—Bien.

Everett comenzó a ponerse en “modo de trabajo”.

Por otro lado, Ninian se preparó para ser interrogada por sus padres cuando volviera a la mansión de la familia Winters.

Para ser precisos, fue su padre, Duke, quien la interrogó personalmente.

Estaba sentado en el sofá. Con los años, aunque no aparentaba su edad, se volvió más solidario y amable.

Sin embargo, por razones obvias, en este momento no se parecía en nada a él.

Sostenía un periódico y su hermoso rostro tenía una expresión indiferente.

—Papá… —dijo Ninian con zalamería.

Duke la ignoró.

—Papá, no te enojes. Vas a envejecer más rápido.

Duke siguió ignorándola mientras le sostenía el periódico con fuerza en la mano. Estaba claramente enojado, ya que sus venas se mostraban en sus sienes.

Ninian se le acercó y le dijo:

—Papá, no te enfades. Mami no te amará si te vuelves feo.

—¡Ella lo hará! —Duke finalmente rompió su silencio y dijo fríamente.

—¿Hmm? —preguntó Adina dubitativa.

Retiró el periód