mamá... -la llame-
-umm-me dijo mientras limpiaba su varita-
《Madre más a la antigua que tengo. 》 Pensé.
-si recuerdas que ya casi no usamos varitas o cetros, nada más que en ceremonias y esas cosas -le dije burlona-
Me sabía la respuesta.
-nena, una bruja nunca debe olvidar sus raíces, aprendiste con la varita, nunca te olvides de la varita-dijo cansada-
-aja-rodé los ojos-
《La varita es anticuada》me dije.
Algunas veces era muy entretenido molestar un poco a mamá, no lo hago por maldad es solo que... bueno, no tengo razones. Solo me gusta molestarla.
Ella suspiró cansada.
-solo.... Deja a tu madre en paz ¿sí? Falta una hora para llegar al reino del Alpha, no me hostigues Courthney, ¿vale? -dijo mirándome fastidiada-
-solo te dejo en paz, porque estoy ansiosa de ver hombres lobo reales por primera vez en mi vida-salte en mi asiento extasiada- ¡Estoy tan emocionada! ¿Para qué crees que nos necesite? ¿No se supone que los lobos son criaturas fuertes? Deben tener serios problemas entonces. -le dije a mi madre, la Reina Isabella-
-cariño ya te lo dije hace más de 2 horas, ¡no lo sé! ¡Deja de jugar con mi paciencia niña! -grito furiosa, y sus ojos azules se tornaron de color blanco-
-Okay, Okay-dije tratando de calmarla-
《Dios que carácter...》suspiro
Aun no entiendo por qué vamos en un carruaje, si con un chasquido de dedos pudiésemos aparecer frente a la mansión del Alpha.
Es hermosa la vista y todo, pero, después de una hora ya no es interesante.
Tantos árboles iguales aburren...
Apoyé mi brazo en la ventana y miré el cielo... faltaba poco para las 8 a.m. observé a mamá y ya que estaba distraída actué.
Moví mi dedo y salió un portal frente al carruaje, el cual cruzamos sin poder evitarlo, mamá me miró furiosa y le respondí.
-quiero ver lobos reales mamá, y en esta cosa-me referí al carruaje-llegaríamos el día de mi muerte-dije dramatizando lo último-
- ¡tú no puedes morir! -grito mi madre-
Ella movía las manos frente a mi indignada mientras me regañaba.
Rodé los ojos.
-con tus gritos algún día mami, alguuun día-dije burlona-
-Ampárame Santa Bruja del Bien, no puedo con esta niña -exclamo dramáticamente-.
Y ahí, es dónde sale lo dramático que hay en mí.
-ay supéralo-seguí molestándola-
Durante unos segundos más mamá susurraba mil formas diferentes de estrangularme.
El carruaje se detuvo frente a una muralla de roca con un portón gigante de acero, con torres centinelas en las cimas de las mismas, guardias en la entrada del portón y más guardias revisando el perímetro.
《Enserio, tienen buena seguridad ¿para qué nos necesitan? 》me dije mirando las muchas torres de vigilancia sobre la muralla.
Mi madre y yo salimos en dirección a los guardias que custodian la puerta de acero.
-saludos -dijo me madre y amabas inclinamos la cabeza como saludo- soy la Reina Isabella. -me miró -y ella es mi hija la Princesa Courthney, como se habrán dado cuenta somos brujas blancas supongo que estaban informados de nuestra llegada por su Alpha ¿me equivoco? -dijo y alzó una de sus cejas-
-sus Altezas, -reverenciaron hacia nosotras como muestra de respeto-no se equivoca Majestad, adelante. -oprimió un botón haciendo que el portón se alzara y nosotras simplemente pasamos-.
-wouuu-exclame maravillada mirando el interior-esto es muy hermoso-susurre-
Seguía a mamá mientras brincaba de la emoción.
Lobos de diferentes colores se pasaban en todo su esplendor, algunos con niños sobre sus lomos, otros simplemente jugando entre ellos, aunque casi no se veían chicas jóvenes.
Perdí de vista a mi madre y a la guardia real de mi reino, además al soldado del Alpha.
Los lobos me miraban cautelosos y aun estando en ese estado alerta ¡me parecían bellísimos!
Alguien me tomó del brazo.
- ¡ah! -grité y me cubrí en una esfera de protección-
Miré al causante.
-tranquila Princesa, solo venía a llevarla junto al Alpha antes de que se dé cuenta la Reina Isabella. -me dijo el soldado-
-oh, si claro- quite el hechizo y caminé atrás de él- ¿su Alpha aún no llega? -le pregunté-
-tengo entendido que aún no Prince-corrí dejándolo con la palabra en la boca- ¡Princesa! ¡¡Princesa no corra podría lastimarse!! -corrió atrás mío el soldado-
El hombre corría apresurado a mis espaldas, pero no pude evitar correr al saber que aún no llegaba el Alpha, mamá está sola ahora. Y eso es bueno.
