BUENA:Con la ayuda de la bruja Lisa logré cambiarme con un hermoso vestido dorado con los hombros caídos y un cinto negro, el vestido no era ni censillo ni elegante… Era perfecto. Lisa me maquilló de manera elegante y me hizo un hermoso moño recogido con varias horquillas. —Estás muy hermosa, pareces una muñeca de porcelana. Dice Lisa mirando el gran trabajo que hizo en mi.—Gracias. Digo sintiendo mis mejillas rojas. —Dime, ¿ya sabes lo que le vas a decir al alfa? Me pregunta y niego. —¿Sabes? Ni siquiera he terminado formalmente la relación que tenía, pero siento que he vivido más cosas interesantes en el poco tiempo que llevo con Lucían qué con los años que pasé al lado de Malon. —La conexión de los mates es muy fuerte, sólo será cuestión de días para que sientas que no podrás separarte ni un segundo de él. Dice Lisa mirando hacía la nada con una sonrisa. —¿Usted tuvo un mate? Le pregunto curiosa y ella sonríe. —Eres bastante curiosa pequeña… Pero sí, una vez tuve un m
BUENA:—Estás muy feliz.Me pregunta Lucían caminando junto conmigo por la gran plaza.—Claro que sí ¿Viste su cara? Jajaja.Lician se ríe junto a mí y los dos observamos un puesto de carne asada qué está lleno de gente. —Espérame aquí vuelvo ahora. Dice Lucían marchándose hacía allá. —No espera… Hablo, pero ya era muy tarde, así que decido esperarlo como dijo. —¿Necesitas compañía? ¿Qué hace una dama sola en estos lugares? Volteo a mirarlo y es el mismo panzón de la posada. Él me mira con una sonrisa asquerosa. —Pero si eres la chica de la posada… ¿Aún estás prestando tus servicios? Mira que puedo darte todo lo que quieras. Habla acercándose demasiado a mí. —Ni aunque estuviera ofreciendo “Servicios” me acostaría con usted. Digo con el ceño fruncido mirándolo mal. El panzón se molesta y me mira mal. —Quería hacerlo por las buenas, pero al parecer te crees demasiado. Dice y observo cómo hace una señas a unos hombres. Intento correr hacía dónde está Lucían, pero uno de
En una posada cerca del pueblo un grupo de hombres tenían una conversación. —¿Cómo que no lo encontraron? Les dije que buscaran en todas partes. Dice un hombre con una capa negra. —Lo hicimos maestro, pero al parecer se ha ocultado muy bien. Dice unos de sus hombres casi temblando, el maestro no es alguien pasivo, siempre elimina a todos lo que no cumplen con un mandato. —Este lugar es grande, sarcan, estos muchachos han hecho el trabajo, no es su culpa no encontrarlos. Habla un anciano mientras disfruta de una manzana verde. —Salgan todos. Dice enojado y los hombres excepto el anciano se marchan sintiendo un poco de alivio. — ¿Crees que ese estúpido alfa es el indicado? Pregunta cruzando las piernas. —Es él estoy seguro, el vampiro inepto qué tienes como aliado me trajo un poco de su sangre y ya lo he comprobado. —Menos mal que lo has comprobado, no quiero cometer otro error al igual que sus padres. Dice con una sonrisa siniestra. —Eso no volverá a ocurrir, por culpa de
GERSON :Escuché claramente lo que dijo Mariana, pero quiero que lo repita para estar seguro. —¿Qué dijiste? Le pregunto acercándome a ella y la noto muy nerviosa. —Gerson… De verdad no fue a propósito, tomo medicamentos para suprimir mi celo desde siempre… Es muy fuerte y nos traería problemas… Por eso no me di cuenta cuándo estaba en celo… Dice al borde de las lágrimas. —Mariana… No te estoy pidiendo explicación… Sólo te pregunté lo primero que me dijiste. Hablo con suavidad tomando sus manos. Ella limpia su nariz qué ya está roja, me mira a los ojos y habla. —Es… Estoy… Embarazada. Dice y se pone a llorar. Limpio sus lágrimas con paciencia y supongo que deben de ser las hormonas del embarazo. La estrecho en mis brazos sintiendo una emoción indescriptible… Seré padre… Cielos seré padre. Pienso mientras siento ganas de aullar de la emoción. —Seremos… ¿Dónde me dejas a mí humano tonto? Escucho la voz de mi lobo igual de emocionado. —Cierto… Es la emoción, perdón. Le di
