Proximamente capitulo edicion San Valentin.
ELRealmente no se habían equivocado al decirme que la marca me pondría a niveles de sintonía que no comprendía. Estaba escuchando susurros fantasmales, la voz de Camellia.Sentía la necesidad de matarlo, olía a podredumbre; seguro que ella también lo percibió por los susurros que llegaban a mi con su voz, advertencias sobre lo peligroso que era dejarlo vivir.Pero cuando me pare detrás de ella apenas rozando mi pecho a su nuca, la cercanía había intensificado esas vibraciones y susurros. El cuerpo de Camellia hervía en deseos de destrucción.“Yo conozco este sentimiento”, pensé.-Si, Vasseig es territorio de la manada Real. - El perfume de Camellia cambió rápidamente. La vi bajar la mirada hacia el hombre.-¿Que te hace pensar que necesitas mas territorio?, ¿Necesitas mas burdeles?. - La voz firme de Camellia resonó por toda la sala y los guardias miraban con desprecio al hombre.-Mi señora, yo no tengo burdeles. Mi negocio es legítimo y mi familia ha crecido. Necesitamos espacio par
ELPodía oler el cóctel de emociones que llevaba Camellia dentro, fue difícil verla luchar contra su naturaleza. Es más fuerte que yo, ella aun seguía luciendo humana. Yo habría perdido la batalla para este punto.Cuando se aferró a mi saco y me pidió que me fuera, solo podía oler preocupación. Y los susurros fantasmales solo llegaban ecos.“Lo puedes lastimar, dejalo ir” “Dejalo ir”-No me iré, es ¿Hambre?, ¿Ira?; dime que necesitas .- prometí que haríamos esto juntos, voy a cumplir mi palabra.“Necesito coger”El susurro fue más bien un grito en mi mente. Sabía que necesitaba cazar no follar como animales, no llegaríamos lejos en esta condición; sólo podía ofrecerle una clase de liberación en estas condiciones.-Levántate el vestido. - quería ser amable pero no había nada tierno en mi demanda. Lo haría aquí como un maldito animal si fuera necesario.-¿Qué? .- la expresión escéptica fue un alto total. Me incliné y la tomé por el trasero para levantarla. Su hermoso vestido corrió por
ELEscuchaba a todos quejarse y pelear, casi siempre Adam permanecía ajeno pero esta vez gritaba fuera de control, los Askin le seguían el paso a la discusión. Pero de entre todos Zhara era la única que nos miraba a mi y a Camellia.-Eeeeentonces.- dijo sarcástica la pequeña mujer.Todos guardaron silencio y nos voltearon a ver extrañados. Camellia levantó la vista hacia mí haciendo un gesto de indignación.-Porfavor, diles. - fue todo lo que dijo.-Son tus hombres ahora. - me mire las puntas de los zapatos.Va a tener que aprender a lidiar con estos idiotas, porque serán sus idiotas por 7 largos días. Seguramente no habría matrimonio después de esto. -Con que así lo vas a manejar. - la vi señalar a los Askin, su fragancia iba de la acidez al picor. -Ustedes, preparen la seguridad del castillo. Y ustedes tres . camino hacia Adam mirándolo directo a los ojos. -Vendrán conmigo, les guste o no.-La vi muy molesta, me imagino que Samuel iba a comenzar a lloriquear y apenas había abierto l
ELLAEstaba sentada en la silla de la oficina en el castillo, se habían solicitado audiencias privadas, tenía una terrible sensación de peligro pero no entendía. Pero el dolor de cabeza era lo peor de todo. Nunca me había dolido tanto la cabeza, como lo había hecho estos últimos días.Una pequeña familia en la frontera de Dasla y Vasseig había reportado la desaparición de varios de sus miembros, no dejaban de decir que habían sido niños o jóvenes, la mayoría hembras.-Silencio.- dije quedamente mientras me apretaba las sienes, estaba muy cansada.Atrás de mí estaban Samuel y Leo como unos malditos halcones, fulminando a todos los que entraban. Aunque muchos de los guardias Askin no estaban acostumbrados a los extraños, durante los entrenamientos vi algo que jamás creí presenciar. Samuel se entendía muy bien con los chicos Askin, mientras que Leo y Maxim pasaban la mayor parte del tiempo juntos de un lado para otro, sin duda encontraron un gusto en común. Adam se había ido con Zhara a
