Capítulo nueve. Quiero todo de ti. “Narra Chloe” —¿Serás mi amante? Responde Chloe — Maxen me provoca como solo él sabe hacerlo —. Sí viniste a la dirección es por algo, porque algo estás dispuesta a darme. ¿Sabes o siquiera te imaginas lo que quiero de ti para salvar tu status social y la fortuna de tu marido? —No — contesto después de tragar saliva con dificultad—, pero me lo puedes decir, así me hago una idea. Ilumíname Maxen. —Quiero todo de ti, mi querida cuñada. Quiero tu rendición. Se hace una pausa necesaria entre nosotros. No sé cual de los dos la impone pero a ambos nos viene bien. Asumo que mientras yo elijo con cuidado mis siguientes palabras, él sopesa la forma en que abordará lo que sea que le suelte. Entonces y solo por eso le digo de forma ambigua: —Define “rendición”, Maxen. —Harás cada cosa que te pida y solo tú tendrás contacto conmigo, para lo que yo disponga, desde luego — añade apostillando. —¿Estás tratando de vengarte de mí, de tu hermano o de
Capítulo diez. La amenaza de mi esposo. “Narra Chloe” Como se está haciendo habitual la vuelta a casa es reflexiva. No puedo dejar de preguntarme qué quiere hacer Maxen exactamente. Hay una diferencia entre los dos hermanos Coleman y esa es principalmente que uno quiere desaparecer al otro pero el hermano bueno — creo que a estas alturas está claro a quién me refiero —, tiene una intención desconocida por mi detrás de su intención de venganza; precisamente porque no sé en qué consisten sus planes. Mientras conduzco me doy cuenta de que puedo estar caminando sobre una cuerda floja de la que tiran en cada extremo los dos hombres que rigen mi vida... esta es una misión peligrosa que puede salir mal avance hacia el extremo de la cuerda que elija. En cualquiera de los dos casos ahora mismo estoy en riesgo. Pronto estoy aparcando el coche cuando veo a Sergi de brazos cruzados en e fondo del garaje esperándome. Resoplo al ver que su rostro de asco no es conciliador para nada. No he pod
Capítulo once. La junta de accionistas "Narra Chloe" Llegar a la empresa de mi marido para verme con mi cuñado ha sido muy raro. La gente me saluda como corresponde pero es irónica mi situación. La junta de accionistas está esperando a que entre Maxen para comenzar y yo tengo la sensación de no saber qué hago aquí vestida de ejecutiva cuando no soy más que una marioneta. Hija sustituta de mi padre, esposa florero de Sergi Coleman y próximamente el saco de boxeo de Maxen Coleman. —Buenos días — Maxen llega a la sala acompañando de una mujer trajeada, supongo que es su secretaria. Ambos se sientan en los puestos vacíos de la mesa y la reunión comienza —. Bien, no tengo mucho tiempo y el asunto es simple. Se los pondré fácil señores, yo les salvo el pellejo, les evito la ruina monetaria y social, pago sus deudas para que puedan conservar sus anheladas propiedades. En resumen, les mantengo la buena vida que llevan y sin manchas en el expediente policial y encima les inyecto el ca
Capítulo doce. ¿Te acuestas con mi hermano? “Narra Chloe” Hermano contra hermano se enfrentan con la mirada en silencio mientras que a mí un escalofrío repentino me recorre el cuerpo. No sé por qué me aparto de mi esposo una vez que me las arreglo para librarme de su agarre y avanzo hasta posicionarme al lado se Maxen. Sergi por su parte deja ver una de sus aterradoras sonrisas y pasea la vista de su hermano a mí. —Muy bien hermano — vuelve a emplear la ironía, pero esta vez sus palabras parecen cuchillos afilados que van directamente a mi rostro y me cortan la piel de un simple roce —, te prestaré a mí esposa si tanto la necesitas. Pero me la devuelves en una pieza, ¿eh? Sergi se acerca, toma mi mano y besa el dorso de la misma. Un beso que me sabe a hiedra venenosa inyectada en las venas. —Nos vemos en casa, mi amor. No trabajen demasiado ustedes dos. Y con la misma alegría fingida que llegó, Sergi se marcha. El resto de los accionistas terminan de firmar el contrato y una
