Un mes despuésEncontrar a Gustav se había convertido en una misión imposible para Curthwulf. Era como él supiera como moverse sin ser visto. Por lo que, seguían sin poder encontrar algún rastro que lo llevara a él y ya no había información de él o Gabriela en Corea del Norte. Por ello, estaban sin respuestas y mucho agotamiento por una búsqueda que no estaba dan do los resultados que ellos esperaban, pero, Charlotte seguía siendo atacada por alguien que no se mostraba nunca. Algo que molestaba a Curthwulf.— Si seguimos así, tendremos que buscarlo bajo del mar. Porque ya no queda un solo país sin revisar. — dice Carlos y Bratt suspira profundo.— No es de extrañar que no lo encontremos, el desgraciado es un cambia formas, pudimos tenerlo a un lado y seguiríamos sin saber que era él — dice Bratt y Curthwulf suspira profundo.— Estoy perdido. — murmura Curthwulf.— No tenemos respuestas, pero, por lo menos, no todo es mala noticia. Después de todo, Charlotte está bien y los bebés tamb
Charlotte terminó de entrenar, mientras quienes la observaban, no sabían cómo negarse al pedido de un lanzagranadas sin que ello los colocara en la lista de personas que quiere acabar Charlotte.— Deberías decirle tú que un lanzagranadas no está en discusión. — dice Terry empujando a Seok Min.— ¿Por qué debo decirlo yo?— Eres el inmortal. Si te dispara con una flecha, no vas a morir, pero, yo sí. Además, soy pacifista, no me gusta estar cerca de armas. — se excusa Terry.— Terry, te he visto sostener armas y disparar. — dice Seok Min y Terry sonríe.— Solo era porque la situación lo requería. Ahora, ve con ella y buena suerte. Aunque dudo que la necesites. La conoces hace mucho tiempo. Así que, dudo que no tengas conocimiento de como decirle las cosas. Yo… tengo cosas que hacer. — dice Terry y los doctores después de inclinarse, huyen con Terry.Seok Min suspira profundo y camina con ella hacia el interior del auto. Como todos los días, solo salía del hospital para entrenar en el bo
Narra CharlotteLa seriedad invadió por completo el rostro de Seok Min. Sabía que no se tomaría el trabajo de bromear con algo así y por ello, posiblemente, pensó en el peligro en el que estuve cuando me quedé sola en la entrada del hospital o todas las veces en la que pudo acercarse a mí y ninguno de los dos lo notó.— Ese desgraciado lo voy a matar. Te aseguro que lo voy a matar. — dice Seok Min.— Debo ir a ese lugar. — digo al recordar la amenaza.— Oh, no. Claro que no. No sé si lo has olvidado, pero, tienes un embarazo del que hemos tenido que idear miles de formas para que estes viva hasta ahora. Por lo que, arriesgar tu vida de esta manera, no me parece algo lógico, ¿no te parece? — pregunta Seok Min y yo entro en un dilema que no sé qué mejor decisión tomar.Mi hermana era lo único que tenía como miembro de mi familia. Sin padres u otros hermanos, ella era el único calor familiar con el que contaba cuando lo necesitaba. Y ahora, tengo a Lowell, Zaid, mis hijos e incluso Curth
De repente, la línea telefónica que había quedado en silencio, comenzó a llenarse de un ruido que solo me decía que Curthwulf estaba hiperventilando. Era evidente que estaba perdiendo la batalla e iba a explotar.— No necesitas preocuparte por…Curthwulf me cuelga y podría asegurar que está gritando con todas sus fuerzas. Angustiada, camino de un lado al otro y cuando pasan cinco minutos, él me regresa la llamada.— Entonces, ¿me decías? — pregunta Curthwulf con una voz bastante afónica.Era claro que gritó y mucho por el enojo que mi noticia le causó. Por lo que, yo medito si es buena idea decirle eso que, sin duda, recuerda.— Te decía que Seok Min va a hacerse cargo, para que Gustav crea que estoy en un lugar y mientras va a buscarme, los chicos tomen a mi hermana y después a mí. Ya sabes, como los vampiros son muy veloces, es un buen plan — digo de inmediato y Curthwulf suspira profundo.— Es una locura.— Necesito que esto no se lo digas a nadie, ni siquiera a tu Brittany, no qui
