"Hola, debes ser nuevo aquí". Una chica con un elegante vestido de cóctel saludó a Evan en el bar de su hotel. En lugar de atender sus correos electrónicos y descansar durante la noche, se dirigió al bar para ahogar sus penas. Al escuchar a la mujer a su lado, Evan levantó la mano, mostró su anillo de casado y dijo: "Estoy casado". "Oh, qué pena. Aunque eso no debería detenerte...". "¡Aléjate de mí, maldita sea!", respondió Evan. Fulminó con la mirada a la mujer que se le acercaba. Sí, habían pasado muchos años, pero aún llevaba su anillo de casado. En ese momento, Evan sintió lástima por sí mismo. Shantelle ya lo había superado. Ahora tenía un hombre especial en su vida, pero él seguía aferrado a ella. ‘Lucas…', repitió el nombre en su mente. Qué afortunado era. 'Te amo’. Evan recordó las palabras que Shantelle le dijo a Lucas. Eran las mismas palabras que Shantelle solía decirle solamente a él, las mismas que ella repetidamente le dijo y, sin embargo, él nunca se lo di
"Shanty, yo te vi crecer. ¿Nos olvidaste de repente?", preguntó Clara. Shantelle sintió que todos sus colegas la miraban de repente. Su superior le dirigió una mirada particular, y ella sabía exactamente lo que estaba pensando el Doctor Hale. "Shanty…", habló por fin Erick Thompson. Se obligó a erguirse en la cama, haciendo que su cánula nasal se apretara contra su cara. Eso hizo que Shantelle se acercara instintivamente para tratar de ayudar. "Shanty, olvidemos el pasado", dijo Erick. "Han pasado muchos años". "¿No me reconoces? Soy yo, tu tío Erick. Solía cuidar de ti cuando eras pequeña". A Erick se le llenaron los ojos de lágrimas y preguntó: "¿Sigues enfadada con nosotros, Shanty?". "No…" Shantelle no pudo evitarlo. Ya no le importaba que sus compañeros de trabajo estuvieran allí. Lloró ante las palabras de Erick y le ofreció un abrazo. "Nunca estuve enfadada contigo, tío. Nunca lo estuve". Habían pasado muchos años. Los Thompson intentaron olvidarse de los Scott, p
"Mami, se acerca el fin de semana", dijo Lucas. Le brillaron los ojos cuando la miró en el asiento trasero del coche. Shantelle sonrió débilmente y dijo: "Así es". "¿Me hablarás de mi papi?", preguntó Lucas. "Sí, lo haré", respondió ella, pero su corazón se aceleró ante ese pensamiento. 'Puede que incluso llegues a conocerlo’. "¿Cómo es papi?", preguntó Lucas. Shantelle soltó una risita y respondió: "El fin de semana. Hablemos de él el fin de semana". Vio que su hijo ponía los ojos en blanco y volvió a reírse. Decidió ceder y hablar un poco: "Él... tiene unos padres asombrosos, tus otros abuelos". "¡¿Tengo otra abuela y otro abuelo?!", gritó Lucas emocionado. Shantelle asintió. Dijo: "Sí, y estoy segura de que les encantaría conocerte". "¡Ya quiero conocerlos! ¿Cuándo podré verlos? Cuéntame más. ¿Cómo son?", preguntó Lucas ansioso. "El fin de semana", recordó Shantelle. "Este fin de semana, cariño". Lucas gruñó y dijo: "¡Bien! Será el fin de semana". Shante
“¿Te casaste con Nicole?”. La pregunta hizo que Evan se inclinara hacia atrás. Respiró hondo y pensó que por fin había llegado el momento. La miró a los ojos y dijo con rotundamente: "No, no me casé con ella y nunca tuve intención de hacerlo". "¿Entonces, qué es ese anillo que llevas en el dedo?", preguntó ella. Por un instante, Evan vio un destello de esperanza. El hecho de que Shantelle fuera tan observadora como para fijarse en el anillo podía significar que él aún le importaba. Rápidamente, se quitó el anillo. También rebuscó en el interior de su camisa, dejando al descubierto un collar, con un anillo similar que colgaba de la cadena. Le dio los anillos a Shantelle y confesó: "He estado llevando nuestros anillos todo el tiempo. Nunca me quité el mío". Evan estaba seguro de que ella había visto el grabado del anillo, pero Shantelle no reaccionó. Se quedó mirando los anillos durante unos segundos y luego se los devolvió. Pronto preguntó: "¿Por qué llevas ese anillo? Ya e
"Doctor Hale, ¿puedo tomarme el resto del día libre? Llamaron de la escuela. Lucas está enfermo y necesito asegurarme de que está bien", solicitó Shantelle a su superior. "Está bien, Doctora Shant. Viniste a realizar una operación antes de las cinco de la mañana. Solo deja el teléfono del trabajo encendido por si tenemos alguna urgencia que el Doctor Park no pueda atender", dijo el Doctor Hale. Shantelle asintió. No tuvo tiempo de pedirle al chofer de la familia que la recogiera, pero le indicó que la buscara en la escuela. Cuando Shantelle había salido del baño de las damas, recibió una llamada. Sus ojos se abrieron de par en par al ver que la llamada era de Keith. Primero miró alrededor del restaurante y, tras notar a Evan todavía en su asiento, se quedó en un rincón y atendió la llamada. "Shanty, ¿dónde estás?", preguntó Keith en la otra línea. "Estoy en el aeropuerto de Warlington. Tenemos que hablar". Ella suspiró y respondió: "Estoy almorzando con Evan...". "¿Qué?
