El encuentro de Serena con Amanda y LuciaDecidida a dejar las cosas como están, a no seguir con los planes de vengarme de mi marido, me comunico con mis abogados desde el hospital e inicio todo el trámite del divorcio, con pleno conocimiento de que si él llega a quedar paralitico, simplemente le daré una indemnización y solucionado, al fin de cuentas que hubiera sido infiel me ayudaría a que no tuviera que hacerme cargo de su recuperación.Estoy por concretar otra llamada, cuando a mi puerta se asoma una sombra de una mujer, ¡ay no puede ser! Lucia. La miro y hago un gesto de desprecio- ¿Qué estás haciendo aquí?, no me botaste el telefono – Volteo los ojos, ya en este punto me daba real cansancio hablar con ella o escucharla.- Si Amanda yo sé lo que dije, pero desgraciadamente ahora no puedo quedarme sin tu ayuda, el proceso legal ahora se quedara pausado por la condición de Cristopher, entonces estoy más que segura que de esto no va a quedar nada para mí, eso lo sé y paso algo te
La maldad existeDespues de que le di el consejo de mi vida según yo a Lucia, en lugar de haberle prestado el dinero en primera estancia, ella salió corriendo a buscar a su Cristopher, yo era consciente de que ella aún estaba enamorada y lo lamentaba, pero debía actuar, ese hombre está buscando la manera de dejarnos peor e irse con otra, muy seguramente Serena le haría lo mismo.Mientras tanto LuciaDespues de haber hablado con Amanda, y de haberse encontrado con Serena, Lucia sentía que tenía el corazón destrozado, ella a pesar de ser una mujer ya madura, se habia enamorado profundamente de Cristopher, y un su corazón aun habían sentimientos de amor por él, no era fácil desenamorarse de la noche a la mañana de a la persona por la cual habia dejado todo y le habia dado la dicha de tener dos hijos, hasta hace unos días, él era el amor de su vida, con defectos como cualquier ser humano, pero ella lo amaba y lo habia aceptado, pero en gran parte Cristopher tuvo la culpa, pues hizo promes
La salida del hospitalLos siguientes días fueron difíciles en cuanto a la recuperación física, los golpes y las fracturas del accidente estaban cobrando factura, por ese tiempo no supe de Lucia, imaginé que estaba tratando de resolver sus problemas familiares, sabia muy poco de Cristopher, lo que me decían las enfermeras.Carlos habia sido un pilar fundamental en mi recuperación y ya se estaba llegando la hora de volver a casa, de hacerme cargo de todo formalmente, y bueno, enfrentar cada una de las situaciones que se venían con el divorcio.Al regresar a casa, mis hijos me habían preparado una bella bienvenida.Mi empleada me abre la puerta y me hace seguir, aunque voy sosteniéndome por un bastón, no puedo evitar sobresaltarme por la sorpresa que me tenían preparada, un hermoso letrero de BIENVENIDA, también unos avisos de mejórate pronto, mi hija habia organizado una deliciosa comida, sabía que en el hospital la comida no era lo mejor, así que se encargó de tenerme un gran festín.
