Cuando los platos fueron servidos consecutivamente, un atisbo de sonrisa se hizo más evidente en las esquinas de los labios de Mark. Se sentía como un soplo de aire fresco.

Arianne estaba bastante perpleja. ¿Acaso le pasaba algo hoy? Ella sabía que él siempre tenía una fachada frente a todos, pero algo no se sentía del todo bien.

Después de un momento de observación, ella descubrió un detalle. No importaba cómo él sonreía en el pasado, sus ojos parecían cubiertos de hielo. No había emoción en ellos. Hoy, sin embargo, incluso sus ojos estaban radiantes...

Mark no presentó peticiones absurdas durante la comida, lo que mantuvo a Arianne nerviosa. Pronto se firmó el contrato. El proceso fue tan sencillo que a ella le pareció un sueño.

Eran alrededor de las ocho de la noche cuando salieron del restaurante. La brisa nocturna durante esta temporada todavía era un poco fría. Lily preguntó: "Arianne, ¿vas a volver con el Sr. Tremont?".

Antes de que Arianne pudiera responder, Mark respondió: "El