Carlos decide irse de mi vidaPasan unos dos días e inicio mi divorcio con Cristopher, no iba a esperar a que pasara el tiempo, así que antes de que él estuviera en casa de nuevo, ya tendría todo preparado, lo que no dejaba de sorprenderme era la indiferente actitud de Carlos, y aunque tenía claro que no iba a rogarle para que estuviera conmigo, quería que me diera una explicación del porque su repentina desaparición, además que tenía sentimientos encontrados, no pensé que su ausencia me causaría tanto dolor.Tomo mi telefono y tecleo su número, puedo darme cuenta como esta en línea, ha pasado el tiempo y me ha ignorado totalmente, siento como la ira me consume. Y sin pensarlo dos veces le escribo:-Mira hi*** de tu pu*** no entiendo que paso, y tampoco quiero entenderlo – luego de leer lo que estoy escribiendo, me arrepiento y reescribo el mensaje-Carlos, no entiendo las razones por las que decidiste estar ausente, pero siento que no fui tan mala para no tener una explicación de tu
La paz interior, una necesidad fundamental Sin ninguna motivación hice mis terapias, me sentía mal física y sicológicamente, la tranquilidad que en algún momento se hizo presente, ya no estaba, quisiera decir que me sentía empoderada, que mi papel de esposa valiente que iba a salir de las garras de su marido se fue al estanco, la frustración estaba presente en mí, y lo poco que había construido para salir de este infierno, se había esfumado.Ahora estaba peor que al principio.Al llegar a mi casa, las cosas no cambiaron. El peor de mis karmas estaba presente, ya le habían dado salida del hospital a mi marido, cuando abrí la puerta lo veo en una silla de ruedas, hace mucho no lo veía y su estado físico había contado por completo, estaba demacrado, había perdido bastante peso, generalmente él era un hombre corpulento, guapo, no le permitía al tiempo que pasara sobre él, pero en esta oportunidad, había recobrado todos los años que sobre él habían pasado por alto. ¡Pobre! Si apariencia q
¡Christopher mentiroso!Conforme pasan los días la convivencia se habia vuelto intolerable en la mansión, por desgracia debido al divorcio, nuestros activos habían sido congelados, solo se salvó una de mis cuentas bancarias, que era la que actualmente nos sostenía, aunque aún no teníamos problemas económicos, se estaba avecinando algo malo, estábamos gastando todos nuestros ahorros, no teníamos ningún tipo de ingreso en ese momento, era necesario que me pusiera a trabajar, tomar un cargo en la empresa en donde estaban mis acciones y hacer movimientos de ellas.Debido a esto las peleas con mi marido eran más constantes, los gritos iban y venían a todas horas del día, los momentos de paz en mi hogar se habían sesgado totalmente. Por fortuna para mí, el día de entrega de mi nuevo hogar se acercaba, eso me recordaba la situación en la que también estaba Lucia, pero me negaba a llamarla, en este momento no teníamos nada por hacer juntas, ella se habia disfrutado también la mejor parte de m
Un duro golpeCon todo el temor que me poseía y con unas ansias locas de gritarle en la cara a mi marido que ya sabía que estaba mintiendo respecto a su incapacidad, me aseguro primero de llamar a mi abogado e informarle lo que está pasando, él iniciaría un nuevo documento ´para que a mi marido no le corresponda nada de lo que es mío, ahora si se iba a quedare sin nada y muy posiblemente se iría a la cárcel por fraude.Llego a mi casa, sabía que era el momento adecuado para hablar con él, pues mi hija estaba en la universidad y mi pequeño Santiago estaba en el colegio, así que sería perfecto para que estuviéramos los dos solos, las empleadas por lo general despues de organizar la casa temprano se la pasaban en la cocina, y mi casa era amplia, así que solo estaríamos él y yo, muy posiblemente tendríamos una discusión en donde la agresión física se haría presente, y eso me asustaba, yo no estaba totalmente recuperada, pero tenía listo el telefono de la policía por si lo necesitaba.La
