–¿Por qué no puedo entrar en la sala del trono?–Aunque usted alteza será la esposa del gran visir, hay momentos en los que tanto usted como la sultana no serán requeridas en la sala del trono, si usted entrara sin permiso, se le dará la muerte sin contemplaciones – dejando a la joven pasmada–Es algo extremo…–Esto se debe alteza, ya que hace muchos años la esposa del gran visir, interrumpió una audiencia en la sala del trono, y escuchó cosas que no debía, más que todo información de los puntos vulnerables del sultanato del sur…esa mujer traicionó al sultanato al dar esa información a los Mongoles – dejando a Aysa pasmada– ¿Qué…qué le sucedió a esa joven?–Fue lapidada alteza – viendo como Aysa se lleva las manos a la boca – esa ley, se aplica también a la sultana, tal vez cuando lleguen sus clases de política se la hagan saber–No tienen nada que temer – dando una sonrisa – nunca traicionaría a Acemi, y sé que Adalet no traicionaría a su majestad–Lo sabemos majestad usted es el gr
–Sí padre…– ¿Qué opinas de esto?–Mi madre solo me hará ver mal – dejando a la mujer en shock – padre ¿Por qué no mejor la destierra del harén? Hará ver mal la tradición del baile de la sultana y el nombre de mi padre quedará en entredicho–Hijo dime ¿Qué edad tienes?–En unos meses cumpliré once años padre–Ceren, nuestro hijo tiene la inteligencia que yo tenía a los dieciocho ¿Por qué no puedes ser como él? – viendo como la mujer muerde su labio – ¿harás el baile?– ¡Yo no lo sé alteza!–Entonces no tienes derecho a pelear por ser la sultana, no tienes la educación, no tienes la preparación y sobre todo no tienes mi atención, si eres la madre de mi hijo fue porque así lo quiso el dios del mar…pero tú nunca me has agradado como mujer– ¡Alteza! – dejando que las lágrimas bajen por sus ojos–Ayaz– Sí alteza – colocándose al lado del sultán–Esta es la última vez que pasas los comentarios de esta mujer, una más y será desterrada del harén y si persiste será echada de mi palacio – mir
–Cuando el sultanato fue creado, nuestro gran primer sultán Levent, al vencer al enorme dragón guardián de los mares, decidió que en este lugar sería creado el palacio de la capital de su sultanato, justo en el risco donde aquella joven saltó hacia los mares– ¿Eh?–Alteza afuera del palacio donde se puede apreciar la inmensidad del mar, está el risco en donde la diosa del viento saltó para verse con su gran amor…tenga presente esto alteza, solo el mar y el viento pueden bendecir su matrimonio con su majestad Aguas Negras– ¿Por qué?–Porque solo el amor que le profesa su majestad es tan puro como el que el mar demostraba por esa joven – haciendo sonrojar de golpe a Adalet–Así que los dioses…–Ellos han aceptado su unión, al encontrarse mientras usted hacia sus ensayos, aprueban el amor de Aguas Negras hacia usted– ¿Eh? – mirando fijamente al eunuco–Es claro que su majestad la ama alteza, aunque su reservado carácter le impida mostrarlo abiertamente – sonriendo al ver el sonrojo de
–Ven Adalet– extendiendo su manoCuando la joven la toma es girada y su espalda choca contra el pecho del sultán, Zeheb toma el velo que reposa sobre el rostro de su prometida y lo retira; la joven gira su rostro y recibe un beso en los labios, y mientras están besándose, Zeheb suelta poco a poco su vestido hasta que lo toma de los hombros y desliza hacia el suelo dejando a su futura sultana con el camisón y el velo sobre su cabeza.–Zeheb…– ¿Qué pasa? – girando a la joven para apreciar nuevamente su cuerpo– ¿Te…te dijeron?–Me dicen demasiadas cosas durante todo el día, debes ser más exacta – levantando una ceja claramente divertido al ver el puchero de la joven–Bueno, quería saber si te dijeron sobre lo que pasó hoy durante mis ensayos–Sí, Elif me dijo lo que hiciste – tomando la mano de Adalet para besarla – y ahora que los dioses han dado su bendición, podremos casarnos sin ningún inconveniente, dime ¿Cómo vas con el baile?–Ya solo falta la última coreografía, ya he memorizad
