“Señora Winters, el matrimonio debe existir por amor”.

Catherine le dedicó una leve sonrisa.

“Sin amor, el matrimonio es solo una tumba donde el amor va a morir. Es obvio que Duke no quiere construirse una tumba solo por el bien de los niños”.

La señora Winters sacudió su cabeza y no dijo nada.

Ella había estado en Ascrialia durante muchos años, y había perdido el control sobre su hijo hacía mucho tiempo. Lo que sea que ella dijera no significaría nada para él.

“Señora Winters, me gusta mucho la perspectiva de Duke sobre el amor”. Catherine bajó de repente la cabeza y sonrió. “La conozco desde hace muchos años y escucho el nombre de Duke todos los días, pero aún no lo he conocido. Señora Winters, ¿tiene una foto de él?”.

La señora Winters le lanzó una mirada a Catherine.

Catherine había aparecido en su vida hacía unos cuatro años. Iba a visitarla todos los días. A su vez, la señora Winters compartía sus pensamientos personales con la joven que tenía poco más de veinte años.

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