Capítulo 10— Simples floresNarradorSaliendo de la oficina de Killian, sintiendo su corazón palpitar sin control alguno, Eirá pretendía recuperar sus tulipanes. Tulipanes que para algunos eran flores insignificantes, pero para ella eran especiales. No por venir de Iker Vael, o algo parecido, sino por el gesto tras sentirse rechazada por un largo tiempo.Llegando al escritorio de la asistente de Killian, Eira barrió el lugar con la mirada, y al notar que ella no estaba, recorrió parte del lugar buscando a la chica.—¿Dónde se habrá metido, Estella?Dando un par de pasos, Drayton vio a lo lejos a la mujer que venía de regreso tras cumplir una orden de su jefe, y acercándose a ella, preguntó sin rodeos.—¿Mis flores? Estuve en tu escritorio y no las vi, ¿Me las podrías entregar?Abriendo su boca ligeramente cuando Eira vino en busca de algo que ya no existía, de algo de lo que ella ya se habia desasido, la asistente trató de buscar una explicación, y bajando su mirada al suelo, la chica
Capítulo 11— Ya has decididoNarradorCon la boca ligeramente abierta y sus ojos empezando a cristalizarse por la sorpresa de ver a su vieja amiga regresar, Eirá olvidó por completo lo sucedido segundos atrás con Killian. Llevando ambas manos a su boca, Drayton empezó a caminar hacia su encuentro y, abrazándose apenas se encontraron, tanto Rachel como Eirá dejaron un par de lágrimas salir.—¿Cuándo llegaste? ¿Por qué no me avisaste? Yo podía haber ido por ti.Separándose por un breve instante, ambas amigas, alejadas por años por cuestiones laborales, se observaron mientras limpiaban las lágrimas derramadas y, negando aun sin decir palabra alguna, Rachel respondió—Quería darte una sorpresa, pero veo que la sorprendida soy yo... Déjame adivinar, ¿estás peleando con la basura de Alde de nuevo?Empezando a reír al recordar que Rachel no toleraba siquiera un poco a Killian, Eirá estaba feliz de volver a verla y, tomándola de su mano, le pidió ir a su oficina. Por cuestiones de trabajo, Rac
Capítulo 12— Un hechoNarradorAun furiosa por lo sucedido con Alde, y lo que hizo con sus tulipanes, al llegar a la empresa la mañana siguiente, Eira convocó a una junta de accionistas con suma urgencia, puntos a tratar: la conferencia de Moscú. Caminando por los amplios pasillos del piso superior del edificio, Drayton se dirigía a la sala, junto a su asistente quien le mostraba un par de balances antes de ingresar, y deteniendo su andar de pronto, pidió antes de seguir.— Necesito que por favor le notifiques al señor Alde que estamos por iniciar.Sabiendo que este no estaría muy dispuesto a asistir a la reunión por el motivo de la misma, Eira le encomendó la difícil tarea a su asistente, quien asintió algo temerosa de poder lograrlo, y girándose sobre sus talones, la pobre mujer se dispuso a cumplir tal proeza.Liberando un poco de aire antes de seguir, Drayton elevó su mano despacio para abrir la puerta, e ingresando a la sala, la mirada de los caballeros presentes se centró en ell
Capítulo 13— Solo llamaNarradorLlegando al fin el tan esperado día del viaje, Eirá se preparaba para ir junto a Iker, un poco ansiosa. Por más veces que se hubiese presentado en conferencias anteriores, esta era la primera a nivel internacional ante personas tan importantes y conocedoras de la materia, por lo que era normal sentirse de esa manera.Finalizando un par de minutos después, un auto pasó por ella para recogerla y llevándola al aeropuerto al avión privado de los Vael. Fue el mismo Iker quien la recibió antes de abordar.—Eirá... qué bueno verte. ¿Preparada?Tomando su mano y depositando un casto beso en el dorso de esta, Vael preguntó con una media sonrisa, y asintiendo, muerta de miedo, la invitó a subir. Por más trabas que se colocaron en el camino, nada de esto los detuvo, y despegando hacia la ciudad en donde se realizaría el evento, esperaban que todo saliera mejor de lo planeado.Una de estas trabas fue el mismo Killian Alde, quien, tras finalizar la junta, trató de d