Un secuestro oficialNo sé en qué momento perdí el conocimiento de nuevo, el todo es que me despierto y estoy sobre una cama muy dura, en un cuarto oscuro con apenas una abertura en la pared por donde entraba algo de luz, estoy atada con una cadena a la pared, mi cabeza me duele demasiado.Trato de levantarme y comienzo a gritar, a pedir ayuda, pero por lo visto, es imposible, estaba segura de que nadie me iba ayudar. No sabía cuánto tiempo habia pasado desde el momento en que ese par de locos me habían secuestrado, siento un profundo desespero en mi interior, no puedo evitar llorar, tenía un miedo terrible de morir, a pesar de todo yo amaba la vida, amaba respirar, el olor de la libertad, el buen comer, y sobre todo amar a mis hijos, si bien nunca habia sido feliz enteramente en mi matrimonio, estaba a punto de librarme de ese mal hombre en poco tiempo, no entendía el por qué me estaba haciendo esto.Seguí gritando hasta que mi garganta se cansó, le daba golpes a la puerta de acero q
Inicia una angustiante búsquedaYa han pasado tres días desde la desaparición de Amanda, en su casa ya han llamado a la policía, quienes empezaron con las labores de búsqueda, mientras que Cristopher comienza con un hipócrita sentimiento de interés, hasta su casa han llegado los medios de comunicación con el objetivo de publicar información que pueda ayudar a encontrar a Amanda, se habia declarado oficialmente desaparecida.Camille y Santiago no se han movido de la casa esperando alguna llamada, mientras que el padre de Amanda y sus conocidos se han puesto en la búsqueda con carteles, avisos, todo medio de búsqueda, todos sabían que los primeros días, eran vitales para poder encontrarla sana y salvo.-Bueno señoras y señores, estamos en la casa de la señora Amanda Beller, quien esta desaparecida hace tres días, recordemos que ella es la hija de uno de los empresarios más famosos del país, que con sus contribuciones ha hecho grandes obras de caridad, hoy debemos ponernos la mano en el
La tortura, un chantaje psicológicoNo sé cuántos días han pasado desde que estoy secuestrada, estoy muy adolorida, Serena es la maldad pura, cada vez que entra a la habitación me tortura, me golpea, muchas veces ha escupido en mi comida y me obliga a comer en su presencia con amenazas.Nunca imagine que esa joven con cara inocente fuera tan agresiva y llena de odio en su interior, me siento sin esperanzas, físicamente estoy muy débil, la presión se me ha bajado varias veces y estoy más que segura que en cualquier momento necesitare atención médica, pero ni hablar, aquí puedo morirme, Cristopher no ha venido a verme, supongo que “me debe estar buscando”, hipócrita desgraciado.Cada vez que siento que se va a abrir la puerta del cuarto en donde estoy encerrada siento como los nervios me consumen. Ella me ha hecho sentir el verdadero pánico. La puerta se abre de un golpe- ¡Buenos días, Amandita! ¿Cómo amaneces el día de hoy? - Serena se me acerca y me da una bofetada al tiempo que “me
Si no hay un culpable, ¡todos son sospechosos! Estoy boca abajo sobre el sucio colchón en donde duermo, no solo mi cuerpo esta hecho trisas, sino que también mi dignidad y mi corazón lo estaban, las lágrimas no dejan de rodas por mis mejillas, pero al menos me quedaba un sentimiento de satisfacción: No habia permitido que Cristopher asesinara a aquella chica.Por raro que pareciera, sentía un grado de compasión por ella, claro, la que ella no sentía por mí, pues no le importaba en absoluto lo que estuviera pasando conmigo, despues de ese terrible momento, en donde la vida de ella estuvo en peligro y arriesgue la mía para salvar la suya, ella despues de despertarse, simplemente se quedó mirándome, ni siquiera me dio las gracias, solo se acomodó su ropa, se levantó como si no hubiera pasado nada y de nuevo me dejo ahí botada, sin ningún reparo, sin ninguna esperanza, sin ningún alivio.Pasaron creo yo un par de días más, ella solo abría la puerta rápidamente una vez al día, me dejaba a