Natalia.- Había llegado a la universidad más tarde de lo que esperaba, caminé rápidamente como una desquiciada para encontrarme con el profesor Spell y convencerlo para que me repitiera la prueba, pero mis esfuerzos fueron interrumpidos por la decana, Green, una mujer robusta y con una mirada que te hacía tener pesadillas, no es de extrañar lo gran amiga que era de Fedora, se entendían muy bien y su único propósito amargarme la existencia.— ¿Llegando tarde Redmond? –Preguntó con ese tono de voz lúgubre y mirándome con desdén.— Solo unos minutos, señorita Green. –Expresé bajando la mirada, lo que odiaba.— Hoy recibí una llamada de tu tío, informándome que no seguirá pagando tu matricula –Abrí los ojos con sombro. –Por lo que tienes prohibida la entrada hasta que pagues este semestre porque no se ha pagado, además los aranceles para el acto de grado ya se están cobrando y solo tienes quince días para cancelarlo, de lo contrario solo recibirás tu título en oficina.Esto último la ver
Ronie.-Una vez más veía el teléfono sabía que tenía que hacer esa llamada, pero no quería hacerlo, me iba a meter en problemas, pero tengo que tomar fuerzas, así que marqué el número que ya tenía en el discado rápido.— Hola, soy yo tenemos problemas— ¿Qué pasa?— Creo que Jacob empieza a desconfiar de mi –Confesé moviendo mi pierna con nerviosismo de arriba abajo.— ¿Qué hiciste? –El corazón se me detuvo cuando escuché el gruñido del otro lado.— Nada, no hice nada, más fuiste tú el que cometió el error te dije que no entregaras ese diseño lo hiciste muy rápido y solo yo conocía el boceto, ¿Crees que Jacob es estúpido? Y Ahora menos estoy segura que me dejará por fuera contrató a su prometida que trabajará con él y a una idiota como abogada.— Pues no sé cómo vas a hacer Verónica ¿No te la das de dura? Bueno esa dos no pueden estar por encima de ti.— Pero… –Intenté insistir, pero Alfred me interrumpió.— Pero nada, Jacob Morgan debe seguir confiando en ti, solo en ti ¿Me entiendes
Natalia.- Por suerte y gracias a mis buenas calificaciones con el profesor Spellman logre recuperar el examen que había perdido, estaba un poco más tranquila ahora que los semestres que me faltaban estaban pagos y la decana no me molestaría más con el tema, hasta que se lo mencione a Fedora y allí si tendré problemas.Jacob me había pasado las especificaciones para el diseño que tenía que hacer, la reunión sería con unos coreanos en los ratos libres investigue un poco sobre la tecnología automotriz de Corea ya tenía algunas ideas en mente, era sencillo para mí el diseño se me daba bien, pero igual estaba nerviosa si ellos aceptaban mi diseño no estaría en deuda con Jacob y podría usar mi sueldo para pagarle a Leticia, creo que mis suplicas han sido escuchadas.Son más de las seis y espero en la entrada a Jacob que avisó que vendría por mí, la noche estaba fría y quedaban ya pocos estudiantes, comenzaba a inquietarme un poco.— Sobrina –La voz de Oswald me hizo contener el aire, me to
Jacob.-¿Cómo no me di cuenta de la emboscada de Leti? ¡Vaya amiga! El musical me estaba aburriendo horrores, me hacía recordar a cuando mi madre me traía arrastras para disfrutar con ella y lo menos que hacía era eso disfrutar, de reojo miraba a Natalia que estaba con una sonrisa de oreja a oreja, sí que estaba disfrutando del espectáculo y movía su cabeza al ritmo de la música, contuve una sonrisa, se veía muy linda tan concentrada y divirtiéndose.(…)Ya pasaba la medianoche cuando llegamos a casa, la noche estaba lluviosa.— ¿Te puedo preparar algo de comer si tienes hambre? –Me miró sorprendida.— No, está bien, mientras estuve en la cafetería pensando en el diseño que me pediste, me comí algo, gracias me iré a dormir.— Está bien hasta mañana –Se giró dejando la estela de su perfume invadiendo toda mi estancia, masajee mi cuello y vi desde el sofá la puerta de su habitación cerrarse, hubo tantos pensamientos… indebidos que me hicieron levantarme de inmediato y subir a mi habitac
