[AITANA]
Comienzo a cortar la cebolla, los pimientos, y luego los pongo en una sartén con un poquito de aceite para comenzar a dorarlos. Tengo a mi guapísimo novio abrazándome desde atrás con sus manos sobre mi abdomen. —Definitivamente tú eres una excelente cocinera. Esas pastas van a quedar exquisitas. — Me susurra al oído y luego besa mi cuello.
—Amor... así no puedo. Tu aliento en mi cuello y la manera que me acaricias van a hacer que me queme. — Me quejo entre risas.
Al parecer mis palabras le han hecho gracia. —Primero que nada, hermosa, estoy acariciando a nuestro hijo, segundo, es inevitable no besarte. Estoy demasiado enamorado de ti. — Me dice y de verdad que es un dulce.
—Vale, entonces no hagas que me mueva porque me voy a quemar. —
—Yo te ayudo. — Propone tomando el cucharon para mover el contenido mientras que de a poco voy agr
[MATÍAS]Abro mis ojos lentamente intentando absorber la luz del sol y de a poco me voy adaptando a ella. Miro a mi costado, pero no la veo. Me siento en la cama y miro alrededor, pero nada. Me pongo de pie y la busco hasta que antes de salir de la habitación noto que la luz del baño está encendida, pero que la puerta está un poco abierta. Al entrar, la veo sentada al lado del váter.—Amor, ¿¡Qué sucedió!? — Pregunto asustado.Ella me mira como diciéndome, ¿de verdad me preguntas? —Básicamente sucede que estoy embarazada. — Responde seria y por alguna razón no puedo evitar reírme.—Lo siento, lo siento... No me quise reír, pero es que la manera que lo has dicho... — Me excuso y me siento a su lado.—Lo sé amor... — Dice y se pone de pie.Me paro a s
[MATÍAS]Pensé que el día que me tocara a mí, sería uno más de esos hombres que son arrastrados por su futura esposa a la reunión con la planeadora de bodas. Nunca creí que venir a esa cita y decidir en los colores de las flores, de los manteles, y todos esos detalles podría entusiasmarme tanto. Siempre creí que saldría huyendo de situaciones como esta, pero, a decir verdad, el saber que de esta manera es como Aitana y yo estamos construyendo el día más importante de nuestras vidas, me trae una gran alegría. Verla sonreír y escoger cada detalle a medida que va preguntando mi opinión, me hace sentir el hombre más afortunado del planeta.Una vez que todos los principales asuntos de la boda están acordados, le dejo el dep&oacu
[AITANA]Entramos a la casa de mis futuros suegros y al llegar a la sala, nos encontramos con ellos mirando una película junto a todos sus nietos, es una imagen tan bonita... Al vernos Paula sonríe y nos invita a tomar asiento en el sofá, ya que los niños están sentados en el suelo.Sin dudarlo, Matías y yo nos sentamos y disfrutamos de lo que queda de la película de dibujos animados que están viendo. Apoyo mi cabeza sobre el hombro de mi guapísimo prometido mientras disfrutamos de este momento familiar. Estar con él así y sujetarlo de su brazo, es una sensación a la que nunca podre acostumbrarme, se siente una paz absoluta... es como si fuese un hombre normal el cual no llevase el peso de ser el famoso escritor que es en su espalda.—Te amo. — Me susurra al oído para que nadie más que yo pueda escucharlo.Me hace sonreír y solo
[MATÍAS]Cada noche que ella amanece abrazada a mi es una nueva aventura. Una que nos va gustando más. Hoy después de dejar a nuestro hijo en la escuela, hemos ido junto con Danko a la clínica ya que le toca su revisión semi-anual. Lo bajo del auto, y camino detrás de ella para entrar a la clínica. Al entrar, saludamos a Nadia y nos vamos al consultorio antes que los primero pacientes lleguen —¿Lo podrías subir a la mesa de revisión por favor? — Me pide con esa sonrisa que me convence de todo.—Lo iba a hacer de todas formas, ya sabes que no debes hacer fuerza. — Le digo recordándoselo.Pone sus ojos en blanco y suspira. —Te prometo que no lo estoy haciendo amor. — Me dice intentando convencerme.—Por favor cariño, cuídate. — Le repito y luego subo a Danko a la mesa.—Lo estoy haciendo. —