¡¡Debo contarle a mi madre todo esto!!
Vi como dos de los soldados que nos escoltaban estaban cuidando una puerta grande. Ellos me abrieron la puerta y entendí que mamá estaba adentro.
Al entrar la busqué con la mirada y la vi parada de espaldas.
-¡¡Mamá!! -corrí hacia ella-no sabes lo magnífico que es este lugar. ¡Todos estos lobos son bellísimos! Se veían tan amigables, aunque un tanto alertas-me reí- ¡me encantaría subirme a uno de ellos! Ma- -ella puso su mano cubriendo totalmente mi parlanchina boca-
-¡¡Courthney!! ¡Puedes guardar respeto hacia el Alpha! -me grito y me señalo en dirección a uno de sus costados. -
Ella quito su mano y me giré.
Vi a un muchacho parado frente a nosotras.
Alto, manos grandes en las que sostenía una copa de vino, finas ropas, cabello revuelto, pero con buen aspecto, se ve musculoso, y un poco asombrado.
¿Asombrado?
En ese momento se me prendió el foco.
Hice prácticamente el ridículo frente al Alpha de la manada ¡Qué vergüenza!
Abrí la boca disparando mis disculpas apresuradas.
-cuanto lo siento Alpha. Me encontraba tan eufórica, que no medí mi comportamiento-me sentía avergonzada-Lo lamento tanto Alpha, yo-me callé sin saber que más decir- Yo-yo….
Mi cara esta roja de la vergüenza. Solo a mí se me ocurre actuar así frente a la figura de autoridad de esta manada. No es correcto para una Princesa hacer esto.
Mientras me recriminaba mi estupidez en silencio, mamá llegó a salvarme de este bochornoso momento que yo misma provoque.
-ah, discúlpela, Alpha, es muy inmadura todavía, es una niña aún. -dijo mi madre mirándolo con una sonrisa forzada-
El Alpha carraspeó y por fin hablo.
-Claro, yo entiendo perfectamente -sonrió-no hay problema para nada Reina Isabella. -dijo aun sonriendo mientras me miraba fijamente-
¿Por qué sonríe?
¿ Por qué me mira así?
¿ Qué ? ¿Tengo algo en la cara y se me ve graciosa?
Reaccioné y miré a mi madre, la cual nos veía simultáneamente, y evaluaba con la mirada nuestras reacciones.
Moví mis ojos hacia el Alpha nuevamente, y al ver que seguía mirándome bajé mi mirada sonrojada, por la Santa Bruja del Bien, ¡¿por qué me mira tan intensamente?!, enserio me está intimidando solo con una mirada, lo peor es que está sonriendo y ese detalle enserio me da escalofríos.
Es decir, yo no soy ciega y me doy cuenta de lo bueno que está el tipo. Cualquiera en su sano juicio lo haría y el que semejante hombre te mire fijamente tanto tiempo, es lo que pone nerviosa.
Eso y el aura intimidante que se carga, obviamente.
madre. Hice un sonido con mi garganta. -y em Alpha, ¿para qué nos necesita, si a simple vista su fortaleza parece indestructible? -pregunto mi madre luego de mi sonido incómodo- 《 ¡Lo cual agradezco! 》 -Bien-dejo de mirarme para posar sus ojos en mi madre-estamos siendo amenazados por el Demonio Klarc-dijo- Mamá y yo nos miramos. Es un demonio del cual no se tiene casi información, solo se sabe que sus subordinados atacan en su nombre, se desconoce su rostro y ubicación, ya que al parecer siempre está en movimiento. -ha matado a 100 de mis mejores hombres sin contar a los demás soldados y ha secuestrado a más de 15 mujeres de entre 17 a 20 años, cada que les atacamos perdemos muchos guerreros y nos superan en número, nos debilitamos con plata y ellos lo saben, y además usan una especie de planta rara, han estado a punto de matarme hace unos días, uno de mis hombres más leales se sacrificó por mí-su mirada reflejaba dolor e ira-y ya estoy harto de todo esto con ellos quiero que dej
Luego de desayunar, el Alpha nos indicó cuáles serían nuestras habitaciones, mi madre se quedó a descansar mientras que yo me fui con él para que me muestre a sus guerreros, primero a los heridos en batalla. Entramos en lo que podría llamar una enfermería bastante amplia. Dentro estaban sus guerreros, hombres y mujeres por igual. -bien, todos ellos son los que salieron con vida-dijo con cierto tono melancólico y un poco de odio- -genial-susurre- - ¿genial? ¿esto te parece genial? dijo sarcásticamente mirándome ceñudo- Sonreí en disculpa y llamé la atención de los guerreros. - ¡hola caballeros y señoritas! -me adentre un poco más en la habitación-Soy Courthney Princesa de Las Brujas Blancas-incliné un poco la cabeza como saludo-estoy aquí para ayudarlos a deshacerse de su enemigo. Vengo a curarlos, hacerlos más fuertes y evitar su vulnerabilidad hacia la plata y la flor de que usaron en su contra-los mire detenidamente- necesito que todos y cada uno de ustedes cierren lo ojos y t
