Anastasia.
Después de haber amenazado a Cintia me dirijo hacia adentro, al entrar ya está listo el desayuno, el ambiente se siente muy tenso no le doy importancia solo empiezo a comer no me siento con ánimos de nada, Sebastián se aclara la garganta llamando la atención de todos.
-¿Qué tal si salimos a pasear al mercado o aun lugar bonito que te guste, que te parece Anastasia.
Lo miro y lo pienso un rato no tengo ganas de verle la jeta a la demás gente, Julio le intenté ayudar.
-Si, mi cuñadita tiene razón qué tal si vamos a la laguna.
Sebastián lo mira.
-Cómo me llamaste.
-Qué te parece Anastasia.
Julio ignora totalmente el enojo de Sebastián, la laguna suena agradables, le sonrío y asiento en la cabeza, todos miramos a la abuela, nos mira y suspira.
-Está bien tienen 5 minutos para alistarse.
-Vamos.
Me levanto de la mesa y salgo corriendo a mi habitación, estoy buscando mi ropa y Julio pasa como si nada.
-Viej
Anastasia.Me atrevo a tocarle el trasero a Sebastián, se torno totalmente rojo lastima que Julio me aruina el momento.-No coman pan enfrente de los pobres.Lo miro y le sonrió.-Que envidia.Sebastián me rodea con sus brazos y me apega a el y puedo sentir su erección, lo miro y me sonrei sinicamente.-Que, soy hombre, no lo puedo evitar.-Lastima que hay más gente y bueno Julio.-Oye no estoy sordo.-Siges aquí cabrón, después de que me mañoseas el mandado.-Solo debía de serciorarme de que era de calidad, solo quiero lo mejor para ti Ana.-Si claro.-A comer.Mi madre nos grita y nadamos todos a la orilla, cada quien yo lo que va a comer, en la mesa me siento a un lado de Sebastián, miro al señor Iván que esta sentado enfrente de mí, parece zonvi.-Resaca señor.El solo asiente y levanta su pulgar, me golpear la espalda y volteo es Julio.-Dame campo.Me levanto y nuevo un poco m
Sebastián.Al escuchar eso me sentí como un idiota si no fuera por ese bago que está acostado en las piernas de mi amada no la tuviera a mi lado. Miro como Julio se levanta de sus piernas y la mira a la cara, pone sus manos en sus mejillas.-Y tú para mí Anastasia eres como la hermana que nunca tuve, aunque eres berrinchuda, caprichosa y tienes mal carácter.-Hay Julio y tú eres un flojonaso, joron y no conoces el espacio personal.Anastasia lo aleja con su mano y el la toma para ayudar la a levantarse, los miro como se empiezan a alejarse.-¿A donde van?-Verás ellos tienen una tradición, todos los años emos venido a este lugar no solo porque a mi nieta le gusta si no también a visitar a mí Alejandro. Solo mire.Me señala a la señora Guadalupe, ella y su esposo están arrodillados en la orilla del lago, estan depositan flores y velas ensendidas en pequenas canastas para que floten.-Venga por favor tu también debes de participar ya que
Sebastián.Después de esa escena tan cómica, todos nos fuimos a dormir, yo estoy sentado en la orilla de la cama mirando el suelo, no podía dormir al saber que le tenía tan cerca, quería pasar un poco más de tiempo con ella a solas, me levanto dela cama y escucho como Iván habla.-Padre te recuerdo que sus papás están en casa.Me detengo y lo miro.-No voy hacer lo que estás pensando, solo voy a platicar un poco más con ella.-Sí papá esas pláticas yo también las he tenido.-Muchacho impertinente.Me voy al cuarto de Anastasia tocó un par de veces para mí sorpresa está despierta.-Adelante.Abro la puerta, está sentada en la cama.-Puedo pasar.-Claro Sebastián pasa.Entro y cierro la puerta me acerco, ella palmea la cama y yo me siento.-No puedes dormir.-No en verdad, no quieres charlar un rato.-Claro.Me recuesto a su lado y comenzamos conversaciones triviales, anécdotas, cosas sin i
Anastasia.A la mañana siguiente todo es normal trabajo y papeles que firmar, voy y se los entrego a Ivan en su oficina se mira demasiado nervioso se está mordiendo las uñas.-Señor Iván se encuentra bien.-No la verdad, no creo poder hacer esto, lo de esta noche estoy demasiado nervioso, ni cuando me presenté la primera en el trabajo me puse así.Me hace muy feliz saber que mi jefe está tan emocionado por contraer matrimonio, me siento en la silla que está enfrente de su escritorio.-Tranquilícese señor si en verdad la quiere y ella a usted le dirá que sí, sabrá cómo hacerlo.-Pero no sé cómo hacerlo, cómo lo arias tú.-Bueno en primer lugar nunca en mi vida he propuesto matrimonio así que, bueno de donde yo vengo a veces llevan serenata, flores o chocolates pero no sé qué costumbres tengan aquí.Lo escucho dar un gran suspiro.-Bueno creo que voy a tener que tomar valor.-En mi familia para tomar valor se toman un par de
