Te recomiendo esta gran historia, date la oportunidad de leerla, no te arrepentirás. Graciela y Nicolás, una relación tormentosa que se da entre él amor y él odio, donde un sólo beso los llevo a tocar el cielo. Libro: Entre el Amor y el Odio Autor: Diosa del Amor
Ava Janssen New York Mi gran día había llegado y no podía estar más emocionada, después de los tres días de capacitación, de conocer a las compañeras que habíamos quedado de convivir aun si ni nos veíamos en el trabajo. Ese día en cuanto entré a la empresa DeCostello supe inmediatamente que iba a conocer a mi nuevo jefe, hoy dejaba atrás ese doloroso pasado y hoy moría también aquella Ava que sufrió por el engaño de un poco hombre que no solo no me valoró sino con el que nunca debí perder mi tiempo. De los errores se aprende afortunadamente y yo de los míos había aprendido a que debo empezar a pensar en mi primero. Solo yo sé hasta dónde puedo querer a una persona y hasta donde me quiero a mí, y me quiero mucho más que a cualquier otra persona y desde ahora sé que no debo entregar todo mi amor nadie que no se lo merezca. –Buen día señorita Janssen – Me dijo un hombre vestido muy elegante en cuanto pasé la puerta – Haga el favor de acompañarme a la sala de juntas, hoy haremos la pre
Ava Janssen New York Lo que me faltaba que Don Eryx fuera de esos jefes que todo lo exigían, pero creo que se iba a topar con pared, conmigo las cosas eran diferentes, solo se tenía que pedir lo que se deseaba, no era necesario ejercer su autoridad cuando las cosas se podían hacer de manera eficiente sin necesidad de demostrar su rango o imponerlo. Yo creo que las cosas se ganaban no se exigían. –Muchas gracias señorita Ariana, verás que no le daré muchos problemas. He hecho esta clase de trabajo antes y en pocos días no tendrá ni que verme si no quiere. Le juro que le ahorraré el que esté viniendo a la oficina y tendrá más tiempo para atender sus deberes. –Pero si quiero, además de eso seremos amigas – Sentenció ella – Te dejo Ava para que Don Eryx y tú puedan hablar. –Muchas gracias por todo. –Por nada. Ella se retiró y se fue a sentar con su celular al otro extremo de la sala de juntas, algo muy normal para los jóvenes de su edad cuya vida está en el teléfono. Me alegré de sa
Eryx DeCostelloNew yorkEste lunes sentí que volvía a la vida y de pronto mi mal humor y mi estado nefasto de ánimo, se habían transformado en una alegría inexplicable que brotaba desde lo más hondo de mi alma. Cuando la tuve al frente mi reacción fue tardía, porque me quedé estático en mi sitio.—Eryx, voy a subir con Ava, para ir explicándole sus funciones con calma — Dijo mi hermana — ¿Tú vas a salir?—Sí, pero no tardaré. Ahorita que regrese las veo. ——Está bien.La había visto, la había vuelto a encontrar y ahora íbamos a trabajar juntos. Por un impulso salí de prisa de la empresa y fui a una floristería para comprarle un ramo de flores y unos chocolates, quería tener con ella un detalle de bienvenida.Por un momento, quise ayudar a mi hermana con unas cajas grandes que llevaba para llevarle a Ava, eran documentos y expedientes de clientes que llevaban una eternidad sin ser debidamente organizados. Después de leer rápidamente en un tiempo que me acababa de dar, el currículo de
Eryx DeCostelloNew yorkMe gustaba hacer enojar a mi hermana, pues sabia donde picarle, su orgullo de ser una de las más jóvenes y mejores ingenieras no lo podía comparar con un ingeniero de sistemas.—Muy gracioso Eryx, te pasas. Soy ingeniera de software, no de teléfonos y bien que lo sabes — me miró con malos ojos — Regreso.Ariana se levantó del piso, dónde solo ella sabía lo que estaba haciendo con los cables del teléfono de Ava queriendo hacer que funcionara.Yo me quedé por un momento ahí solo con ella y estaba sin palabras, era raro para mí sentirme así ante la presencia de alguien, cuando era yo quién las dejaba siempre sin palabras. Era como si me hubiera hipnotizado y no podía dejar de verla.—Su hermana es una chica muy linda, Don Eryx. Ella también me ha dado un regalo—Sonrió Ava— Además de eso, me ha ayudado muchísimo.—Sí, lo es. Ella es linda pero a veces puede ser atosigante. Por favor, te pido paciencia con ella, ya sabes cómo son ahora los jóvenes.—A mí me parece
