La tranquilidad se apodera, del diminuto cuerpo de la hermosa Inmaculada, ayer había dormido como nunca al lado de Sofía, a quien considera como una segunda madre. Sale de la habitación junto con la serenidad que la acompaña. Se tropieza con Ángel en el pasillo y éste la saluda velozmente:—Buen día, te ves radiante—manifiesta Ángel, ella bosqueja una leve sonrisa y le dice:—¿Vas a la empresa, estás muy bien vestido? —Ángel toma sus palabras como un cumplido y siente, como un leve hormigueo invade todo su interior.—Si quieres, puedes venir conmigo a la empresa—la invita.—No, prefiero quedarme aquí. Cuando regreses tenemos, que conversar muy seriamente—advierte Inmaculada, y Ángel de inmediato frunce el ceño.Improvisadamente, llega Helen de la compañía de Mark, el hijo de Gianna. Ángel al bajar los recibe y le dice:—Bienvenidos.—¿Eres el esposo de Inmaculada? —pregunta Helen sin disimulo.—Si—afirma Ángel.—Eres muy elegante—menciona Helen y Mark la mira con recelo.—Aquí la traj
Horas más tarde…Ingresa Ángel a la mansión junto con Mark. Inmaculada estaba en la sala, Sofía había ido a visitar a una de sus amigas de sociedad, para seguir con las apariencias, y rápidamente Inmaculada mira a Mark con aprensión imaginando quien es, debido a que Helen se lo había descrito físicamente.—Hola—saluda Inmaculada con timidez.—Mark ella es mi esposa—indica Ángel.—¡Que tal! —la saluda Mark con indiferencia, sintiendo pena por haberla dejado abandonada, días atrás en aquel frio matorral en la carretera.—¿Con que tú eres Mark, el hijo de Gianna? —pregunta Inmaculada con desconfianza.—Si.—Escúchame bien, Helen no está sola. Te exijo que la dejes en paz, te estás aprovechando de ella y de su inocencia—saca a relucir su espíritu protector.—Tranquila Inmaculada, que Mark no la haría daño a tu amiga—busca Ángel de mediar.—Seguro es un mafioso igual que tú, es más creo que te conozco.—Yo mejor me voy—advierte Mark e Inmaculada lo detiene:—Espera, tú fuiste el miserable
Días después.Han pasado los días, Inmaculada halla el sereno ambiente que tanto anhelaba, Sofía logró convencer a su hermano, para que limara asperezas con ella, por lo que retornó a casa con Alan. Por otro lado, Ángel la convenció para que presidiera la fundación sin fines de lucros, no tuvo más remedio que acceder, cuando le presentaron el proyecto y le manifestaron de los grandes beneficios que le traerá a la comunidad, no dudo ni un segundo en aceptar.Sofía también la acompaña en este nuevo camino, al igual que Helen, junto con otras novicias del convento. También el párroco de la zona, la visita constantemente en la fundación, en tal sentido se siente más tranquila.—Ya ves hija, todo volvió a la normalidad—apunta Sofía, ambas se encuentran en la fundación: “El amor es libertad”. Así la decidió llamar Inmaculada, como el título principal de su libro favorito.—Relativamente, todavía me falta el divorcio, espero por Ángel para que se haga efectivo. También quiero entrar al conve
Empresas Garrett.En el estudio, esta lista y preparada la exuberante Lucero, don Cándido se valió de todo su poder para internarla en la empresa y hacerla pasar, con una reconocida modelo mexicana. Lucero Gómez, es un sensual y atractiva mujer de unos veinticinco años de edad, desde muy joven ha estado ligada al crimen organizado, nadie se imagina, que esa bella y espigada morena, con aquellos impenetrables ojos verdes, es una vil asesina profesional.Ingresa Ángel al estudio y queda ligeramente impactado, ante tan hermosa mujer, sin embargo, concibe en su cabeza que no le llega a Inmaculada ni a los talones, los miembros de Garrett quedan atónitos, al presentir la indiferencia de Ángel, quien no opina en nada de la muchacha, da algunas indicaciones al personal y se retira. Lucero lo mira a la distancia, con detenimiento asumiendo que el diantre. Es su objetivo final.Al salir del estudio se topa con su madre, mientras se dirigía a su oficina. La toma por el brazo esbozándole una tie
