Pov Ally
¿Cómo puede existir gente tan tarada en este mundo Dios mío?, Le preguntaba a Dios mientras veía el techo de mi habitación, tengo un mal sabor de boca al haber conocido a esta chica tan... ¿Desagradable?, Como se atreve a burlarse de los demás y sobre todo ¿Cómo puede burlarse de mi estatura?, Sé que soy pequeña, pero todo lo bueno viene en porciones pequeñas ¿no?, pero... Por alguna razón no me puede sacar de la cabeza los ojos de esa chica, si no fuera la bestia que es, apuesto que sería muy hermosa. Por otro lado pobre de Mario, me daba pena que tuviera que convivir con personas con poco cerebro como ella. Mario me contó que él iba a la universidad que estaba al lado de la mía y que siempre tenía que soportar la burla de todos por ser tartamudo, le ofrecí mi amistad y el la acepto con gusto, me causo gracia cuando Mario me preguntó que si debía pagarme cada vez que saliéramos y yo me negué, Mario no tenía amigos y yo no veía nada de malo en serlo. Me levanté de la cama para cerrar la ventana de mi habitación, era una noche fría y el cielo estaba lleno de estrellas, sonreí al ver a la luna tan hermosa y con su brillo único de siempre, regrese a mi cama y cerré mis ojos para poder dormir un poco.
——
¡ALLY DESPIERTA! ¡HERMANA YA ES TARDE!
Escuché los gritos de Vale que me pedía que me levantará, pero la verdad es que mi cuerpo se negaba hacerlo, mi camita estaba tan cómoda que no quería levantarme.
- ¡Ally Miriam vendrá a levantarte si no te despiertas! — Vale me dijo mientras me sacudía en la cama.
No quería verle la cara a Miriam, así que obedecía a Vale y me levanté despacio de la cama, Vale al ver que ya estaba despierta me dio un beso en la frente y salió de mi habitación, me dirigí al baño para realizar mi aseo personal, me coloque frente al espejo y di un bostezo mientras me miraba, cepille mis dientes, hice de la chichi y por último me tomé una buena ducha de agua fría para activar mi cuerpo.
Me aliste lo más pronto posible ya que se me hacía tarde para ir a la universalidad, baje rápidamente las escaleras saludé a Vale y a mí papá, ignore a Mariana quién no tardó en reclamar que la ignoré.
- ¡Que mala educación querida!, Debes saludar a todos los presentes sin excepciones de personas — Mariana me dijo acomodando una servilleta en sus piernas.
¡Buenos días bruja horripilante!
Susurré en un tono muy bajo, Mariana me preguntó que había dicho, no le dije nada y con una sonrisa falsa me acerque a saludarla. Ya era tarde así que solo tome una manzana de la cesta de frutas y salí rápidamente de la casa.
Sentía que nunca iba a llegar "solo dos cuadras más Allyson Sofía " me decía a mí misma para darme ánimos, sólo a mí se me ocurre olvidar mi dinero el día de hoy, no me vuelvo a levantar tarde, estaba entretenida caminando rápido y una voz hizo que pegará un brinco del susto.
- ¡Hola Chaparra! ¿Dónde dejaste la altura?
¡Hay no, otra vez la tonta castaña!, Lo que me faltaba lidiar con esta idiota, la chica irritante iba en una motocicleta clásica de color negro, llevaba puesto unos jeans rotos y una chaqueta del equipo de béisbol de la que creó, es su universidad, sus labios estaban de un color rojo carmesí y su demás maquillaje era discreto, me veía con una sonrisa de lado "¡Maldición, su dentadura es perfecta! Sacudí mi cabeza ante ese pensamiento inútil y me puse a correr.
- Jajaja ¿Eso es correr? Mejor ven chiquitita, súbete a mi moto — La chica me dijo haciendo sonar el motor de su motocicleta.
- Mira... En primera ¡Deja de burlarte de mí estatura! Porque que este chiquita no quiere decir que no pueda romperte la cara, en segunda prefiero caminar a subirme a tu motocicleta — Le dije señalando su motocicleta con mi dedo índice, ella estacionó la motocicleta y levantó sus manos.
- Está bien, veo que lo que te falta de tamaño te sobra de orgullosa — Ella me dijo con su típico tono de burla — además tú te lo pierdes... No cualquiera se sube a mi consentida, Bye linda vete por la sombrita.
Me guiño el ojo y arrancó su motocicleta a toda velocidad, me quedé pasmada ¿¡Cómo puede ser tan linda y tan...tan... insoportable a la vez!? Además ahora por su culpa estoy llegando tarde a la universidad, tomé impulso dando unos pasos hacia atrás y me eche a correr.