Al sentir como su prometida llega al clímax, corriéndose entre sus vientres y jadeando por el placer recibido, Zeheb decide tomarla en brazos y la lleva hasta la cama en donde la acuesta, le retira por completo el camisón y simplemente se acuesta a su lado, disfrutando del maravilloso perfume que Adalet tiene impregnado en su cuerpo, solo así el sultán puede conciliar el sueño ahora…….–Alteza espero no estar molestando – entrando en la habitación que ocupa Aysa–Acemi – dando una enorme sonrisa, mientras se acerca a Berat y lo abraza–Veo que su alteza me ha estado extrañando – sonriendo–Acemi, no te vi en todo el día – sonrojándose ante sus propias palabras–Descuide su alteza, en dos semanas podremos estar juntos– ¿Eh?–Hablé con el sultán y él está de acuerdo en que nos casemos en dos semanas – dejando a la joven sorprendida – ¿no quiere alteza?–Claro que quiero Acemi, no quiero alejarme de ti, no quiero – colocándose de puntitas para besar al hombre en los labios – pero mi pa
–Hmnmm – dando media vuelta para marcharse pero antes toma la mano de Defne – ¿vamos?–Vamos alteza – dando una sonrisa – mi señor…–Vendré a verte a ti y a nuestra hija más tarde–Esperaré por la visita de mi señor – haciendo una reverencia mientras se marcha…–Ya sabes Ceren, tienes hasta el mediodía – marchándose en medio de reverencia– ¡Alteza! ¡alteza espere! – mirando a las demás esposas y consortes – ¡¿Qué me ven?! ¡deberían apoyarme! ¡yo puedo ser muy generosa si soy la sultana!–Ceren… ¿Qué opinaría su majestad de enterarse de esto?–Ayaz…–Ve por tus cosas, no quiero ver tu presencia, ni tampoco darme cuenta de que quieres sublevar a mis bellas criaturas en contra de su alteza – mirando a los demás consortes y esposas – mis bellas criaturas ¿Qué opinan del ofrecimiento de esta mujer?–Nunca fallaríamos a su majestad, nuestra lealtad es al sultán Aguas Negras – diciendo todas en coro– ¿Ves? Ahora ve por tus cosas…….–¡No es posible! – totalmente boquiabierta al ver que en
Aysa se sonroja de golpe, y lleva sus manos a su carita para tapar su terrible sonrojo, Berat se acerca y toma sus manos para besar de forma dulce y delicada sus labios, el beso es correspondido con la misma ternura, así que lleva sus manos al rostro del joven y lo acuna con cariño, al separar sus labios da un tierno beso en la frente del joven.–Si su alteza no quiere, no tiene por qué sentirse presionada–Acemi – totalmente rojo – yo quiero – volviendo a tapar su carita – “si no te veo, tú tampoco me ves”–Entonces – acercándose y descubriendo el rostro de Aysa – su alteza deberá perdonarme por mi atrevimiento– ¿Eh? ¿atrevimiento? – viendo como Berat se coloca de pie, la ayuda a levantarse de aquella manta, para luego girarla y hacer que su espalda choque contra su pecho – ¿Acemi?–Alteza me he contenido por respeto a usted, pero al menos quiero tener la oportunidad de verla sin tanta ropa molesta – haciendo sonrojar a Aysa, hace a un lado su largo cabello y mientras besa el cuello
Sus cuerpos se rozan creando una fricción placentera, ya han llegado varias veces al clímax manchando las claras aguas con sus esencias, mientras que Berat solo acaricia y disfruta del cuerpo virgen de su prometida.Al culminar, ambos están abrazados, acariciando los labios contrarios, y verdaderamente satisfechos, y Aysa ha empezado a contar las horas para poder estar al lado de Berat y entregarse por completo a su hombre…….–Mi señor – acercándose junto con su pequeña hija quien duerme succionando su mano– ¿Cómo está ella? – bajando la vista y acariciando la cabecita de su hija–Nuestra hija está mejor mi señor – haciendo una reverencia – los cuidados dejados por el médico real y las hiervas que nos dio su alteza han ayudado a mi Aiyla – arrullando con cariño a su hija–Ven conmigo – llevando a la joven de la cintura hasta unas sillas debajo de un árbol frondoso – ¿Cómo te has sentido tú?– ¿Eh? – dedicando una mirada a Zeheb quien simplemente la observa con esos ojos dorados tan