Pov Elena
Solté un suspiro y tome el teléfono que me estaba extendiendo mi madre, no quería hablar con él, no quería escucharlo pero... ¿Qué podía hacer?
-¿Hola? — saludé nerviosa.
-¡Hola mi pequeña ratona!, ¿Cómo estás? — Solté un suspiro y apreté los ojos al escucharlo llamarme así.
-Mi nombre es Elena... Y estoy bien gracias. ¿Y usted? — yo quería que fuera al grano de una vez.
-Bueno Elena, lo que pasa es que este fin de semana habrá una reunión muy importante en la casa de tu abuelo, él ha estado enfermo y dice que extraña ver a su familia reunida pero...
- ¿Pero qué papá?....
- Bueno creo que al abuelo le hará bien ver que sus nietos están en una relación sería, ya sabes con un futuro asegurado. No me gustaría que el viera que sigues de coqueta hija, creo que él debe ver que ya tienes una relación sería con alguien — rodé los ojos al escucharlo hablar así — entonces yo te pondré como condición de que traigas a una chica decente a la casa de tu abuelo para que él vea que ya eres una mujer sería y no le des más preocupaciones Elena.
Era increíble que a mi papá le preocupara las apariencias, claro al señor perfecto que no me importó dejar a su familia para irse con una pu**
- Está bien papá, no te preocupes. ¿Algo más? — Le pregunté sintiendo la molestia dentro de mí.
- Solo eso pequeña... ¡Te amo! Y te espero este fin de semana.
- Ok.... ¡Feliz tarde!
Colgué el teléfono y se lo entregue de nuevo a mi mamá, subí rápidamente a mí habitación, escuchaba los pasos de mi mamá detrás de mí.
Me tiré a mi cama boca arriba y trataba de calmarme un poco, inhalaba y exhalaba lentamente.
- ¿Que paso mi amor? — Mi mamá me dijo sentándose a un lado de mí en la cama y acariciando mi cabello.
- Mi papá quiere que vaya el fin de semana a la casa del abuelo, pero quiere que vaya con una chica y que la presente formalmente como mi novia... Él se avergüenza de mi forma de ser mamá, pero él no entiende que no quiero involucrarme en las cosas del amor — me reincorpore en la cama, vi a mi mamá a los ojos y baje la mirada rápidamente.
- Elena, piensa que es solo un fin de semana, puedes decirle a alguna de tus amigas que te acompañe. Pero hija me preocupa que te niegues amar, tarde o temprano llegará esa persona que te hará sonreír por cualquier tontería, que hará que tu corazón quiera salirse cada vez que la ves, esa persona te enseñará amar. Porque el amor si existe mi vida solo hace falta encontrarlo y te prometo que cuando lo encuentres jamás querrás dejarlo ir.
Mi mamá me veía con toda la ternura del mundo, me quede en silencio analizando sus palabras, cuando era pequeña tenía esa idea, soñaba con crecer y conocer el amor, pero al darme cuenta de que el amor no es como lo pintan, que es una trampa para ilusos, me niego por completo a enamorarme y conocer el amor, eso es algo momentáneo y eso mis papás tras su divorcio también me lo enseñaron.
- Mamá sabes lo que pienso, pero te agradezco que intentes hacerme sentir mejor.
- ¡Te amo Elenaelita!... Iré a preparar la cena, porque no tardará en llegar tu amigo el hambriento.
Me reí de como mi mamá se refería a Oscar pero es cierto, él siempre se repite la comida.
__________
Jajaja, así que la besaste y... ¡Ella te dio una cachetada! Jajaja y enfrente de toda la universidad — El idiota de Oscar se burlaba de mi sin dejar de reír.
- ¡CÁLLATE IDOTA! — Le tiré mi almohada encima — por lo menos ya me quite la gana de vengarme de esa enana y aunque me haya dado una bofetada sé que le gustó que la besará, no por algo soy Elena Bravo y conozco las reacciones que tiene el cuerpo de una chica al ser besada por mí.
- ¡Ay sí! ¡Ay sí! La Diosa de los besos — Oscar me dijo haciéndome burla y fingiendo dar besos — Lo vi con cara de asco y le tiré ahora un osito de peluche.
- Dejemos el tema de la enana a un lado... Mejor dime ¿Cómo le haré para llevar a una chica a la casa de mi abuelo? — Le pregunté y Oscar empezó a pensar.
- No sé porque te complicas tanto la existencia, solo dile a una de las chicas de la universidad que te acompañe y ya — Oscar se encogió de hombros como que si fuera lo más obvió.
- ¡No!, Porque si le digo a una de las chicas de la universidad ellas se harán ilusiones y pensaran que en realidad estamos saliendo cuando no es así.