“Es tuyo”. Las palabras de Shantelle retumbaron en la cabeza de Evan. No pudo moverse y se quedó mirando fijamente a Shantelle. "¿Mami? ¿Quién es él?". Evan escuchó la voz del niño y se dio la vuelta para verlo. Se encontró con un par de ojos de color marrón parecidos a los suyos. Tragó saliva al darse cuenta que estaba viendo una versión más joven de sí mismo. Una vez más, se quedó petrificado. No sabía cómo sentirse. Se sintió aliviado de que el chico no fuera de Keith, como había dicho su supuesto amigo, pero también se sintió completamente engañado. ¿Cómo podía Shantelle haberle ocultado a su hijo durante todos estos años? "Shanty, por favor. Hablemos de esto". Evan podía escuchar la voz de Keith detrás de él, pero no se atrevió a apartar la mirada del niño. "Ahora no, Keith. No quiero hablar contigo ahora mismo". Evan pudo distinguir las palabras de Shantelle. Shantelle pasó junto a Evan y éste se dio cuenta de que Keith intentaba agarrarla. Al instante, Evan actuó
Después de ayudar a Lucas a darse un baño tibio, Shantelle le secó el cabello. Lucas ya estaba en pijama, mirándose al espejo con una expresión triste. Preguntó débilmente: "¿Cómo que soy de él? ¿El hombre de la escuela?". Shantelle apagó el secador de cabello y sonrió al espejo. Dijo: "Déjame llevarte primero a la cama". Cuando Lucas se sentó en la cama, Shantelle le tomó primero la temperatura. En la escuela ya le habían dado medicamentos para bajar la fiebre. Solo tenía que observarlo durante uno o dos días antes de decidir si le tenían que hacer pruebas de laboratorio. "¿Me enseñas la lengua?”, preguntó Shantelle. “Parece que está bien. Déjame mirarte los ojos otra vez". Después de examinarlo a fondo, se giró hacia la mesilla de noche y sugirió: "Tomate este vaso lleno de agua. Más tarde, después de descansar, tienes que tomarte otro. Con suerte, mañana se te bajará la fiebre". Lucas hizo lo que su madre le dijo. Luego la miró y dijo: "Estoy listo para escuchar, mamá".
"Shanty, querida. ¿De qué hablaron Evan y tú? No me dice nada. A veces sonreía y a veces volvía a ser el mismo sombrío de siempre. ¿Qué pasó ayer?", preguntó Clara mientras Shantelle revisaba a Erick dentro de la sala de cuidados intensivos. Erick Thompson seguía sedado. El protocolo de su hospital era que un paciente operado a corazón abierto tenía que descansar con un respirador por un periodo de doce a veinticuatro horas. De momento, había superado el periodo de observación y le iban a extubar. "Él... ¿no te ha hablado sobre Lucas?", preguntó sorprendida Shantelle a Clara. Clara frunció el ceño. Preguntó: "¿Sobre tu novio? ¿Es eso lo que hablaron? Espero que no le haya dado un puñetazo en la cara a Lucas". Shantelle se rio entre dientes. Respondió: "No, no se atrevería a darle un puñetazo en la cara a Lucas". Se sentó junto a Clara y reveló: "Tía, no llegamos a terminar nuestra conversación debido a una emergencia. Seguramente por eso no te lo ha dicho todavía. Pero, ya