-como escuchaste, Courthney... -dijo mi madre suspirando- 《 ¡¿Cómo puede ser eso posible?!》 -pe-pero mamá eso... ¡¡Eso es imposible!! Yo, yo -realmente no sé qué decir- Se supone que los lobos tienen sus parejas de ¡misma especie! ¿Verdad? -dije y me abracé a mí misma caminando en círculos- 《Esto no puede estar pasando, no soy la mate de ese hombre》 Uno lo suficientemente atrevido como para guiñarle el ojo a una completa desconocida. 《No, definitivamente no quiero una pareja así》 La voz de mamá me trae aleja de mis cavilaciones mentales... -técnicamente eso no es un impedimento hija-suspiro- Mis piernas seguían caminando en círculos. -Courthney, Tu padre y yo éramos seres de distintas especies y eso no fue un problema para nosotros-dijo y me detuvo agarrando mi brazo- La miré a los ojos, perlas azules me miraban con el amor que solo una madre da. -escúchame, cariño, tu... debes dejarlo ir, no tiene caso que sigas sufriendo por esto, tu mereces ser feliz... Debes dejarlo ir..
A la mañana siguiente después de desayunar Edwuard me llevo con el resto de sus guerreros. La verdad aún estaba nerviosa por el fresco descubrimiento de ayer. Así que, me concentraré en entrenar a sus soldados para no pensar en eso. -bien... aquí estamos Courthney ¿qué piensas hacerles? -me preguntó Edward- -tranquilo no me los comeré Eduard. -le dije en broma- Se río y miró a sus guerreros seriamente. - ¡ATENCION! -todos se pusieron firmes a esperas de las ordenes de su Alpha. -esta señorita, la Princesa de las Brujas Blancas, nos brindará su ayuda para vencer a el demonio apestoso que ha dañado a nuestra gente y quitado miembros importantes de nuestro pueblo. -dijo con un tono fuerte. -la obedecerán en todo así como princesa y ¡como su Luna!.-los ojos de todos se abrieron y empezaron a murmurar entre ellos- Luna... entiendo que ese es el nombre que toma la destinada del Alpha. Me sonrojo un poco, pero se me quita rápidamente por un grito. -A CALLAR TODOS. -gritó Eduard. -ella
Edward.No me gustaba para donde iba esto, el solo pensar que ese idiota de Malcom hiriera a mi chica me hacía hervir de ira. No digo que ella no sepa defenderse, pero no debería retar a un hombre lobo a esto somos más fuertes que ella si hablamos en términos de fuerza física.Ella se quitó la blusa y quedo en un top deportivo, y adoro que tenga un bonito cuerpo, pero, no cuando los demás de mi manada la miran tan descaradamente.Me acerque a ella.-oye, no hagas esto Courthney. -trato de hacerla entrar en razón, saldrá mal parada de esto, lo sé -- ¿qué se supone que quiere decir tu comentario? -me reto con la mirada y con sus
CourthneyTodo esto es mi culpa.Todo por mi estúpida idea de ver lobos y de salir de esas gigantes paredes.Nunca debí salir de casa.- ¿puedes mirarme Courthney? -escuché--mamá yo... Esto es mi culpa -lágrimas bajaron nuevamente de mis ojos--nena no, no es tu culpa, ya tenemos un plan Leo y yo para arreglar esto-la miré inmediatamente-- ¿Cuál? -la tomé del brazo para que se sentara a mi lado en la cama--yo regresaré, arreglaré los daños, curaré a los herid
Ha pasado una semana desde la "charla" que tuve con Edward, he estado entrenando junto a él y a sus soldados, tal como mi madre dijo debo prepararme para proteger a mi pueblo. Aún no superó el no haber estado en casa y proteger a la gente que me vio nacer y crecer. Nunca les perdonaré el haber dañado a mi familia. Por eso protegeré con todo lo que tengo a esta manada. No los dejaré caer.
EdwardCourthney. Mi Linda y adorada Mate...Voy a matarla.¿¡Cómo pudo hacerme esto!? ¿¡Es qué no tiene Corazón!?No sé cómo rayos me volvió humano, pero... ¡apenas salga de aquí va a oír!Ese pequeño demonio. ¿Cómo es que una cosita tan tierna y pequeña puede ser tan malvada?¡ACHU!De acuerdo... esto ya no me gusta.¡ACHU!Esto es malo.
Último capítulo