Señorita Allyson Sofía ... Llega usted tarde.
¡Perdón, tuve un atrasó!, ¿Puedo pasar?
Que no se vuelva a repetir Martínez.
Caminé hacia mi lugar, dejé mi mochila a un lado de mi escritorio, me espante cuando sentí las manos de Laura sobre mis hombros.
- ¿Porque vienes tarde?, ¿Te quedaste hablando con algún chico? — Laura me dijo de forma pícara.
- No, más bien... Fue con una descerebrada, pero te cuento al rato.
Pov Elena
Me despedí de mi mamá con un beso en la mejilla, tomé mi mochila y salí de mi casa, pero no antes de escuchar el último regaño de mi mamá.
Me subí a mi consentida y comencé a manejar rumbo a la universidad. Mientras iba manejando pude observar una silueta pequeña con cabellos azules "¿La pitufo?" Me pregunté entrecerrando los ojos para poder ver mejor, aceleré la moto y si... Si era ella, sonreí ya que no dejaría pasar la oportunidad de molestarla.
Intente darle un aventón para la universidad, pero resulta que la chaparra es muy digna, aunque debo admitir que me gusta molestarla y hacerla enojar, aún recuerdo el mal momento que me hizo pasar ayer en la fiesta, resultó ser toda una cavernícola, creo que ella me debe una disculpa por haber sido tan grosera conmigo y haberme aventado a la alberca.
- ¡Elena! ¿Qué te pasa? — Oscar me preguntó sentándose en el escritorio que estaba enfrente de mí.
- ¿Porque lo preguntas?
Le pregunté saliendo de mis pensamientos, Oscar me miró analizándome y después me sonrió.
- Estás en la luna tarada.
- ¿Puedes creer que me encontré al duende que ayer me aventó a la alberca cuando venía para la universidad?
- ¡NOO!, Jajaja esa chica es mi ídola, mira que tratar así a la famosa Elena Bravo, la conquistadora de chicas y de chicos número uno — Oscar dijo haciéndome burla y golpe su cabeza, quizá así se compone y deja de ser tan idiota.
- Esa deuda no está saldada, ella aún me debe una disculpa y ten por seguro que sabré como cobrarle esa deuda.
Sonreí engreída al pensar en cómo le iba a cobrar la deuda a la muñequita de bolsillo.
PovElenaMe encontré al tartamudo de Mario y logré sacarle la información que necesitaba (Donde estudiaba la chaparra) el muy tarado no me quería decir, pero no me quedó de otra que tomarlo fuertemente de la camisa y pegarlo a los casilleros, le dije que estaba agotando mi paciencia, él me miró rendido y me dijo que estudiaba en la universidad Mercedes (La universidad vecina de la nuestra) le agradecí con una sonrisa, Oscar y Juana me esperaban a fuera y les pedí que se fueran que tenía algo muy importante que hacer, ellos asintieron y Oscar me dijo que llegaría a mi casa por la noche.Después de despedirme de mis amigos, me subí a mi motocicleta y maneje hacia la universidad vecina.Allí estaba ella al lado de otra chica, que estaba... ¡Muy buena! Creo que a pesar de que está universidad es de un prestigio más bajo q
PovElenaSolté un suspiro y tome el teléfono que me estaba extendiendo mi madre, no quería hablar con él, no quería escucharlo pero... ¿Qué podía hacer?-¿Hola? — saludé nerviosa.-¡Hola mi pequeña ratona!, ¿Cómo estás? — Solté un suspiro y apreté los ojos al escucharlo llamarme así.-Mi nombre es Elena... Y estoy bien gracias. ¿Y usted? — yo quería que fuera al grano de una vez.-Bueno Elena, lo que pasa es que este fin de semana habrá una reunión muy importante en la casa de tu abuelo, él ha estado enfermo y dice que extraña ver a su familia reunida pero...- ¿Pero qué papá?....-Bueno creo que al abuelo le hará bien ver que sus nietos está
PovAlly- Entonces nos vemos mañana Ally, no olvides el trabajo — Laura me dijo en el marco de la puerta de mi casa antes de irse.- Si, lo sé. El trabajo ya está en mi mochila, ¿Algo más señorita? — Le pregunté dando un bostezo, el sueño ya se había apoderado de mí ser.- Sí, que ya no te andes creyendo actriz de novela mexicana y andes dando bofetadas, te juro que de solo recordar esa escena me dan ganas de reír de nuevo — Laura me estaba molestando y por lo visto esto duraría hasta que encuentre algo nuevo con que molestarme.- Ja, ja, ja. ¿Te consigo una lupa para que busques el chiste o qué?... Ya largo cosita.- ¡Adiós peque!Cerré la puerta y me fui rápidamente a mí habitación, me tiré a la cama boca arriba y no sé porque pero... Una son
