Ava DeCostello New YorkPasaron unos días en los que, la salud de Ary comenzaba poco a poco a recuperarse y afortunadamente, todo quedó en un susto y ella, estaría ya mejor, pues hoy la dieron de alta y aunque Gaia, le insistió mucho, que se fuera a quedar a su casa, para que ella misma la cuidara, junto con Tommaso, pero ella no quiso y se fue a dónde vivía con mi cachorro.Eryx y yo, la fuimos a ver ese día, así como lo estábamos haciendo todos los días, que ella estuvo en el hospital. Eryx, le había comprado un muñeco de peluche gigante y al llegar a su casa, el peluche gigante, no cabía bien, por la entrada de la puerta, iban a tener que emplear una maniobra para que se pudiera.–Hola Philip – Lo saludó Eryx – Cuñado, ayúdame por favor. Compré este amigo, para Ary y me es difícil meterlo.El enorme peluche, había venido apretado, amarrado y en cuanto lo soltamos, se desparramó por completo en el piso del estacionamiento y luego para trasladarlo, al ascensor fue otro problema, y y
Ava DeCostello New YorkFuimos a la cocina, mi cachorro y yo, la preparación de jugo, no era para nada normal, yo pensaba que se colocaban los arándanos en la licuadora y ya, pero tenía su truco.–Veo que tienes preparado todos los ingredientes.Philip, ya tenía, el jugo de naranja, el de limón y los arándanos hidratándose, tomé una cuchara y saqué algunos para poder comerlos, estaban fríos y deliciosos.–Ava, ya te he preparado algo para el antojo, mi sobrina, se va a quedar encantada.Philip, sacó del refrigerador, una copa, de arándanos, con yogurt, le puso un poco de jugo de limón y una rebanada de naranja, y me la entregó con una cuchara, el cual recibí muy agradecida. –Gracias cachorro, tu sobrina y yo te lo agradecemos.Tomé una pequeña cucharada y me la llevé a la boca, estaba delicioso, y creo que hasta emití un sonido de gusto, la combinación era perfecta y el sabor del jugo de limón mezclado con el yogurt, le daba un toque agridulce a los arándanos, cosa que sola había p
Eryx DeCostelloNew YorkTres meses de lo que pasó con Ary y con el resto de las personas, que resultaron intoxicadas por las bebidas adulteradas de la fiesta de los Becker, mi hermana afortunadamente, estuvo ya mucho mejor de salud. Ella estaba radiante y muy mejorada y ya podía hacer sus cosas por ella misma, casi con normalidad. Philip, había estado muy pendiente de ella, cuidándola y ayudándola mucho a recuperarse y con el poder de su amor, ella estaba mejor, tanto así que ayudó a coordinar la fiesta que hicimos, para celebrar el embarazo de Ava.–Eryx, mi amor – Me llamó Ava – Ven, por favor que ya han llegado tus hermanos.–Enseguida voy amor – Le respondí – Estoy terminando de acomodar unas cosas. Dame un beso, mi morena hermosa.–Te doy los que quieras, mi dios griego.Mi esposa y yo, nos dimos un apasionado beso y después, fui con ella a recibir a mis hermanos y los invitamos a pasar al jardín de nuestra casa, dónde estaba llevándose a cabo esta celebración. Mi madre y la mad
Eryx DeCostelloNew YorkMis abuelos, se unieron a la celebración de toda la familia y eso incluía el baile y el tomar bebidas, venían muy relajados de Italia. Mi abuelo, tomó a mi esposa y se puso a bailar con ella, me alegré por eso pues entre Ava y Janice, ya me habían dejado muy cansado y cuando me disponía a irme a sentar, mi abuela Antonella me tomó del brazo para que bailáramos.–Eryx, tú me debes muchos bailes – Mi abuela, me reclamó – Así que, me vas a ir pagando de uno por uno.–Lo siento abuela, solo uno – Respondí – Estoy cansado, Ava siempre me deja así de tanta actividad, parece que no se cansara nunca.Yo estaba seguro que la abuela no me iba a querer soltar, hasta que bailara con ella, las canciones que quisiera y yo no me podía negar.–Dichosa tu esposa que, tiene un embarazo tan bonito – Dijo mi abuela – No que, el que yo tuve con tu padre, fue desastroso. Estuve en cama, casi los 9 meses, fue un embarazo de alto riesgo.Tomé a mi abuela, en el centro de la pista par