Anastasia.Haber aceptado ayudar en la boda creo que fue uno de mis errores más grandes que he cometido, tengo que hacer malabares entre mi trabajo, ayudar con la boda llevo 15 días así y la verdad ya estoy exhausto ya casi no falta nada, solo falta que decidan qué comida quieren y de qué color va hacer el pastel, no saben si ponerlo turquesa o blanco, siento que en cualquier momento voy a colapsar.Ahorita estoy sentada en los sillones de la sala estoy realmente cansada Sebastián se acerca, trae unos papeles él está encargado de invitar a los familiares, me mira y sonríe.-Que cansada.-Un poco.Recargo mi cabeza hacia atrás en el sillón.-Bueno demasiado en que carajos me metí.-Tranquila.Se acerca a mí y me toma una de mis piernas y la soba.-Eso se siente tan bien.-Si quieres te quitas el pantalón y lo hago bien.-Vaya que directo.Sonríen hasta que mi celular suena.-Me doy un tiro.Lo tomo y
Anastasia.Después de esa pequeña y vergonzosa conversación Tiffany empezó a hacer un baile, todos están mirándola tomo mi copa y bebo por el radillo del ojo mire que Sebastián tenía la boca abierta, apreté la copa entre mis manos por lo general no soy celosa, ni posesiva pero tengo ganas de voltearme la cara y hacer que me vea, reclamar territorio como dicen comúnmente.Tiffany termino y empezaron a aplaudir esto es chistoso por lo general son silbidos y tiran dinero.-Gracias señores pero Anastasia lo puede hacer mejor, vamos Ana diviértete.Yo solo la miraba, me termine de tomar la copa de vino.-Bueno si tanto insistes Tiffany por favor la canción.Empecé a cantar, me levanté del asiento y empecé a mover mis caderas al ritmo de la canción, me acerqué primero a los gemelos, estan sentados juntos, pasé por atrás de ellos y los rodeo con mis brazos apreté un poco sus mejillas, me acerqué al señor Iván a él solo le toque el hombro despues me acerq
Anastasia.Suena la alarma de mi celular, lo busco y lo apagó, siento como me ha a la cama de nuevo, Sebastián se posisiana sobre mí y sonrie.-A donde vas querida, no te dejaré en todo el día.-Sebastian hoy es la boda, se nos ara tarde.Me libero de el y me dirijo al baño, no me importa que me vea desnuda ya, me detengo en la puerta del baño, lo volteo a ver sentado en la cama.-Si quieres puedes venir a tallarme la espalda.Me da una gran sonrisa y se levanta rápidamente de la cama, me levanté en brazos y nos dijimos a la ducha, no pudimos quedarnos quietos en la ducha. Me estoy poniendo la ropa interior y siento como Sebastián me dovora con la mirada.-Ya deberías de irte a cambiar.-No puedo dejar de verte querida, pero tienes razón.-Tal ves luego te enseñe algunas cosas.Le doy una mirada pervertida y le sonrío, se levanta y se aserca a mi, me rodea con sus brazos por la sintura y me besa.-Estaré impaciente to
Anastasia.Después de que Sebastián y yo lo isimos por primera vez no emos dejado de tener sexo o tocarnas, como dijo Iván tenemos la casa para nosotros solo. Bajo las escaleras y Sebastián esta sentado en la sala lellendo el periódico, me aserco a el por la espalda, se me ocurre una edia me bajo la ropa interior es fácil ya que traigo puesto un vestido, me agacho y lo beso en la mejilla.-Ola que ases.-Leo un poco querída, porque.-Bueno quiero jugar.Y colocó mi ropa interior en su libro y le separó de él para dirijirme a las escaleras me detengo y lo miro, el se levanta y se aserca a mi me toma de la sintura y me levanta para colocarme en su hombro como un costal de papas y comiensa a subir las escaleras.-Sebastian.Me da una nalgada y río, mi atención es llamada por la puerta de la casa que se abre, miro como entra el señor Iván y Irina, la vergüenza me invade por como me encontraron, Sebastián se da la vuelta para ver quién entró.