Carlos decide irse de mi vidaPasan unos dos días e inicio mi divorcio con Cristopher, no iba a esperar a que pasara el tiempo, así que antes de que él estuviera en casa de nuevo, ya tendría todo preparado, lo que no dejaba de sorprenderme era la indiferente actitud de Carlos, y aunque tenía claro que no iba a rogarle para que estuviera conmigo, quería que me diera una explicación del porque su repentina desaparición, además que tenía sentimientos encontrados, no pensé que su ausencia me causaría tanto dolor.Tomo mi telefono y tecleo su número, puedo darme cuenta como esta en línea, ha pasado el tiempo y me ha ignorado totalmente, siento como la ira me consume. Y sin pensarlo dos veces le escribo:-Mira hi*** de tu pu*** no entiendo que paso, y tampoco quiero entenderlo – luego de leer lo que estoy escribiendo, me arrepiento y reescribo el mensaje-Carlos, no entiendo las razones por las que decidiste estar ausente, pero siento que no fui tan mala para no tener una explicación de tu
La paz interior, una necesidad fundamental Sin ninguna motivación hice mis terapias, me sentía mal física y sicológicamente, la tranquilidad que en algún momento se hizo presente, ya no estaba, quisiera decir que me sentía empoderada, que mi papel de esposa valiente que iba a salir de las garras de su marido se fue al estanco, la frustración estaba presente en mí, y lo poco que había construido para salir de este infierno, se había esfumado.Ahora estaba peor que al principio.Al llegar a mi casa, las cosas no cambiaron. El peor de mis karmas estaba presente, ya le habían dado salida del hospital a mi marido, cuando abrí la puerta lo veo en una silla de ruedas, hace mucho no lo veía y su estado físico había contado por completo, estaba demacrado, había perdido bastante peso, generalmente él era un hombre corpulento, guapo, no le permitía al tiempo que pasara sobre él, pero en esta oportunidad, había recobrado todos los años que sobre él habían pasado por alto. ¡Pobre! Si apariencia q
¡Christopher mentiroso!Conforme pasan los días la convivencia se habia vuelto intolerable en la mansión, por desgracia debido al divorcio, nuestros activos habían sido congelados, solo se salvó una de mis cuentas bancarias, que era la que actualmente nos sostenía, aunque aún no teníamos problemas económicos, se estaba avecinando algo malo, estábamos gastando todos nuestros ahorros, no teníamos ningún tipo de ingreso en ese momento, era necesario que me pusiera a trabajar, tomar un cargo en la empresa en donde estaban mis acciones y hacer movimientos de ellas.Debido a esto las peleas con mi marido eran más constantes, los gritos iban y venían a todas horas del día, los momentos de paz en mi hogar se habían sesgado totalmente. Por fortuna para mí, el día de entrega de mi nuevo hogar se acercaba, eso me recordaba la situación en la que también estaba Lucia, pero me negaba a llamarla, en este momento no teníamos nada por hacer juntas, ella se habia disfrutado también la mejor parte de m
Un duro golpeCon todo el temor que me poseía y con unas ansias locas de gritarle en la cara a mi marido que ya sabía que estaba mintiendo respecto a su incapacidad, me aseguro primero de llamar a mi abogado e informarle lo que está pasando, él iniciaría un nuevo documento ´para que a mi marido no le corresponda nada de lo que es mío, ahora si se iba a quedare sin nada y muy posiblemente se iría a la cárcel por fraude.Llego a mi casa, sabía que era el momento adecuado para hablar con él, pues mi hija estaba en la universidad y mi pequeño Santiago estaba en el colegio, así que sería perfecto para que estuviéramos los dos solos, las empleadas por lo general despues de organizar la casa temprano se la pasaban en la cocina, y mi casa era amplia, así que solo estaríamos él y yo, muy posiblemente tendríamos una discusión en donde la agresión física se haría presente, y eso me asustaba, yo no estaba totalmente recuperada, pero tenía listo el telefono de la policía por si lo necesitaba.La
Un secuestro oficialNo sé en qué momento perdí el conocimiento de nuevo, el todo es que me despierto y estoy sobre una cama muy dura, en un cuarto oscuro con apenas una abertura en la pared por donde entraba algo de luz, estoy atada con una cadena a la pared, mi cabeza me duele demasiado.Trato de levantarme y comienzo a gritar, a pedir ayuda, pero por lo visto, es imposible, estaba segura de que nadie me iba ayudar. No sabía cuánto tiempo habia pasado desde el momento en que ese par de locos me habían secuestrado, siento un profundo desespero en mi interior, no puedo evitar llorar, tenía un miedo terrible de morir, a pesar de todo yo amaba la vida, amaba respirar, el olor de la libertad, el buen comer, y sobre todo amar a mis hijos, si bien nunca habia sido feliz enteramente en mi matrimonio, estaba a punto de librarme de ese mal hombre en poco tiempo, no entendía el por qué me estaba haciendo esto.Seguí gritando hasta que mi garganta se cansó, le daba golpes a la puerta de acero q