Al entrar por el gran portón pude divisar muchas casas rústicas de primera instancia. Habían unos cuantos niños jugando entre sí alegremente.Y esa imagen me robó una sonrisa. Recordé mi infancia por un segundo.También habían varios soldados dando vueltas entre los ciudadanos. Al parecer eso es algo de rutina aquí.Descubrí que el nombre de mi acosador alias "destinado" es Edison y por consiguiente el descubrió el mío.Ahora mismo me está llevando a una pequeña casa donde el me dejará alojarme. Es lo máximo que pude conseguir... él estaba muy empeñado en dejarme en su casa pero luego de insistirle un trillón de veces acabó aceptando con la condición de que el pasara una buena cantidad de horas ahi conmigo.Aunque... creo que acabó siendo lo mismo solo que en un sitio diferente.Pero al menos no dormiré bajo el mismo techo que él. No voy a mentir, eso me da cierto nerviosismo.Edison se colocó a mi lado al notarme nerviosa por todas las miradas que recibía de las personas.Me fijé que
-okay... vamos a recapitular, Edwuard, mi hermano estará muy pronto dentro de una guerra. ¿Eso dijiste?Edison asiente con la cabeza mirándome serio pero a la vez comprensivo.-¿por?Mi pregunta no es tonta... dado que llevo años recluida en un complejo oculto con magia, es OBVIO que no sé absolutamente NADA de lo que ocurre en el mundo real, y tal parece que mi querido hermano gemelo, mellizo o cómo rayos sea que hayamos nacido; está a punto de sufrir una guerra por un motivo que espero no sea lo que estoy pensando.Edison suspiró mirándome fijamente el rostro.-creo que tu sabes la razón.Por un segundo mi respiración se cortó y a mis pulmones no ingresó aire.Bueno... no sé que esperaba. Si él investigaba era muy probable que fuera con las mejores fuentes. Sabe exactamente lo que Edwuard y yo somos.Y esta vez fui yo la que suspiró. Llevando mis dedos a mi frente acaricié la zona tratando de calmarme y evitar un dolor de cabeza.-por eso estabas asustada de mí.Lo miré nuevamente.
-Edison...-¿si?-esto me queda muy grande también.Salí del corredor mostrando una túnica con capucha que era como 3 tallas más grande que yo.Él trató de ocultar su risa pero le fue imposible.-muy gracioso.Lo señalé pero el sobrante de tela de la manga cubrió mi mano haciéndome ver estúpidamente ridícula.Me siento como tontín... versión femenina.-lo siento.Termino de reírse unos instantes después bajo mi mirada seria.-te conseguiré una más pequeña.Negué.Esta es la tercera túnica "más pequeña" que me trae.-olvidalo. ¿Tienes algún brujo en tu manada? No conseguirás una más pequeña, si tienes un brujo que me dé una poción para poder recuperar mis fuerzas, podré usar mi magia sin hacerme daño.El me miró un momento y asintió.-tenemos una bruja aquí. Y luego de quitarme esa cosa horrorosa, fuimos con la bruja.No entraré en mucho detalles, se llama Diana.Y puedo decir que es linda. Tiene el cabello con rayitos de diferentes colores, y fue muy amable.Nos entrego la poción y l
-d-disculpe... ¿podría dejar de mirarme así?Mi susurro fue casi inaudible pero ella me escuchó.Riendo se alejó de mí.-lo siento, tienes un aura muy similar a Edwuard pero mucho mas intensa y relajante.La miré boquiabierta.-¿conoce a mi hermano?Ella asintió.El brazo de Edison me abrazó por los hombros.-lo conozco. Él es el destinado de mi hija, Courthney.Pestañee asombrada.-su hija... la princesa.Escuche la risa de Edison. Y luego su aliento en mi oído.-¿y qué si ella es una princesa? Tú eres una Hija de La Luna... quién crees que es el suertudo aquí, ¿tu hermano o yo?Solté una risita ante sus ocurrencias. -mejor cállate.Lo aparté sonrojada.El se rió una vez más.-siganme. Y mientras lo hacen, sería bueno que me digan qué necesitan de mí. Aunque ya tengo una leve idea. Igual quiero estar segura, los ayudaré en lo que necesiten.Seguimos sus pasos hasta que llegamos a un estudio sencillo pero elegante.-siéntense, Cristal ¿qué te gustaría saber primero?-su hija-- no, no
Miraba el cielo azul jadeando y con el cuerpo adolorido.-¡esto no funciona!Le grité a cierta personita molesta que habita en mi bonita cabeza.Como se le ha hecho costumbre... no contestó. Creo que está tratando de hacer que me acostumbre a su ausencia.Me senté en el suelo gimiendo de dolor.-me lleva la---Courthney, esa boca.El regaño de Edwuard me hizo levantarle mi dedo medio.-ya que no haces nada más que joderme, te haré hacer algo productivo. Mueve tu trasero de ahí y levántame.Escuché su risa burlona y luego sus pasos dirigiéndose hacia mí.-crei que podías tu sola.-si, podía sola lado primeras cuatro horas. ¿Sabes qué esto es explotación?Lo miré acuasadoramente cuando estuve de pie.-no me mires así, tu fuiste la que nos encerró aquí a los dos. Yo no te obligué. Tu me trajiste a la fuerza porque no querías quedarte 10 horas sola en este lugar. No he movido un dedo desde que empezaste a practicar... casi me quemas dos veces y no me quejé. Así que al menos, mírame bien.