- mmm... ¡Ya sé!, ¿Y si contratas a una escort?
Fruncí el ceño confundida al escuchar la idea de mi amigo.
- ¿A una prostituta? — le pregunté y el rodó los ojos.
- ¡No zopenca! Una escort es una dama de compañía, ellas se dedican acompañarte a lugares, fiestas y cosas así.
- o sea que... ¿No tienen sexo? — Le pregunté.
- Sí, pero solo si tú quieres, digamos que el sexo es algo extra y que si quieres tener sexo debes pagar de más — Oscar me dijo explicándome — mira mi hermano contrato a una, una vez para que lo acompañará a un partido de fútbol ya que no quería ir solo, tengo entendido que hay un lugar donde tú puedes ir directamente a escoger a una de ellas y contratarla, mi hermano es amigo de la dueña así que le diré que la llame para que te haga una cita mañana y puedas elegir a tu futura novia.
Esa idea está rara pero me gusta, total solo es cosa de estar un fin de semana fingiendo y ya.
Pov Ally
Jajaja tú madrastra lleva horas en el baño, creo que nos pasamos Ally — Laura no paraba de reírse y a mí ya me dolía el estómago al escuchar los truenos que venían del trasero de Mariana.
Mariana me pidió que preparará la cena y eso hice junto con Laura, solo que como la amo tanto a ella le agregué un ingrediente secreto que es... ¡Laxante! Jajá, la idea principal la tuvo Laura, y les juro que jamás olvidaré la cara que puso cuando se le escapó un gas en la mesa.
Laura fue al baño porque ya se hacía pipí de la risa, yo me quedé guardando el trabajo en mi mochila cuando mi teléfono empezó a sonar. Era Lina así que conteste rápidamente.
-¡Hola Lina!
-¡Hola Ally!, Te llamo para decirte que mañana quiero que vengas a la agencia después de que vayas a la universidad, tenemos un cliente súper especial e importante. Es primera vez que contrata nuestros servicios, me contacto por medio de un amigo mío y yo le prometí que le daría a la mejor de mis chicas y esa eres tú.
- ¡Okay! Mañana después de la universidad iré para la agencia — me pare de la cama para vigilar que no viniera Laura.
- Mañana te platico cómo estará la situación con ese cliente. Pasa una linda noche.
- ¡Hasta mañana Lina!, Linda noche.
Un nuevo cliente, que raro Lina no me dijo sus datos esta vez, pero me imagino que ha de ser un cliente muy pudiente.
PovAlly- Entonces nos vemos mañana Ally, no olvides el trabajo — Laura me dijo en el marco de la puerta de mi casa antes de irse.- Si, lo sé. El trabajo ya está en mi mochila, ¿Algo más señorita? — Le pregunté dando un bostezo, el sueño ya se había apoderado de mí ser.- Sí, que ya no te andes creyendo actriz de novela mexicana y andes dando bofetadas, te juro que de solo recordar esa escena me dan ganas de reír de nuevo — Laura me estaba molestando y por lo visto esto duraría hasta que encuentre algo nuevo con que molestarme.- Ja, ja, ja. ¿Te consigo una lupa para que busques el chiste o qué?... Ya largo cosita.- ¡Adiós peque!Cerré la puerta y me fui rápidamente a mí habitación, me tiré a la cama boca arriba y no sé porque pero... Una son
PovAllyLe pagué al Uber que me dejó enfrente de la agencia, iba muy preocupada porque estaba impuntual, me estresa llegar tarde siempre pero no es mi culpa de que el tiempo pase muy rápido.Entre a la agencia, saludé a algunas de las chicas y cuando iba a subir, a la oficina de Lina, me encontré con la tarada de Manu.- ¡Ya llegó la favorita! — Manu dijo sarcásticamente con una sonrisa burlona.- ¡Llegó tu patrona mami! Así que muérdete la lengua serpiente venenosa... ¡Psss! — imite una serpiente y sonreí al ver como no le quedó de otra que quedarse en silencio.Manu Gómez... Desde que yo llegue a la agencia es la persona que más me detesta en el mundo, siempre ha estado celosa de mí ya que Lina me trata distinto a las demás y los mejores clientes me los da siempre a mí, pero su
Pov Elena- Bueno... Creo que mejor las dejamos a solas para que se pongan de acuerdo para el fin de semana - Lina dijo llamando a Oscar para que salieran de la oficina.Oscar me dijo que me esperaba afuera, asentí con mi cabeza y lo observé hasta que se retiró de la oficina y cerró la puerta, devolví mi mirada en la chaparrita que pareciera que estuviera nerviosa, pero... ¿Cómo no? Si estar a solas conmigo en un cuarto es señal de peligro.- Entonces... ¿Qué es lo que quieres que haga? - La pequeña me preguntó, yo alce una ceja de forma pícara y sonreí.La cara de la chaparra se puso roja, me acerque más a ella, mientras yo daba pasos hacia adelante ella los daba hacia atrás, su cuerpo topo con el escritorio de Lina, sentía su respiración agitada, y eso me gusta. Me gustan las reacciones que tiene su cuerpo cuando
