El entrenamiento matutino continuó, pero no fue más que una sesión de besos en el campo.

"No necesitas más práctica". Murmuró Conri entre besos.

"Podemos entrenar con los demás después de la escuela". Añadió Alaric desde sus piernas.

"Diosa, ¿qué me están haciendo?" Preguntó Thea.

"Haciendo que te vengas". Le susurró Kai al oído, mientras besaba su cuello.

Luego, se ducharon de la misma manera que solían hacerlo.

Esa mañana, Thea decidió no preparar su té, pensando que si los chicos la atacaban mientras lo usaba, no tenía sentido.

Ya en la escuela, los trillizos continuaron con sus juegos, pero Thea logró escaparse de ellos antes de la tercera hora y encontró a Misty.

"Oye, ¿estás ocupada este sábado?" Le preguntó.

"No". Respondió Misty.

"¿Quieres salir conmigo?"

"Claro". Accedió la chica con una amplia sonrisa, cruzando los brazos detrás de su espalda.

"Perfecto. Dame tu número de celular y te pasaré los detalles más tarde".

Después de que intercambiaron números, se