BUENA:Estos últimos días de viaje fueron una maravilla junto a Lucían. Los chicos se acostumbraron a nuestros encuentros qué cada vez que ellos miraban una miradita coqueta se retiraban con la excusa de verificar o ir a cazar algo. Lucían los chicos y yo disfrutabamos cada comida con unos cuentos y chistes aburridos qué decía Brandon… La verdad eran geniales y no quería llegar a la manada, pero como dicen… Lo bueno nunca dura para siempre y aquí estoy a unos diez minutos de la manada. Los guardias sabían lo que se avecinaba, planeamos cada movimiento con ellos por eso nos dejaron solos a Lucian y a mí. —No se como fingiré odiarte. Dice mientras me tiene estrechado en sus brazos. —Lo harás bien, no podemos delatarnos frente al enemigo será un gran problema. —Lo sé… Voy a hacer mi mayor esfuerzo para matarlos a todos y vivir tranquilamente contigo, esa es mi primera prioridad. Habla besando mis labios con cariño. —Ya es hora de ir a la manada. Le susurro sintiendo tristeza al
BUENA :Al día siguiente continuó con mis labores como lo hacía antes. Escuché de algunos sirvientes qué el alfa estaba tan molesto que sacó a su beta de su despacho y nadie se acerca a él, todos tienen miedo de enfrentar su furia. Con un suspiro subo las interminables escaleras y llego a la gran puerta negra de su despacho. Cómo puedo abro la puerta y casi dejo caer el desayuno cuándo unos fuertes brazos me rodean. —Te extrañé tanto. Me susurra dejando un beso en mi cuello. —Lucían, es peligroso si alguien nos encuentra en esta situación. Le digo separándome de él para colocar el desayuno encima de la mesa. Él bufa y se sienta pasando la mano por su pelo. —Quisiera escaparme contigo y olvidarme de todo. Dice con un suspiro. —¿Qué pasa? Escuché que todos tienen miedo de entrar aquí y que has botado a tu beta de aquí como un perro. Lucían gruñe y golpea la mesa. —Ese maldito… Se atrevió a embarazar a mi hermanita y la muy cínica ni siquiera me ha dado la cara. Dice enojad
BUENA:Escuché por chisme de algunas sirvientas qué el alfa sacó a su tío y sobrino de su despacho y que ahora estaba peor que hace horas. También escuché que es tío de Lucían por parte de padres y que siempre ha estado celoso por que no le dieron el cargo de alfa. Escuché por igual qué su hijo es un maldito y hay que andar con cuidado con él. Durante el día evité estar en los lugares a solas y siempre me mantuve alerta. No le lleve el almuerzo a Lucían porque hoy comió con toda su gente en una gran sala. En estos momentos me encuentro en mi celda descansando un poco. Escucho como mi puerta es abierta y me levanto para ver quién es. —Él alfa me encargó de alimentarla bien señora. Dice Brandon entregándome una bandeja de comida. —Gracias Brandon, pero no me digas señora… Recuerda que las paredes tienen oído. —Cierto, una disculpa. Dice bajando la cabeza un poco. —Tampoco te dirijas a mi con tanto respeto… Sería muy extraño. Digo mientras destapo la comida y empiezo a devo
BUENA:Luego de una sección de sexo increíble es hora de irme, pero el niño Lucían no quería permitirlo. —Lucían debo irme. —No quiero que te vayas. Dice haciendo un puchero y me río. —Pareces un niño. Le recrimino. —Soy tu niño, y piensas abandonarme, no es justo. Vuelve a decir mientras oculta su cara en mis pechos. —Lucían… Le reprocho y él se separa de mí. —Está bien, vístete qué llamaré a uno de mis hombres para que te escolten, ese maldito de Maicol debe de estar rondando por ahí. Dice y asiento de acuerdo con él. Cuándo termino de vestirme Brandon entra a la habitación de Lucían. —Alfa. Dice haciendo una reverencia. —Brandon, necesito que lleves a Buena a la celda, no permitas que nadie se le acerque, ni mucho menos el inútil de Maicol, si le pone un dedo arriba matalo. —Sí señor.Dice Brandon y me acerco a Lucían. —Sí lo matas estarás en problemas. —Lo sé, pero habrá una rata menos… Nadie puede tocarte excepto yo. Dice y besa mis labios… Cada vez se vuelve m