Ava DeCostello New YorkMe la estaba pasando de lo lindo en la fiesta, organizada en mi honor por mi embarazo, aquí estaba toda la gente que quería, mis padres, mi hermano, mis amigas, Ary y Janice, no tenía nada más que pedir a la vida, hasta Whisky mi perro, andaba aquí haciendo de las suyas, insistía en querer que lo cargara Janice y por supuesto que, mi cachorro, tuvo que evitarlo.–Whisky perro latoso – Philip, lo sujetó por el lomo – Ven acá, que vas a dañar a Janice y nos la cobrarán como nueva y ya está de edad avanzada.Me preocupaba que algo le pudiera pasar al bebé, Whisky, no medía su fuerza y pensaba que todavía era un perro pequeño para que lo siguieran cargando y eso ya no era posible, pesaba demasiado.–Óyeme cachorro, tampoco soy de edad avanzada – Se quejó Janice – Además, yo no me opongo a que me lama el can, es Ava quién se pone nerviosa porque lo haga.–Estás embarazada amiga y no sería nada grato para mí, tener que llamar a Caleb, para decirle que mi perro te ha
Ava DeCostello New YorkYa estaba conociendo bien a la familia DeCostello, que ahora también era mi familia, nos estábamos acercando a dónde estaban todos cuando mi suegra, se acercó a nosotros con una cara de espanto.–Ava, que bueno que te encuentro nuera querida – Me dijo Gaia – Es que, necesito que llames al esposo de tu amiga. Le ha dado un dolor muy fuerte en el vientre y está tumbada en una silla de alberca, al parecer ya va a dar a luz y tu madre, le ayudará a tener a su hijo.– ¿Qué? No, pero si le faltan unas cuantas semanas – Dije sorprendida – Vamos con ella, tengo que ver como está.Philip y Eryx se miraron a los ojos y yo los miré a los dos, pensando que ellos, habían invocado esto, pero, por otro lado. Era verdad, Janice venía en un avanzado estado de embarazo y era muy posible que esto pasara, pero de eso a que mamá, le fuera a ayudar a tener al bebé, me parecía algo muy descabellado, no sé pensé que, sería mejor llamar a la ambulancia.Pasamos la multitud y mi madre,
Eryx DeCostelloNew YorkMi madre llegó a sentarse con todos los caballeros, como si hubiera visto a un fantasma, algo que nos causó a todos cierto grado de risa. Mi madre, nunca se asustaba por lo general, pero ahora, estaba más asustada, que cuando Ary, había estado grave y eso era decir mucho. Mi padre, por supuesto, se levantó de dónde estaba sentado y abrazó a mi madre.–Gaia, pero ¿Qué pasó, mujer? – Le preguntó papá – Has tardado algo allá, además ya había llegado tu amiga Lauren, no me digas que pasó algo malo, con la amiga de Ava.–Amor, es que había demasiada sangre y esa pobre mujer estaba en un grito de dolor y angustia – Mi pobre madre, estaba en un shock – Recordé cuando nació Eryx, que no llegué al hospital y que Antonella, lo trajo al mundo. Yo sentí que moría con todo y mi hijo y esta pobre mujer, tan lejos de su país y sin el marido aquí presente.– ¿Qué? – Pregunté extrañado – Sí que fueron unos tacaños, los dos. Con tanto dinero y por no pagar un hospital, mi pobre
Eryx DeCostelloNew YorkLa hospitalidad de mis padres era excelente, nunca dejaban ir a alguna persona si se encontraba en algún mal estado, por lo que no hubieran permitido de ninguna manera que Janice, se quisiera mover de su casa.–Por nada mi querida nuera – La abrazó papá – Pero, ya no aguanto la curiosidad, por favor, ve a preguntar, si ya podemos ir a ver a ese niño.–Claro que sí, voy ahora mismo a preguntar – Dijo Ava – Vamos Leslie, ya que has visto todo y hasta dado tu reportaje de los hechos, acompáñame.–Claro, Ava.Mi mujer maravilla y Leslie, se alejaron para ir a preguntar, si podíamos ver a Janice. Todos estábamos ansiosos de conocer a su hijo y, además, yo moría de ganas de ver, cuando se le diera el trajecito de Yankee y la cara que iba a poner Janice. Por eso, no era bueno decir que uno no haría una cosa, pues termina pasando.Ella no quería que su hijo naciera aquí y su hijo parece ser, que hasta para llevarle a Janice la contraria, se empeñó en hacerlo, pero era