Algunos días después.

El Comandante caminó por el pasillo con Henry a su lado, se iba a reunir en dos horas con dos líderes para dirimir una disputa sobre algún asunto que no le interesaba en absoluto, Henry lo llevaba a evaluar las habilidades de combate de los lobos nuevos, muchos de ellos serían elegidos para aumentar la guardia de John y no solo eso.

La Isla era muy grande, la Isla más grande jamás descubierta hasta ahora y recibía constantemente espías y todavía estaba la región de Danerold que los vampiros luchaban constantemente para dominar, ya que en el pasado fue una vez su fortaleza.

Henry lo llevó al cuartel de todos esos jóvenes varones ávidos de la aprobación del Supremo, el comandante miró a los rostros de todos ellos y vio la inexperiencia y la impulsividad brillando en cada mirada, no podrían convertirse en guerreros en el corto plazo.

Sin decir una palabra se fue.

Pasó las órdenes de entrenamiento a Henry, quien asintió en silencio.

El Comandante temía que todavía