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Capítulo Seis - 2
Parte 2...Empezaba a ponerse nerviosa de nuevo. Él tenía ese poder para sacarla de su calma. Y tener que recordar que era mimada y rica a veces era difícil. Con él allí, tenía que mantener el personaje.— ¿Mis sirvientes cumplen tus órdenes?— Ah, si... Son geniales" - era cierto. Incluso se había llevado bien con algunos — Y no necesito que me atiendan todo el tiempo.— Vaya, qué sorpresa — él hizo un gesto con la boca — Siempre se te ocurre algo nuevo para sorprenderme.— Así es, - hizo una mueca de desdén. — Pensé que ya conocía tu tipo". —Tú no conoces mi tipo — espetó ella, molesta — Tú no sabes nada sobre mí. — Parece que no — él rió suavemente — Pero creo que nuestros sirvientes se confundirán con la señora de la casa haciendo las cosas sola.Se mordió la lengua para no revelar que incluso era amiga del jardinero, había enseñado a la cocinera un dulce típico brasileño y se sabía todos sus nombres. Incluso les pidió que la llamaran por su nombre de pila, aunque sólo fuera cu
Capítulo Seis - 3
Parte 3...— Claro que es demasiado korítsi mou - dijo suavemente — Deberías haber pedido más dinero en el trato - borró la suavidad — Es difícil encontrar chicas de tu edad que sigan siendo vírgenes - planteó con una sonrisa — Pero me pregunto por qué.Le entristeció el comentario mezquino.— El trato es demasiado bueno para mí - ella torció la boca.— ¡Genial! También me gusta lo que he conseguido hasta ahora. Me gusta cómo has respondido.— Tú has pagado por una mujer en la cama, yo sólo he hecho lo que debía - sonrió sombríamente.— No me mientas -dije secamente — Sé cuándo una mujer está realmente interesada y tú lo estabas mucho aquella noche -se rió — Te entregaste a mí sin reservas después de decidirte a jugar. Estuvo muy bien.Hablar de sexo y con un hombre no era algo que ella conociera bien y se sentía incómoda con su proximidad. Ella siguió sin mirarle y dio un lento mordisco a su bocadillo para evitar hablar, pero él no se apartaba de su lado.— Por mi... Ni siquiera tend
Capítulo Seis - 3
Parte 3...— ¿Adónde vamos? - ella aceleró el paso antes de tropezar.— Al dormitorio - subió las escaleras — No quiero que nada me distraiga mientras disfruto de tu delicioso cuerpo. No voy a quedarme mirando un pila o una heladera mientras me divierto.Caminaba tan rápido que ella casi tropezó dos veces al subir las escaleras.— Kostas... Más despacio" - se quejó.Él se detuvo y torció la boca. La levantó en brazos y subió el resto de las escaleras hasta el dormitorio. Dio un portazo con el pie y la tiró sobre la cama.Su corazón se aceleraba. Había prometido que no dejaría que volviera a acercarse a ella, pero ahora era casi imposible mantener esa promesa, entre otras cosas porque su cuerpo estaba paralizado y su piel deseaba su contacto.Era casi un trance hipnótico verlo mientras se desvestía. Cuando reveló su pecho bronceado y tentador, ella salivaba.— Te vas a quitar la ropa o quieres que yo te la quite — el preguntó, deshaciéndose del resto de su ropa — Quiero verte a todos k
Capítulo Seis - 5
Parte 5...Estuvieron un rato en silencio, relajándose.— Vaya - suspiró pesadamente — No pensé que tendría una tarde así - se rió y la apretó — Eres demasiada excitante, mujer - volvió a suspirar — Si yo hubiera sabido que estabas tan llena de sorpresas, habría firmado este contrato enseguida. Estás haciendo que valga la pena cada centavo que pagué por ti.Ella se cerró en el mismo instante e intentó marcharse, pero él la retuvo.— ¿Siempre me vas a repetir eso?" - ella preguntó escondiendo el dolor — ¿Cómo puedes hacerme el amor si me odias así?— No te odio, Nathaly — la miró — Solo desprecio tu forma de actuar en la vida y no hicimos el amor — se rió — Es solo sexo y nada más. Hay una diferencia entre las dos cosas. No es una mujer para hacer el amor. Si todo fuera igual no habría prostitutas.Aquellas palabras fueron tan fuertes que sintió una punzada en el corazón y se encogió un poco. Se le hizo un nudo en la garganta. Se sentía mal.— ¿Me estás comparando con una prostituta? -
