Caminaba por un lugar tan desconocido, pero a la vez lo conocía perfectamente, y entonces me vi ahí, yo estaba en las escaleras. Observaba algo, lo hacía con tanta furiaPero, ¿Qué era? ¿Quién era? ¿Por qué estaba enojada? Por mucho que intentar escuchar, por mucho que intentaba ver, no lograba hacerloNo lograba nada, más que verme a mí misma en las escaleras con los ojos llenos de lágrimas, hablando de manera dolida, estaba mucho más joven¿Qué es esto? ¿Por qué no puedo verlo bien? ¿Por qué?― ¿Te vas por esto? ¿Me dejarás por qué no soy capaz de comprender todo lo que pasa por ti? El hecho de tener un hijo, si estaba bien no lo entiendo, lo admito, pero ¿qué hay de mí? ¿Es muy difícil de comprender? ¿Es tan difícil entender mi dolor?Entonces escuché su voz, era el Maximiliano Lup, él estaba en mi sueño, era la primera vez que lo veía o lo escuchaba en mis sueñosSería todo esto, por lo que había pasado el día hoy, pero esto más que un sueño, parecía un recuerdo, uno que, poco a p
―Hola cariño, sé que voy tarde, lo sé, pero… De verdad tenemos que hablar, tengo una enorme sorpresa para ti, sé que hemos estado discutiendo sobre los nombres de nuestros hijos, pero ¿Qué crees? Esta mañana he leído un poema y sin duda alguna este es…Recuerdo ese día, estaba en mi cama, en nuestra cama, justamente en esta mansión, ¿Por qué estábamos aquí? No lo recordaba.Era un lugar diferente al de la discusión, pero yo peinaba mi cabello, lo hacía mientras había tomado mi teléfono.Lo había hecho debido a que nosotros habíamos tenido algunas discusiones, nada grave, solo era porque no lográbamos acomodarnos con los nombres de nuestros hijos.Yo solía pedir un nombre lleno de tanto, mientras él solo decía que los llamáramos cosa una y cosa dos, todo lo decía mientras sonreía y yo le lanzaba lo primero que tenía en mis manos.Luego de ello, él me abrazaba, me besaba y me decía que amaba, que aceptaría cualquier nombre que yo escogiera, pero que aquellos particularmente no le agrada
El sol se mostraba de manera bastante fuerte, en lo que fruncí el ceño y escuché una risita, una que conocía bastante.Por lo que abrí mis ojos y noté como un par de niños me observaba con una expresión divertida, como ellos parecían estar mostrándose bastante curiosos.Por lo que los observe un poco extrañada, ¿Qué tanto les causaba diversión a Zane y a Nerea? En lo que observe como estaba recostada en la cama.Fue entonces cuando supe que me había quedado dormida al lado de Max, justamente luego de pasar toda la noche hablando.Comentándole mis nuevos proyectos y mis nuevos estudios en el extranjero, mientras que él solo me escuchaba con fascinación y me alagaba por mis nuevas metas.Incluso Max, siendo Max, había indicado que me ayudaría a volver mi pequeña tienda de bisutería y joyas, que me convertiría en la mujer más cotizada de todas.Algo que no negaré que me había divertido mucho, pues el hecho de saber que él seguía siendo él, me encantaba, pero al final habíamos objetado po
―Entonces mami ya recuerda a papi y le dio un largo beso y me enteré qué ya no vamos a tener un hermanito…Sonreímos ante las palabras de Zane, en lo que mi abuela me dio un largo apretón de mano, y me observo llena de dicha.Mientras mi padre solo sonrió hacia Hana, quien le servía un poco de comida a mí, desilusionado por el hecho de que las palabras del tonto de Antón no se harían realidad.―No te preocupes mucho por ello, se dice que cuando hay reconciliación, siempre suele haber un nuevo hermano.― ¿De verdad?―Abuelo…La abuela sonrió divertida ante aquello, mientras yo los observaba con una expresión cargada de advertencia, pues sabía muy bien que ella no lo dijo por miedo a estar muy cerca de mí.Es claro que el abuelo lo diría por ella, son un muy buen equipo, a lo que mi padre fue quien dijo las palabras adecuadas para contrarrestar aquello.― ¿Entonces ustedes jamás tuvieron una pelea fuerte?Y sin más todos iniciamos a reír, nuestro hogar estaba un poco animado de lo norma