ELLABaje a la recepcion de mi casa privada, me tome el tiempo para cubrirme de pies a cabeza con un vestido de grueso algodon en negro, con las mangas tan sueltas como pude encontrar, tenia un terrible ardor en mis sigilos. Me puse un velo facial que colgaba de unas horquillas con forma de rosas doradas.Mientras me arreglaba para recibirlos, pedí que colocaran alimentos y bebidas, la terraza en el patio central aún tenía en floración mis preciadas camelias blancas, el aroma estaba impregnado de frescura con toque de dulzura. Todas las puertas internas que daban a los patios centrales y a las terrazas públicas estaban abiertas, iluminando los interiores que estaban llenos de jarrones con flores. Cuando bajé los pies a la sala interna, el sonido de la zapatilla hizo que todos los hombres giraran.La mirada atónita de todos los mercenarios me hizo detenerme, “supongo que esperaban ver un monstruo”, llevaba las manos juntas a la altura de mi vientre. No reconocí el rostro de ninguno de e
ELIba camino al palacio para las audiencias de la semana, había incluso convencido a Camellia de presentarse en una de ellas, pero hoy cenaremos como pareja formal delante de mis padres. Supongo que la ventaja de llegar primero será que prepararé el terreno, aunque Leo había venido oficialmente ayer a poner al día a mis padres de esta situación.En palabras de mi beta, “La estrategia más sana para abordar el tema era aceptar que ya no era un cachorro y debía tomar decisiones maduras, hacerme responsable de las consecuencias de mis decisiones y afrontar el destino que se me había puesto sobre los hombros”Y por si eso no fuera suficiente, Samuel llegó en una SUV llena de cajas de ropa; trajes, sacos, abrigos e incluso ropa casual hasta una sudadera. Todo a medida.“M****a Zhara, solo me haces mas dificil odiarte”.Poco después mi móvil personal fue invadido de mensajes de Zhara, la gran mayoría sobre la ropa; amenazaba con renovar mi guardarropa, afirmaba que si me veía bien, su señor
ELLALa mirada de la madre alfa pasaba de una caja a otra, solamente la caja de vino skuldenvine pertenecía a una cosecha cuyo valor supera el medio millón de dólares. La rubia tenía la boca abierta y su olor solo empeoro, era realmente una bruja y no en el buen sentido. Me ofendía ponerme en su nivel, demeritar mi capacidad y mi honor.-¿No olvidas algo?. - escuche la voz de Ragnar, grave casi como un gruñido.Me giré a verlo, estaba de pie mirándome desde arriba con las manos en las bolsas del pantalón. Sus ojos glaciales tenían ese fuego que tanto me gustaba.-¿Disculpa?. - claro que sabía a qué se refería. Pero quería que él me lo pidiera.-¿Serías tan cruel de no traer un regalo para mi, Camellia?. - su voz fue suave pero demandante.Me dio gusto escucharlo decirlo en voz alta. Era justamente esa clase de detalles que esperaba de él, ser demandante frente a todos, incluyendome. Cuando me tomó de la mano y se la llevó a los labios frente a la mirada atónita de los padres alfa, tu
ELLALa mirada de la madre alfa pasaba de una caja a otra, solamente la caja de vino skuldenvine pertenecía a una cosecha cuyo valor supera el medio millón de dólares. La rubia tenía la boca abierta y su olor solo empeoro, era realmente una bruja y no en el buen sentido. Me ofendía ponerme en su nivel, demeritar mi capacidad y mi honor.-¿No olvidas algo?. - escuche la voz de Ragnar, grave casi como un gruñido.Me giré a verlo, estaba de pie mirándome desde arriba con las manos en las bolsas del pantalón. Sus ojos glaciales tenían ese fuego que tanto me gustaba.-¿Disculpa?. - claro que sabía a qué se refería. Pero quería que él me lo pidiera.-¿Serías tan cruel de no traer un regalo para mi, Camellia?. - su voz fue suave pero demandante.Me dio gusto escucharlo decirlo en voz alta. Era justamente esa clase de detalles que esperaba de él, ser demandante frente a todos, incluyendome. Cuando me tomó de la mano y se la llevó a los labios frente a la mirada atónita de los padres alfa, tuv