Dorian no era tonto él presentía que algo le había pasado a Liv, parecía molesta en un segundo y en ese momento él creía que se echaría a llorar.

Así que una vez llegaron a casa la acorraló en el pasillo porque no se iba a escapar sin que le dijera que le había pasado en esa estúpida fiesta.

—¿Qué es lo que pasó? Y no me digas que nada porque sé que algo te pasa—le pidió suavizando la voz.

Liv solo negó con la cabeza no quería hablar de eso.

Dorian suspiro:—Vamos Olivia creés que no me di cuenta de que tienes el vestido manchado y vi que Madison te seguía después que saliste del baño.

Puede que el beso lo hubiera distraído un poco pero él la había estado persiguiendo con la vista toda la noche apenas se había alejado de él. Era involuntario su mirada siempre la buscaba en el instante que ella entraba en algún lugar.

Dorian conocía bien la clase de mujer era Madison por lo menos ahora lo sabía y sabía que ella buscaría cualquier momento para atacar a Olivia.

—Dorian, no quiero hablar