Capítulo 14 – Destinos separados Narrador A la mañana siguiente, cuando el día apenas iniciaba, Eirá abrió sus ojos. La ansiedad por la noche que se avecinaba no le permitía seguir descansando, por lo que enseguida se colocó de pie para arreglarse. Deseaba salir a conocer un poco el lugar, disfrutar, pero recordando que tenía que enviar un par de correos antes de salir, fue por su equipaje. Necesitaba enviar un informe detallado a la empresa sobre el evento, sobre lo ocurrido, solo para evitar el sermón de Killian al regresar, y revisando su cartera en busca de su teléfono de trabajo, encontró sus píldoras anticonceptivas. Con cautela las sacó del interior, y observándolas, recordó que hacía días que no las tomaba. Por supuesto ya no había necesidad de hacerlo, desde hacía tiempo no tenía intimidad con Alde, y Iker... con él apenas deseaba empezar, por lo que no quería apresurar todo solo por mera desesperación. Deseaba hacer las cosas en orden, sin forzar nada, por lo que deci
Capítulo 15— Una mujer para toda la vidaNarradorLlegando la tercera noche, Eirá se preparaba. La anterior, tras lo sucedido con Killian, logró alcanzar a Felton y, tras ofrecerle una sincera disculpa, las relaciones quedaron restablecidas, aun así no podría darse por vencida.Había mucho que podría hacer en ese lugar donde se reunían los mejores empresarios del mundo, por lo que solo regresar con un huevo en la canasta no era lo más recomendable. Arreglando su cabello, que esa noche llevaría suelto, Eirá observó su atuendo quedando conforme con cómo lucía y, saliendo de la habitación, Iker la esperaba como ya era costumbre con una amplia sonrisa.—¿Preparada? Tercera y última noche... No hace falta desearte suerte... Felton es el mejor inversionista que podrás encontrar. Para ser tu primera vez, me has superado.Apretando sus labios sintiendo algo de vergüenza por lo grosero que fue Killian con Aldo la noche anterior, Eirá guardó silencio y, dirigiéndose al elevador, una vez en su i
Capítulo 16— Una línea que no se debe cruzarNarradorEl celular vibró con fuerza sobre la mesita de noche, interrumpiendo el silencio sepulcral de la habitación. Killian lo miró, y el corazón se le comprimió en el pecho al ver el nombre en la pantalla: Eira Drayton. Giró lentamente la cabeza, Sofía dormía profundamente. No quería despertarla, no quería que preguntara, no quería explicar.Tomó el teléfono, se levantó sin hacer ruido, con cuidado y cruzó el cuarto a oscuras. Se encerró en el baño con el pulso acelerado, y recién entonces deslizó el dedo sobre la pantalla para responder.—¿Eira? Preguntó en un susurro, con voz baja pero tensa deseando no ser descubierto—¿Qué pasa? ¿Dónde estás?Del otro lado, el sonido fue apenas un soplido tembloroso casi imperceptible pero suficiente para él —Killian…Él se tensó de inmediato al notar algo inusual en su voz, la conocía tan bien que solo bastó eso para saberlo—¿Qué te hicieron?—No… no lo sé. Me siento rara. Creo que me drogaron M
Capítulo 17—Eres mi maldita locura, mi perdiciónNarrador:Cuando el vestido se abrió, Killian la ayudó a deshacerse de la tela que cayó al suelo como una piel vieja, quedándose en ropa interior.—¿Mejor? Susurró la pregunta intentando no mirarla por lo que significaba tenerla tan cerca de esa manera. Ella asintió, pero su mirada cambió. Ya no era vulnerabilidad, era deseo, el mismo que siempre latía entre ellos, disfrazado de odio, de orgullo, de rabia.—Te juro que no quise llamarte Respondió Eira, recorriendo su pecho con un dedo de una manera que si no fuese por la ocasión pensaría que era un intento de provocarlo.—Pero no podía pensar en nadie más.La respiración de Alde se aceleró, y su boca se abrió ligeramente asombrado por lo que escuchaba, pero atribuyéndoselo a la droga se mantuvo firme, tratando de no abusar de ella por lo vulnerable que se encontraba.—Y fue lo mejor que pudiste hacer... Ahora debo irme, Eirá. Deberías darte un baño antes de dormir.Girándose sobre sus