad. Kiara se mantuvo en silencio mientras observaba el rostro de aquel hombre de bata blanca que evaluaba la condición médica de Cameron.—Bien, creo que es el momento adecuado para que Cameron comience sus rehabilitaciones así que si es
Nancy se llevó ambas manos hacia la cabeza cuando ya estuvo a punto de explotar de frustración. Kiara simplemente soltó una pequeña risita antes de voltear a ver a Cameron que al igual que Nancy tenía la misma cara de frustración.—Chicos no tenemos porque estresarnos por esto, simplemente pensemos que nos vamos a divertir y pongámonos de acuerdo para comprar las cosas que realmente necesitamos.—¿Porque no simplemente compramos ambas cosas y ya nos largamos esta maldita tienda? —preguntóCameron al mismo tiempo que caminaba por el pasillo con ayuda de sus muletas.Llevaba más de una hora en aquella tienda, escogiendo las cosas que comprarían para comer en su pequeña escapada de fin de semana hacia las cabañas. Kiara se había mantenido en completo silencio durante todo el tiempo que habían estado en esa tienda, únicamente se había concentrado en observar como entre ellos peleaban por los productos que no querían comprar y por los productos que querían comprar.
Cameron se encontraba sentado frente a la fogata, observando como a las llamas se movían de un lado a otro con lentitud, siguiendo una leve danza que el aire le imponía. Con sus brazos rodeaba el delgado cuerpo de Kiara mientras que ella suavemente se limpiaba las lágrimas y continuaban saliendo de sus ojos. Habían pasado tres horas desde la noticia y ella seguía llorando por la simple razón que no podía creer que finalmente su madre había podido obtener lo que tanto deseaba. Kiara había intentado dejar de llorar desde hace probablemente dos horas pero no lo había logrado y simplemente había conseguido seguir llorando en completo silencio.Extrañamente para los chicos no le incomodaba verla llorar ya que sabían que aquel llanto de Kiara no era más que un llanto de felicidad. Todos estaban completamente conscientes que Kiara había tenido que pasar por un infierno para poder hacer que sus hermanos continuarán viviendo de una manera adecuada y a la vez luchando para pagar los cos
Detestaba tener que volver a estar en aquel hospital, incluso si la situación era un poco diferente esta vez, seguía sintiendo que aquel lugar era completamente horroroso. No podía dejar de pensar en todas las veces que sufrió y escuchó a su madre sollozar de dolor mientras que los doctores se practicaban las quimioterapias. Tenía que admitir que se sentía completamente sola en aquel pasillo del hospital, había pasado un día desde que había llegado y no había tenido la oportunidad de comunicarse con Cameron o con alguno de los chicos pero estaba completamente segura que ellos se estaban divirtiendo. Había podido ver alguna de las fotografías que Wendy le había mandado por mensaje de texto y se había sorprendido por completo al ver que en algunas de las fotografías él salía sonriendo. Le encanta pensar que sus amigos se encontraban al menos divirtiéndose en las cabañas, la hacía sentir que había tomado una decisión correcta, incluso si se encontraba sola en aquel lugar se había
5 MESES DESPUÉS Los meses habían pasado volando al igual que las terapias de Cameron y finalmente había logrado conseguir que sus piernas estuvieran totalmente sanas. Desde muy temprano Cameron había despertado con el estómago totalmente revuelto por culpa de los nervios. Ese día tendría su prueba para ver si finalmente podría entrar al equipo de fútbol, estaba completamente consciente que si no logra va a pasar esa prueba finalmente sus sueños se había terminado. No podía dejar de pensar en qué es lo que tendría que hacer en aquella prueba, se preguntaba una y otra vez si realmente estaba listo para llevar a cabo tal asaña.Kiara al igual que él se encontraba completamente nerviosa pero trataba de ocultarlo por completo para evitar ponerlo incluso aún más nervioso, se había enterado que la segunda prueba sería transmitido por televisión por lo cual podría ver a Cameron a través del televisor. Durante toda la mañana Cameron había estado corriendo
Kiara se encontraba caminando de un lado a otro mientras preparaba todo lo lo necesario para envolver los regalos de navidad. La sala se encontraba hecha un desastre por culpa de todos los regalos que tenían que envolver, habían perdido el tiempo en hacer otras cosas y en concentrarse en la práctica de Cameron que ni siquiera se habían acordado que tenía que envolver los regalos. Ambos sentían que entre más veían aquella pila de regalos, más se multiplicaban y es que con sinceridad se habían vuelto locos comprando regalos. En esos momentos se odiaban a sí mismos por tener que envolver cada uno de esos regalos.—Te dije que no debíamos dejar todo para hoy—soltó Cameron. Observando la sala llena de regalos sin envolver.—repíteme por qué dejamos todo para el día de hoy.—Estábamos completamente concentrados en que todo saliera bien para tu prueba que lo único que hicimos fue comprar los regalos y botarlos en una habitación.—Tienes razón, asegurémonos que para e