Ava Janssen New york —Listo Ava, ya está todo organizado para que empieces a trabajar. Habia estado anotando en una libreta los pormenores de la agenda de Eryx, de verdad el trabajo llovía a cantaros, con tantas empresas a su cargo era casi imposible mantener todo en orden, pero eso no me haría desistir, tanto era así que estaba segura que los días pasarían volando y ni cuenta me daría. —Muchas gracias Ary, desde ahora mismo me pongo a ello. —Te explico el mecanismo. En lo que ella me explicaba cada detalle del funcionamiento de su programa, absorbo la información, tomo nota de los pasos y en cuanto me permita sentarme al frente de la computadora estaré haciendo mi trabajo a la perfección. —Eso es todo, cualquier cosa, estoy aquí mismo. —Muchas gracias. Era poco probable que la estuviera molestando por algo que ya se habia grabado en mi memoria, pero no le iba a decir eso. Me senté en la silla, tomé una carpeta y fui archivando por palabras claves, así me mantuve por unos min
Ava Janssen New York Estando dentro de la tienda en dónde compré los chocolates, me entretuve un poco, viendo todas las golosinas que ahí vendían. Compré también una bolsa con gomitas y vi unas hermosas cajitas de música con golosinas y un peluche miniatura. Sin pensarlo, compré 2 una para mí y otra para Ariana. Ella había sido muy amable conmigo y yo quería ser también agradecida con ella. Salí de la tienda y volví a pasar por fuera de la empresa DeCostello, su imagen llegó a mi mente como si lo tuviera al frente, ese hombre se me ha metido en la piel. Caminé cruzando Central Park, hoy no había tenido la oportunidad de hacer ejercicio y quería llenar de aire mis pulmones por lo que caminé un rato por ahí y luego me senté en una banca simplemente a ver él lugar de noche, hasta que mi celular comenzó a sonar en mi bolso. —Hola Ava, es tu primer día de trabajo y no me llamas para contarme de él —Decía la voz emocionada y loca de mi amiga Janice —Dime ¿Qué tal está él tipo en vivo? En
Ava Janssen New York —Pobre chica, sus dos hermanos celosos. —Así es, demasiado sobre protectores. —Lo bueno es que ya va salir Caleb de casa y no lo tendrá todo el tiempo vigilando. Janice se iría a vivir a una casa que quedaba cerca de la de sus padres, fue un regalo de su abuelo antes de morir. —Muy bien amiga, yo te dejo. Mi prometido ha venido por mí para ir a cenar con uno de sus primos y su novia. —Gracias por llamar Janice y que te diviertas mucho, saludos a Caleb. —De tu parte, que estés bien Ava. Seguí sentada un rato en donde estaba y luego al ver que muchas personas salían a correr me dio una idea. Me levanté y me fui caminando a mi hotel, para subir a mi habitación y ponerme un conjunto de ropa deportiva, que afortunadamente siempre llevaba en mi equipaje a dónde quiera que saliera. Tomé mi reproductor de música y salí de mi habitación, para bajar al lobby. —Buenas noches joven —Me dirigí al chico de recepción— Sé que aquí en éste hotel hay gimnasio, ¿Me podría i
Eryx DeCostello New York Su rechazo me habia dolido en el alma, no veía que tenia de malo acompañarla a su casa después de haberse quedado más de la cuenta en el trabajo. Se me habia grabado el nombre del hotel donde se estaba hospedando y estaba más cerca de lo que me hubiera imaginado. Pero yo no la iba a obligar a que aceptara una invitación a llevarla. Habia traído conmigo su curriculum, estaba concentrado en la fotografía que hay ponía, recordaba la primera vez que la vi, cuando me salvó la vida y lo preocupada que habia estado por mí, sin poder evitarlo sonreí, me habia encantado su belleza y lo que me cautivó fueron sus bonitos ojos esmeralda que combinaban a la perfección con su pelo castaño rojizo. Pero en realidad lo que me habia cautivado era su inteligencia. A medida que iba pasando el día me pude dar cuenta que el trabajo lo tenía casi terminado y si me ponía a hacer cuentas, Marla se quedaba atrás, Ava, trabajaba a una velocidad extraordinaria y por lo visto el progra