Golpeaba mi pie contra la baldosa una y otra vez, daba uno que otro suspiro y observaba hacia la ventana, estaba completamente demente.Lo sabía perfectamente, pero si no lo hacía, si yo no tomaba el toro por los cuernos, sabía muy bien, que todo sería un desastre y que al final todo terminaría mal.No solo para él, también lo sería para nuestros hijos, por lo que di otro de los miles de suspiros que he dado y observe de nuevo hacia la ventana.Pero él no parecía, simplemente estaba sin parecer y yo estaba a punto de enloquecer, entonces note la llamada en mi teléfono y sabía que él no se quedaría quieto.Pero por lo menos esperé que tuviese un poco de paciencia, pues no estaba en peligro mortal, no como él lo consideraba.― ¿Ya aprecio? Si no lo ha hecho, solo levántate y deja que la policía se encargue y si tanto miedo te causa yo puedo hacerlo, yo…―Max… Mi amor, solo debes calmarte, no pasará nada, solo hablaremos, solo…―No estoy de acuerdo, no lo he hecho nunca, además con el he
Aquel solo había salido sin más, no había dado siquiera una oportunidad para hablar sobre aquel tema, estaba tan sorprendida.Más cuando sentí un agarre en mi hombro y al girarme completamente alterada, pude ver a Max, aquel que tenía una expresión llena de furia.Y podía jurar que las cosas no estaban de la manera adecuada, por lo que apreté mis labios en una línea recta y dejé caer mi cabeza sobre su mano.Solo intentado que este comprendiera que no era momento de pelear, que no estaba bien, no cuando todo parecía estar hecho un gran lío, y no sabía cómo lidiar con este.―Él está confundido, él…―No te atrevas a disculparlo, está jodido de la cabeza, de eso no hay la menor duda, pero confundido, Zane está confundido, cuando no sabe qué color es el rojo y el naranja a la distancia, incluso creo que necesita lentes, pero él, él no está confundido, es solo una mala persona que creer que está completamente seguro de que lo que hace y hará será lo mejor…Lo observé con preocupación, más
El lugar era lúgubre, note como Max parecía un poco incómodo, aun así, no soltó mi mano ni por un solo segundo, mientras caminábamos por los pasillos.Entonces, de la nada, pude ver a Antón en la entrada de la habitación que, según Max, le había indicado que estaría, pude ver su semblante incómodo.Y como parecía no haber siquiera decirme, Antón nunca había sido bueno para momento como este, solía ponerse incómodo con la muerte y los sitios demasiado tensas.Por lo menos eso era algo que recodaba de este, si me preguntaba, podía jurar que no sabía, ¿cómo era que este ahora sería el esposo de Stella?De aquella mujer ruda y bastante exigente que estaba segura de que para encontrar a su futuro esposo tendría que pasar por mucho.Pero aquí estaba él, demostrando lealtad y seguridad a mi hermana, mientras nos regalaba una pequeña sonrisa y caminaba hacia nosotros.Probablemente, para que mi padre no notara que habíamos llegado y podía imaginar que Stella se encontraba con él dentro de aqu
Andrei.Caminaba de un lado a otro, lo hacía de manera desesperada, mientras me preguntaba ¿Cuánto tiempo duraría en traer a esta mujer?La verdad era que estaba ansioso, lleno de tanto, sobre todo en el lugar en el que me encontraba, mi mayor peligro, era el hecho de que solo me dejaran así sin más.No, aún no había nada seguro, aún no había nada que los hiciere atarme a este lugar, por lo que podía estar tranquilo.Más cuando al final de cuentas, Sanda era Sanda, ella no me haría daño, ella no se atrevería siquiera a poner una demanda, cuando yo soy su amigo de la infancia.El padre de su hija, aquel que aquella pequeña niña adoraba con todo su corazón, por lo que podía estar más que tranquilo.Fue entonces cuando la mujer entro al lugar, un guardia la seguía a su costado, mientras que ella me observaba con lo que parecía bastante sorprendida y ladeo la cabeza para verme mucho mejor.Ya no era para nada la mujer que una vez conocí, aquella mujer elegante y refinada que solía demostr