Narrador omnipresenteMientras Curthwulf leía el mensaje de Charlotte, Brittany caminaba hacia él. Ya habían sepultado a Adams y su padre. Pero, ella quería estar siempre al lado de Curthwulf, aunque fuera más de medianoche y él estuviera cansado.— Curthwulf — lo llama Brittany y el guarda su teléfono con disimulo.— Pensé que estarías dormida. — dice Curthwulf y Brittany emite un suspiro largo.— No puedo hacerlo. Pensar en todo lo que pudo sufrir mi padre en manos de ese hombre, mientras yo apenas sabia de su desaparición, me hace sentir mal. no puedo dormir pensando en eso.— Lamento mucho que hayas pasado por esto. Fue mi culpa no evitar la muerte de mi tío. Si hubiese acabado con Gustav en el pasado, no te habría hecho daño.— No es tu culpa. Es culpa de ese bastardo, ¿Cómo fue capaz de algo tan terrible, solo porque dije en que país estaba? Es una completa bestia. Una que cuando lo tenga frente a mí, no dudaré en matarlo.>> Le haré pagar el dolor que ahora estoy sintiendo y au
Un día antes del encuentro Mientras Terry y Seok Min, planeaban la mejor manera de que Charlotte fuera al encuentro sin salir lastimada, ella entrenaba con sus hijos la arquería e incluso había colocado en sus flechas, pequeñas bombas que explotaban el blanco al que disparaban apenas se tocaban.Para Zaid era como ver unos juegos artificiales y para Lowell, solo era ver una forma dulce de destruir todo. Porque con cada pequeña explosión, Charlotte daba pequeños saltos emocionada por lo que veía ser destruido.Los niños no sabían lo que iba a suceder, pero, sabían que se preparaban para algo grande, el entrenamiento rigurosos de velocidad de los vampiros, no debía ser por algún entrenamiento de rutina.— Con esto, terminamos los explosivos, así que, nos quedaría correr un poco. Necesitamos mejorar nuestra condición física. — dice Charlotte— También podemos hacer yoga. Porque correr no es algo que me emocione mucho. — dice Zaid sentándose en el suelo.— Podemos jugar futbol si deseas.
Brittany estaba segura de que estaba manejando muy bien a Curthwulf. Pero, para hacer más creíble su preocupación y miedo, siguió llorando hasta que lentamente se alejó del pecho donde siempre quería estar.— Lamento si te he metido en problemas. Es solo que tenía miedo de que algo te pasara. Como te llamé y no me contestaste, vine a donde marcaba el rastreador, pensando que algo malo te había sucedido. Lo siento. — dice Brittany limpiando sus mejillas.— No puedes hacer las cosas así sin pensar. Recuerda que estamos frente a una persona peligrosa. Así que, desactiva ese rastreador y vuelve a casa. Estoy bien aquí.— ¿Por qué estás en un lugar tan desagradable? ¿Acaso quieres colocar una trampa a alguien? Porque sin duda, ese no es un lugar para tener una reunión amigable con alguien. — dice Brittany y Curthwulf guarda silencio.— No importa el motivo por el que estoy allí, no vuelvas, por favor. Regresa a tu casa, mantente tranquila, trabaja si quieres hacerlo, pero, vete, por favor.
Al día siguiente Todo estaba listo, la ansiedad se sentía demasiado fuerte entre los implicados. Pero, más entre Gustav. Había preparado todo para enfrentarse a Charlotte y los hombres lobos, pero, la reciente aparición de los vampiros, complicaba todo. Podía fingir ser uno, pero, tener la fuerza, velocidad y habilidades, era otra historia. Una que le daba muchas desventajas. Por eso, estaba pensando si era buena idea seguir con eso. Después de todo, no quería morir.— Tendré que hacer algo al respecto. — dice Gustav, mirando como los vampiros se hacen cargo de cada pequeño aspecto de seguridad del lugar.Alrededor de cien vampiros están en el lugar que ya conocen a la perfección, porque se habían esforzado en grabar cada mínimo detalle del lugar. Gustav, había intentado entrar como animal, pero, ni siquiera se permitía a una rata entrar, la seguridad era máxima.— La muy malnacida quiere alardear de que tiene una especie poderosa de su lado. Pero, yo mismo le voy a arruinar todo el