PovAllyLe pagué al Uber que me dejó enfrente de la agencia, iba muy preocupada porque estaba impuntual, me estresa llegar tarde siempre pero no es mi culpa de que el tiempo pase muy rápido.Entre a la agencia, saludé a algunas de las chicas y cuando iba a subir, a la oficina de Lina, me encontré con la tarada de Manu.- ¡Ya llegó la favorita! — Manu dijo sarcásticamente con una sonrisa burlona.- ¡Llegó tu patrona mami! Así que muérdete la lengua serpiente venenosa... ¡Psss! — imite una serpiente y sonreí al ver como no le quedó de otra que quedarse en silencio.Manu Gómez... Desde que yo llegue a la agencia es la persona que más me detesta en el mundo, siempre ha estado celosa de mí ya que Lina me trata distinto a las demás y los mejores clientes me los da siempre a mí, pero su
Pov Elena- Bueno... Creo que mejor las dejamos a solas para que se pongan de acuerdo para el fin de semana - Lina dijo llamando a Oscar para que salieran de la oficina.Oscar me dijo que me esperaba afuera, asentí con mi cabeza y lo observé hasta que se retiró de la oficina y cerró la puerta, devolví mi mirada en la chaparrita que pareciera que estuviera nerviosa, pero... ¿Cómo no? Si estar a solas conmigo en un cuarto es señal de peligro.- Entonces... ¿Qué es lo que quieres que haga? - La pequeña me preguntó, yo alce una ceja de forma pícara y sonreí.La cara de la chaparra se puso roja, me acerque más a ella, mientras yo daba pasos hacia adelante ella los daba hacia atrás, su cuerpo topo con el escritorio de Lina, sentía su respiración agitada, y eso me gusta. Me gustan las reacciones que tiene su cuerpo cuando
PovAllyDespués de la agencia llegué a mi casa, saludé por educación a Mariana quien estaba sentada en el sofá viendo televisión y comiendo papitas. Subí las escaleras hasta a mí habitación, lo primero que hice fue tirarme boca abajo en la cama.Comencé a pensar en todo lo que había pasado esta tarde y la pregunta que daba vueltas sobre mi cabeza una y otra vez, era... ¿Cómo le diré a mi papá que no estaré todo el fin de semana en la casa? Tengo que inventar una buena excusa, quizá pueda decirle que saldré con Laura y sus papás, pero... Si le digo eso mi papá llamará a los papás de Laura y me descubrirá, ¡Ya sé! Mejor le diré que en la universidad me dejaron de tarea hacer un trabajo de campo sobre la pobreza extrema en Bogotá. ¡Sí esa es la excusa
PovAllyLe pagué al conductor del taxi, salí del taxi y acomodé mi mochila detrás de mis hombros, la verdad no llevaba mucha ropa, ya que solo sería un fin de semana el que pasaría fuera de la ciudad. Mire el reloj que traía en mi muñeca y me di cuenta que ya eran las 7; 01 a.m., empecé a correr y a buscar a Elena con la mirada, la encontré apoyada en su motocicleta. Llevaba puesta una chaqueta de lona, una blusa blanca y unos jeans celestes rasgados, cuando Elena me vio se colocó sus lentes de sol arriba de su cabeza y miro el reloj que estaba en su muñeca.- ¡Hola señorita puntual! — ella me dijo con sarcasmo.- No es mi culpa que el tráfico de Bogotá sea un dolor de cabeza — me defendí, ella me sonrió y se subió a su motocicleta.- toma esto — me tiró uno de los cascos de mot
Pov AllyEstábamos en el inmenso jardín de la casa del abuelo de Elena, nunca antes había estado en una casa tan lujosa cómo está, cada detalle de ella es perfecto, tiene una alberca en la parte del jardín y un Jacuzzi en cada una de las habitaciones, eso fue lo que me contó Elena.Elena me presento al resto de su familia, sus primos (a), tíos (a) y a las parejas de sus primos (a), solo me hacía falta conocer a su tío Erick y al abuelo de Elena.Estaba conversando con el papá de Elena, cuando observé que llegó un anciano un poco obeso, junto con un señor alto y calvo.- Ese que viene ahí es mi abuelo y mi tío Erick — Elena me dijo tomando mi mano, mientras le sonreía a las personas que venían hacia nuestra dirección.- Entendido — Le contesté.- ¡Mi querida y amada niet