Al día siguiente, le dan los resultados de la prueba, que se realizó Helen y efectivamente la joven está embarazada de Mark, sería el primer nieto para Gianna. Helen rompe en seguida en llanto, sintiendo que la tristeza se apodera de ella.—Ay por Dios Inmaculada, mis papás me van a matar, estoy perdida—llora Helen desconsoladamente.—Tranquilízate que todo estará bien.—Mark sigue sin contestar.—Olvídate de ese Mark, resolveremos nosotras solas. Cuando lo vea lo voy a matar.—¡Inmaculada!—Lo siento Helen, Dios perdóname. Ya ni se lo que digo.Salen del consultorio del doctor, que está justo dentro de la fundación. Ángel llegaba para visitarla, con la excusa de llevarle regalos a los niños. Percibe el llanto de Helen y se le acerca:—¿Qué le pasa a tu amiga?—Esta así, por culpa de Mark.—¿Qué le hizo Mark? Si le hizo algo malo, yo mismo acabo con él.—Me embarazó—responde Helen de sopetón.—¡Ah Caray! —exclama Ángel con asombro y la vez sonríe.—No le veo lo gracioso Ángel—indica I
El tiempo pasó volando, ya ha amanecido y Helen se encuentra muy perturbada, con lo que la aqueja, como era de esperarse, sus padres quienes son bien ortodoxos y conservadores. Le dieron la espalda y la echaron a la calle. Se halla con Inmaculada en casa, muy afligida. Sin saber qué hacer con su vida.—Tranquila Helen, que Sofía me dijo que iba a resolver. Te juro, que cuando vea a Mark, lo voy a reprender.—Mark es un cobarde, te doy permiso para que acabes con él—imprime Helen con desconsuelo.—Todo estará bien, tus padres son unos desalmados.—Yo te lo había advertido Inmaculada. No exageraba cuando te dije, que pertenecían a la santa inquisición.—Te quedaste corta, esperemos que con el tiempo reflexionen, tú eres su única hija.—Ya no tengo familia Inmaculada, solo mi hijo.—¿Yo que soy?—Tu eres un ángel caído del cielo, eres una santa como te dice Ángel.—Ángel, es tan dual.—No lo quieres ni poquito Inmaculada.—No nos desviemos del tema Helen, ahora lo único importante eres t
—¡Inmaculada tu aquí! —exclama Ángel y se emociona al verla.—Vine acompañar a Helen.—Pobre muchacha, pero entre todos la apoyaremos.—Vivirá aquí, espero no te incomode.—En lo absoluto, ven conmigo.—¿A dónde?—A un lugar, que te fascinará.—Estoy esperando a tu madre, Helen está con Gianna.—No te preocupes por mamá, yo ahora te necesito más.—¿Qué tienes en mente? —pregunta Inmaculada con desconfianza.—Nada malo, no te asustes. Confía en mí, ven.—Está bien, pero hay de ti, si quieres pasarte de listo conmigo.—Ya he probado tus golpes—menciona Ángel, esbozando una franca sonrisa.Salen de la casa y suben a su auto, Ángel conduce escoltado por su seguridad:—¿Siempre te acompañan esos sujetos a todas partes?—Sí.—Te compadezco.—Por algo se empieza—dice Ángel, de pronto frunce Inmaculada el ceño, diciendo:—No solo te compadezco, también siento afecto por ti. En los últimos días, te has portado muy bien con los niños en la fundación y tengo, que agradecerte lo mucho que ayudast
Pasa el tiempo, la felicidad en Ángel no se aparta de su rostro, Inmaculada esta vez se relaja y no refuta, como lo acostumbra hacer. Descarta Inmaculada de su mente, no volver a estar así a solas con Ángel, acentúa en su interior que, a pesar de todo, con lo que él carga a cuesta, es un hombre muy especial.—¿En qué piensa mi santa? —pregunta Ángel, sujetándola entre sus brazos.—En ti.—Espero que, esta vez tus sentimientos sean más amables.—Y lo son—Ángel velozmente se sorprende, se separa de ella y la mira fijamente a los ojos.—No lo puedo creer, que estemos justo ahora tanta tranquilos. Sin que refutes por todo y hasta piensas en mí.—No tan rápido Ángel, también es muy difícil para mí, aceptarte tal y como eres. Sigo pensando, que eres un amor prohibido.—¿Quién lo prohíbe?—El demonio que habita en ti, ¿te parece poco? Ahora platico a gusto y saboreo los labios del ángel, que está en este instante conmigo, pero el diantre puede arruinarlo todo—expone Inmaculada sujetando su c