PovAllyDespués de la agencia llegué a mi casa, saludé por educación a Mariana quien estaba sentada en el sofá viendo televisión y comiendo papitas. Subí las escaleras hasta a mí habitación, lo primero que hice fue tirarme boca abajo en la cama.Comencé a pensar en todo lo que había pasado esta tarde y la pregunta que daba vueltas sobre mi cabeza una y otra vez, era... ¿Cómo le diré a mi papá que no estaré todo el fin de semana en la casa? Tengo que inventar una buena excusa, quizá pueda decirle que saldré con Laura y sus papás, pero... Si le digo eso mi papá llamará a los papás de Laura y me descubrirá, ¡Ya sé! Mejor le diré que en la universidad me dejaron de tarea hacer un trabajo de campo sobre la pobreza extrema en Bogotá. ¡Sí esa es la excusa
PovAllyLe pagué al conductor del taxi, salí del taxi y acomodé mi mochila detrás de mis hombros, la verdad no llevaba mucha ropa, ya que solo sería un fin de semana el que pasaría fuera de la ciudad. Mire el reloj que traía en mi muñeca y me di cuenta que ya eran las 7; 01 a.m., empecé a correr y a buscar a Elena con la mirada, la encontré apoyada en su motocicleta. Llevaba puesta una chaqueta de lona, una blusa blanca y unos jeans celestes rasgados, cuando Elena me vio se colocó sus lentes de sol arriba de su cabeza y miro el reloj que estaba en su muñeca.- ¡Hola señorita puntual! — ella me dijo con sarcasmo.- No es mi culpa que el tráfico de Bogotá sea un dolor de cabeza — me defendí, ella me sonrió y se subió a su motocicleta.- toma esto — me tiró uno de los cascos de mot
Pov AllyEstábamos en el inmenso jardín de la casa del abuelo de Elena, nunca antes había estado en una casa tan lujosa cómo está, cada detalle de ella es perfecto, tiene una alberca en la parte del jardín y un Jacuzzi en cada una de las habitaciones, eso fue lo que me contó Elena.Elena me presento al resto de su familia, sus primos (a), tíos (a) y a las parejas de sus primos (a), solo me hacía falta conocer a su tío Erick y al abuelo de Elena.Estaba conversando con el papá de Elena, cuando observé que llegó un anciano un poco obeso, junto con un señor alto y calvo.- Ese que viene ahí es mi abuelo y mi tío Erick — Elena me dijo tomando mi mano, mientras le sonreía a las personas que venían hacia nuestra dirección.- Entendido — Le contesté.- ¡Mi querida y amada niet
PovElenaBaje a buscar a Ally y me di cuenta que estaba sentada en el comedor junto a mi familia. Camine despacio hacía donde estaba ella, me coloque detrás de ella sin que se diera cuenta y le di un beso en su mejilla, sabía que eso la enojaba y amaba verla enojada.- amor, ¡Aquí estás!, Te estaba buscando — Le dije con una sonrisa en mi rostro.Ally entrecerró sus ojos y negó lentamente con la cabeza.- Amor es que tú te tardas mucho en el baño, sé que eres muy estreñida, entonces baje con tu familia porque sabía que te ibas a tardar.Mi familia se río de mi al escuchar la gran mentira que dijo Ally, fingí que también me causo gracia su chistecito y me senté al lado de ella.- deberías de ser payaso amorcito— le dije en un tono bajo, donde solo ella pudiera escucharme.- &iqu
+18.PovAlly- ¿Y a ustedes que les pasó? - El abuelo de Elena nos preguntó riéndose de nosotras al igual que los demás.- All-Ally... Ally tuvo la cu-culpa - Elena dijo tiritando del frío.- Jajaja, niñas mejor vayan a la casa y se cambian de ropa, no vaya a ser que les dé un resfriado - El abuelo de Elena nos dijo.Ambas asentimos y nos retiramos a la casa.- ¡Eres una chillona Elena! - Le dije riéndome de ella.- Tú eres una miedosa, ¿Cómo es posible que le temas a una pobre e indefensa ranita? - Elena me dijo molesta.- Porque... ¡Son muy feas! - sacudí mi cabeza ante el recuerdo de aquel animal horrible ¿Se imaginan que me hubiera saltado en la cabeza? ¡Hay no!Llegamos a la casa junto con Elena y subimos a nuestra habitación para ca