[AITANA]Unos días despuésMe he cansado de decirle a Matías que entenderé su mundo, que lo apoyare y que tratare de no abrumarme con todo esto, pero es más difícil de lo que creí. Hace tres días que estoy evadiendo a algunos periodistas que quieren que responda preguntas en referencia a la información que se ha filtrado, pero claramente no lo hare, por ninguna circunstancia dejare que algo que pueda decir arruine su carrera.Hoy es un día diferente, uno muy especial, es el día de mi primera ecografía y la verdad es que estoy muy nerviosa. Hoy conoceré a mi bebé y me siento tan rara... hay momentos donde aun no asumo que seré madre. Quizás es porque el amor, la familia, mi hijo, todo ha llegado de sopetón y necesito ir digiriendo cada uno de estos cambios de a poco. Si a eso le sumo que estoy en medio de los planes de boda, podríamo
[MATÍAS]Entramos a la casa de mis padres y vemos a Daniel jugando con mis sobrinos en la sala; no puedo dejar de pensar que en algunos meses tendrá un hermanito o hermanita y ya no serán cuatro los que estén jugando allí, si no cinco. La familia crece rápidamente y de ser padre de uno pasare a ser padre de dos y sin dudas es demasiado fuerte todo lo que me ha sucedido en estos meses. Me quedo parado bajo el arco que divide la sala de la cocina y observo como ella se sienta en el suelo para jugar con los niños y no puedo dejar de pensar que definitivamente es una gran madre. Pienso como era esa mujer que imaginaba que sería la madre de mis hijos y sonrió con solo darme cuenta de que era exactamente como ella.—Hijo, ¿Cómo les ha ido?— Me pregunta mi madre a mi espalda interrumpiendo mis pensamientos.Volteo para mirarla y solo puedo sonreírle. —Es muy fuerte mad
[MATÍAS]Dos semanas despuésHoy es uno de los tres días más importantes que voy a vivir en mi vida personal. Hoy Daniel será finalmente Daniel Mendoza, a partir de ahora será legalmente mi hijo y no puedo más de la felicidad. Cuando el abogado nos anuncio la noticia hace un par de días, Aitana y yo respiramos aliviados ya que en dos semanas es nuestra boda y por consecuencia nuestra luna de miel. Termino de vestirme y espero a mi futura esposa sentado sobre la cama.—¡Papi!— Lo escucho gritar mientras golpea la puerta.—Pasa hijo.— Digo y él entra a la habitación con entusiasmo.—¿Y mami?— Cuestiona al no verla.—En el baño, se ha levantado con un poquito de nauseas.— Le explico y él se sienta a mi lado.—Ah ya... ¿Va a tardar mucho?— Averigua mientras balancea sus p
[AITANA]Ellos dos abrazados y diciéndose lo mucho que se aman el uno al otro, son la imagen más bonita. Un padre y un hijo finalmente como lo que son en todos los sentidos posibles. Me acerco a ellos y me arrodillo para quedar a la altura de ese abrazo.—¿Me puedo unir?— Les pregunto totalmente emocionada.—Ven aquí preciosa.— Dice él con una hermosa sonrisa y extiende un de sus brazos para rodear mi cuerpo y de esta manera celebrar este momento los tres juntos.No sé cuantos minutos nos quedamos así, pero el tiempo parece haberse detenido. Veo la sonrisa de Daniel y es mi mayor satisfacción, siento que he cumplido con mi misión como su madre, he encontrado a su padre y sé que siempre quiso saber quién era. Hoy no solo sabe quién es, sino que esta abrazándose a él sellando que frente a todo el mundo son padre e hijo.<