Capítulo trece. Eres una mentirosa. "Narra Chloe" —Respóndeme Chloe — Maxen insiste con vehemencia en obtener una respuesta aunque realmente no sé que es lo que espera de la misma —. ¿Con él te acuestas? Sus palabras me calientan el cuello, incluso mueven mi cabello suelto y me erizo ante su tacto. Solo me atrevo a negar, no voy a mentirle pero tampoco lo diré en voz alta. —He respondido por inercia — musito de repente —, eso no es asunto tuyo. —Todo lo que te pregunte es asunto mio y vas a responderme — me empuja contra la puerta y se pega a mi por detrás, pone una mano abierta sobre mi estomago dwsnudo y la otra palma impacta contra la puerta del baño, los dos jadeamos y él murmura en mi oído —. ¿Si yo te hiciera mía ahora mismo, aquí y así desde atrás y con fuerza estarías muy acogedora entonces? A pesar de que su actitud me ofende y me hiere no puedo evitar que active esa parte de mi cuerpo que lleva años escondida, esas sensaciones que me hacen sentir una mujer completa. Le
Capítulo catorce. Hagamos negocios y nada más."Narra Chloe" El silencio tiene que acabar. Sergi no es tonto y los dos llevamos bastante tiempo así. Supongo que cada uno está pensando en su propia estrategia para salir de este momento en el que nos hemos metido pero yo me mantengo en mi postura y entonces le oigo decir... —¿Qué haces aquí, Chloe? ¿Quién se supone que eres ahora, qué quieres de mi? Está claro que ya tu marido está en mis manos y tu también, ¿por qué haces esto, Detrás de sus preguntas yo no sé qué decir, cómo explicar lo sucedido y mucho menos cómo lograr que él sepa que yo quiero su ayuda para salir de mi miserable vida. No sé cómo decirle que no tengo opción y que todo lo que piensa de mi no es. Está claro que no le importa quien nos oiga y al menos unos minutos hago silencio para ver qué digo... que digo para que Sergi no vea mi intención y Max me crea. Y de repente lo digo... —Estoy a tu merced —confieso directamente —. Si me ayudas te daré lo que me pidas.
Capítulo quince. Tú eres mi veneno. "Narra Chloe" No me niego. No puedo hacerlo. Ni él me lo permite ni yo tampoco le rechazaría. Desde la última vez que nos besamos hace seis malditos años no he vuelto a sentir lo que siento ahora que sus labios rozan los míos suavemente. Ahora que su boca mordisquea la mía. Ahora que mis manos se pierden en su pelo y mis jadeos se unen a un ronco gemido suyo. Una pequeña caricia que me hace suspirar de placer. Sus manos bajan a mis nalgas, caminan por mi piel hasta apretar con ansias y levantarme en mi peso. Esas manos que me abrasan la piel me alzan encajandome en su cintura y caminando conmigo hasta que me lleva a la mesa. Mi cuerpo le responde sin problemas, mis muslos le apresan y mis dientes se clavan en su labio inferior queriendo extender este momento hasta que me muera de tanto éxtasis. —¡Dios...! Me oye gruñir cuando baja a besar mi cuello, acaricia mis muslos con rabia, con hambre. Y de pronto se aleja...rompe el encantamiento. —
Capítulo dieciséis. Mi espo, mi carcelero. "Narra Chloe" —Creo que tenemos que hablar — resoplo al ver a Sergi en medio del salón de nuestra casa. O más bien de la suya —. Por lo visto has sido más sincera de la cuenta con mi hermanito. Me encamino al sillón al frente del suyo. Me dejo caer agotada y lanzo el bolso a mi lado antes de volver a resoplar para contestarle. Esto acaba de empezar y estoy harta de los dos. —Si alguna vez pensaste que Maxen es imbécil estabas dejando claro que el idiota eres tú. Puedo ver venir su reacción pero no me muevo. Estoy tan casada que casi quisiera que me matara a ver si esta pesadilla acaba de una malditą vez. Me toma el rostro entre sus abusivas manos y me arrastra por el sofá hasta ponerse del todo sobre mi y le sostengo la mirada torcida, menos de lo que merece. —Estás tensando demasiado la cuerda y poniéndome a mi límite — martilla cada palabra entre sus dientes. Está furioso —. Tienes un maldit0 deber que cumplir y no veo que lo estés c