Capítulo Seis - 6
Parte 6...— No voy a ir - ella insistió.— Oh, sí que lo vas" - él soltó una risita, — Aunque sea a rastras. Seguro que lo haras.— No me voy a vestir para esto"- ella se cruzó de brazos.— Está bien - se encogió de hombros — Va a ser una gran noticia cuando aparezcas completamente desnuda en el club - sus ojos se abrieron como platos y él se inclinó. Es parte de la diversión de la esposa.— ¿Y no te he divertido ya?" - preguntó sarcásticamente.— Esta diversión, si. - él ahuecó su barbilla. — Pero és privado. Ahora es diferente.— Yo… Yo no tengo nada que ponerme – había salido un par de veces pero no había pensado en comprar nada para dar un paseo.Él suspiró con impaciencia.— Con tanto dinero que tienes en tu cuenta, aparte de lo que pagué el día de nuestra boda, ¿me vas a decir que no tienes un vestido decente? - hizo una mueca de burla.Ella respiró hondo. Había sido una estupidez no haber comprado nada.— Yo... Yo no compré nada".— Sé que saliste, Nathaly" - se volvió
Capítulo Siete - 1
Parte 1...Kostas miró el reloj por cuarta vez desde que había terminado de arreglarse y ella aún no había salido del baño. Estaba más que curioso con su mujer encerrada durante más de media hora.¿Cuánto tiempo necesitaría para ponerse dos prendas?Nathaly había nacido rica, pero daba muestras de no estar acostumbrada a esa riqueza, lo que sería imposible puesto que era la única heredera de todo.La suma de dinero que había depositado era grande y, sin embargo, lo había retirado todo, pero no había comprado ni una sola prenda de vestir. El armario estaba casi vacío, a excepción de unos jeans deslucidos y otras prendas comunes.Seguramente su tío se había encargado de dejarla protegida y con sirvientes que la cuidaran de niña. Los criados debían de mimarla mucho para satisfacer a la muñeca de Yago Demétriou.Sin embargo, la encontró en la cocina con aspecto de plebeya comiendo un simple bocadillo que ella misma había preparado. Una cosa no encajaba con la otra. No tenía el mismo aspec
Capítulo Siete - 2
Parte 2...Era extraño darse cuenta de que aunque llevaba un traje que haría ordinario a otro, con ella la hacía aún más inocente porque venía de sí misma y no de lo que llevaba puesto.De nada había servido querer darle una noche de aburrimiento por hacerle perder la libertad. Ahora estaba más tentado que antes.Con esa cara, ¿quién iba a creer que era una cualquiera interesada en su dinero? Pensarían que era una chica inocente que no sabía vestirse, eso es.Nathaly se avergonzó al ver cómo la miraba Kostas. Desde luego, estaba acostumbrado a ir con mujeres que sabían llevar ese tipo de tacones y no con una que parecía tener problemas en los pies.Pero era él quien le había dicho que se las pusiera, así que que se acostumbrara a ver a una mujer con las piernas temblorosas.Ya había hecho un milagro con su maquillaje en el baño. No sabía maquillarse y aprovechó para echar un vistazo rápido a la caja del estuche que venía con instrucciones de uso para no perder la mano. No ha sido fáci
Capítulo Siete - 3
Parte 3...— No pude estar en la ceremonia, pero oí hablar mucho de la belleza de la novia.Se suponía que tenía que ser educado por Kostas. Seguro que era eso.Nathaly tuvo la ligera impresión de que su marido estaba molesto por el comentario, pero sabía que sólo era educación por ser su mujer. El hombre estaba con tres hermosas chicas a su lado cuando llegaron. Ella era ordinaria en ese medio.— No seas atrevido con mi mujer, Marcellus -él dijo — Ya sabes que nunca me gusta compartir nada que sea mío.Nathaly se sonrojó y no quiso ni mirar al hombre. Allí la trataba como si fuera de su propiedad. De nuevo.— En absoluto, amigo mío - asintió Marcellus — Sólo digo lo que me han dicho de que has tenido la suerte de encontrar a una chica tan guapa como ésta que ha caído en tus redes - se rió.Kostas miró a Nathaly y, tras un momento, sonrió y la abrazó. Era demasiado extraño y no sabía cómo reaccionar ante esta demostración. Se volvió tímida.Mirando a su alrededor se sintió menos averg