Helen se quedó sin palabras al ser criticada. Aery y Mark también terminaron con su conversación. Este último se acercó con cara alargada y tiró de Arianne para irse. Al volver al coche, dijo con frialdad, “Volvamos al Chalet de Tremont”.

Brian no entendió cómo la atmósfera actual se volvió así cuando fueron tan amables mientras iban al restaurante. Tarareó para confirmar que recibió la órden y no se atrevió a decir más.

Arianne no se sintió culpable, así que preguntó directamente, “¿Qué te dijo Aery? Te ves tan triste como si fuera a llover”.

Mark no respondió a su pregunta, pero bajó ligeramente la cabeza como si estuviera meditando. Después de un tiempo, habló, “Ese día del accidente cuando abortaste, ¿qué estabas haciendo con Will en el auto?”.

Reacia a recordar el incidente, Arianne estaba un poco apesadumbrada. “Él no estaba de buen humor ese día porque tú adquiriste su empresa, así que me llamó para charlar. Por supuesto, no me dijo eso. Sólo estábamos charlando. Después de eso,