Natalia.-Habíamos llegado a la empresa de Jacob en la entrada nos esperaba Leti, esta chica era una abogada con mucho estilo llevaba un vestido color verde ajustado hasta la rodilla de tela acanalada con botones dorados sin mangas y un cinturón del mismo color del vestido, el atuendo lo complementaba con unos tacones de aguja en color negro, para que negarlo se veía hermosa, empoderada y altiva.— ¡Buenos días! ¿Se desvelaron anoche? –Preguntó con una sonrisa pícara, un gruñido salió de los labios de Jacob. –Les traje un café, bueno Natalia a ti un café y a este gruñón un chocolate caliente –Jacob casi le arranca de la mano el chocolate y entró con otro gruñido, ella me miró confundida.— No me preguntes no sé qué le pasa hoy, le dije –Encogiendo mis hombros con la misma confusión de ella.— ¿Anoche no les fue bien?— Sí, fuimos al musical y estuvo bien— Pueden dejar de cuchichear, por cierto las puedo oír perfectamente.— Oye gruñoncito, ¿Esa es la bienvenida que le das a tus nuevo
Natalia.-Jacob y yo caminábamos tomados de la mano junto a Leticia por su empresa, aunque era una compañía que apenas comenzaba no era tan pequeña como creí, Jacob nos mostró las oficinas y los departamentos y no dudó en presentarme como su prometida lo que me emocionaba enormemente.Bajamos hasta el sótano donde se encontraba el área de ensamblaje contaban con todos los equipos tecnológicos necesarios, al llegar Leticia y yo captamos las miradas de todos los empleados en su mayoría hombres.— Jerry –Jacob llamó al encargado del taller. –Te presento a Leticia Sánchez desde ahora será la gerente del departamento legal y ella es Natalia Redmond tendrá el cargo de diseñadora y además en Mi Prometida –Las dos últimas palabras las enfatizó alzando la voz, después de eso las miradas solo se enfocaron en Leti.— Es un placer conocerlas señoritas, ¡Jefe felicidades! No sabía que se casaría, felicitaciones señorita.— Gracias, esta semana programaré una reunión habrán nuevas directrices para
Natalia.- Había quedado con Leti en una cafetería cerca de la universidad para conversar la debo bajarme de mi nube platónica llamada Jacob y pensar en la amenaza de Oswald que recae sobre Ermita.— Hola –La saludé mientras me veía comiendo un pastel de chocolate que se veía delicioso.— ¿Quieres? –Pensé en decir que sí.— No, no al grano, Leti sé que ya he abusado mucho de ti, pero necesito otro favor con urgencia— Me estás asustando Natalia ¿Qué pasa?— Oswald el esposo de mi tía Fedora me emboscó anoche al salir de la universidad y me amenazó con que si no le daba dinero daría la orden para matar a mi hija –Solo mencionar esas palabras hicieron que el corazón se me volviera como una pasa.— ¡Mal nacido! Tenemos que denunciar a ese hombre Naty— No ¡Estás loca! Además me amenazó con algo más, Ermita el ama de llaves que ha sido como una madre para mí también la amenazó, quería saber si tú conocías a alguien que pudiera contratarla, necesitamos sacarla de ahí— Pues… creo que yo po
Leticia.-Siento mi cabeza estallar debido al estrés, no pensé que el trabajo en la empresa de Jacob fuera a hacer tan agotador más la investigación de sobre el paradero de la hija de Natalia que no conduce a nada, cuando creemos que estamos cerca de una buena pista de la nada volvemos a estar en cero.— ¿Cómo es que un doctor que trabajaba en una clínica privada se desaparece así nada más? ¡NO ME INTERESA! Quiero avances en tres días si no olvídense de su pago ¿Quedo claro? –Colgué la llamada tirando el celular en el asiento del copiloto, respiro dos veces antes de bajarme de mi auto, justo antes de salir mi celular vuelve a sonar. –Diga, ¡oh! Hola Justin ¿Qué tal? Perfecto si dices que es un hombre de confianza estará bien ya mismo le diré a mi socio.Por lo menos algo menos de lo que tengo que preocuparme, aunque hubiese preferido que Justin se hiciera cargo de la instalación de los sistemas de seguridad que estamos necesitando en la compañía, pero tendremos que confiar en el tal V