En una parte muy recóndita del llamado "Bosque de las Almas", se hallaba un enorme castillo, el cual lucía paredes de roca negra adornada de piedras preciosas de color rojo y dorado. Haciéndolo bastante ostentoso a la vista.Con un cuarto de cerebro, se podía notar que alguien de poder, ambición y vanidad vivía ahí.Tras el ostentoso palacio había un pueblo lleno de civiles. Súbditos de la persona dueña de aquel castillo.La Reina Ágata.El Bosque de Las Almas posee tan distinguido nombre, por una razón. Su majestad y sus sirvientes han acabado con muchas vidas inocentes para ejecutar sus sagrados rituales oscuros. La sangre siempre es requerida... y no en mínima cantidad.Ya que muchos inocentes han perdido sus vidas a manos de Las Brujas Oscuras... sus almas que buscaban cobrar venganza. Se apoderaron del bosque que les rodeaba.Si una bruja iba al bosque, sufría algún accidente... aquellas almas en pena se encargarían de hacer sufrir a cada bruja oscura que viesen... ellas las cond
Suspiré recargada en la pared mirando como "hablaban" en la sala.-¿y usted quiere que mi hermana se quede con usted para entrenarla físicamente?-si.-¿me está preguntando o solo avisando?-avisando.Rode los ojos, mamá no cambia.-¿usted recuerda que por muy Reina que usted sea de su especie, yo sigo siendo el Alpha aquí y que mi hermana es un miembro de mi manada?-oh,entonces le negarás la oportunidad de aprender a defenderse... nunca esperé eso de ti Edwuard.Drama Queen, literalmente.-ey, ey no he dicho que no...-¿pueden parar ya los dos? Esta no es una decisión de ustedes, sino mía y yo ya elegí.Asinti orgullosa, eso cuñis. Demuestra que tu opinión es la importante aquí.-Cristal, acabas de volver a casa... enserio, no quiero que te vayas.-Edwuard, no seas insensato hermanito. Estamos en guerra, necesito hacer esto para poder protegerme a mí y a quienes quiero. Es verdad que no puedo fiarme solo de mis poderes. Debo aprender y me iré con ella aún con tu negativa.Mire a Edw
Aun dando vueltas por toda la habitación no conseguía calmarme. Ella estaba ahí tendida en la cama mientras susurraba cosas sin sentido bañada en sudor. No oí la puerta abrirse.-¡Edwuard! Cálmate mi niño, dime qué ha pasado.Sus manos detuvieron mi paso y la miré.-solo se desmayó, estábamos caminando en el pasillo y ella de un momento a otro dejó de agarrar mi mano y su cuerpo se fue hacia delante.Caminando hasta ella, le tocó la frente con la mano. Se agachó y puso su oído cerca de sus labios y escuchó lo que ella decía.-¿le entiende algo?Ella negó mirándome preocupada. Se puso de pie.-no... no tengo idea de qué dice, son muy repetitivos algunos sonidos. Por lo que no está hablando incoherencias.Ella recostó la cabeza sobre la cama mientras la agarraba de la mano. Yo no dejaba de morderme los labios, hasta que conseguí herirme y hacer que el olor a sangre se filtrara en mis sentidos.Ya que mi sanación rápida, el olor debía irse pronto. Pero siguió ahí, picándome la nariz de